El presidente Alberto Fernández dijo que “los argentinos cuando nos olvidamos de las diferencias y entendemos dónde está lo importante hacemos cosas como las que hoy llevan adelante la UBA, el Invap y la CNEA, que solo nos llenan de orgullo”.
Fue al recorrer este mediodía el Centro Argentino de Protonterapia (CeArP) que se construye en el barrio porteño de Agronomía, y que se transformará en la primera institución de tratamiento del cáncer con protones de toda América latina y del hemisferio sur.
“Cosas como ésta ocurren cuando el Estado se dispone a ponerlo en marcha, cuando se decide a unir esfuerzos y a ocuparse de los problemas de la gente. Porque aquí, este aparato cuya construcción va a necesitar unos años, va a darle solución a 5 mil argentinos afectados en su salud por una enfermedad tan difícil como es el cáncer, y además va a permitir desarrollar investigaciones”, detalló el Presidente.
El proyecto, que estuvo frenado durante la gestión anterior, permitirá que la Argentina cuente con una tecnología actualmente disponible sólo en 20 países.
“Hoy podríamos tener acá a pacientes oncológicos atendidos, y ese aparato de tan avanzada tecnología estaría ayudando a mejorar la vida de esos pacientes y eso no se hizo porque alguien creyó que no era importante”, indicó el mandatario.
Agradeció a los presentes porque “nunca claudicaron en esos cuatro años y nunca cedieron”, y destacó que “el amor por la gente vence al odio”.
Del acto participaron el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; la ministra de Salud, Carla Vizzotti; el rector de la Universidad de Buenos Aires, Alberto Barbieri; la titular de la Comisión Nacional de Energía Atómica, Adriana Serquis.
Vizzotti destacó la importancia de contar con “un Estado presente con la decisión política que prioriza la ciencia, la tecnología, la innovación, la educación y salud pública, y poner en valor ese círculo virtuoso”.
Recordó que “el Instituto Nacional del Cáncer es parte de este trabajo para favorecer el acceso al diagnóstico, tratamiento y rehabilitación” y señaló que “este Centro Argentino de Protonterapia va a fortalecer al país y a la región también con la perspectiva de investigación”.
Por su parte, el rector de la UBA, Alberto Barbieri, valoró la “decisión política de volver a poner todo lo que tenía que poner el Estado desde el punto de vista de financiamiento”, y agradeció al “Presidente, por apostar a la salud pública, a la ciencia y a la tecnología”.
Además, la presidenta de la CNEA, Adriana Serquis, señaló que la incorporación de esta aparatología al centro de Protonterapia se destinará “no solo al tratamiento de pacientes sino también a la investigación y desarrollo de nuevas terapias, lo que implica un impulso hacia nuevas tecnologías”, porque el Gobierno nacional cuenta con “la idea de que la ciencia y la tecnología estén al servicio de la sociedad”.
Días atrás llegó desde Bélgica equipamiento, como un ciclotrón y partes asociadas al transporte de protones que, junto a otros equipos de última generación, serán instalados en el edificio de casi 8.000 metros cuadrados que se está construyendo.
El CeArP se encuentra lindero a la Fundación Centro de Diagnóstico Nuclear y frente al Instituto de Oncología Ángel H. Roffo, instituciones con las que estará vinculado para la atención y el abordaje integral de pacientes con cáncer.
Además, tendrá dos sectores de tratamiento clínico: con protones y con fotones. También incluirá un Laboratorio de Investigación y Desarrollo en Protonterapia destinado a promover actividades de investigación y formación de recursos humanos y podrá ofrecer servicios a la industria, como por ejemplo calificación de componentes de satélites, entre otros.
La protonterapia es una de las terapias con las que cuenta la medicina nuclear para tratar diversas enfermedades oncológicas, en especial tumores de difícil acceso. Por su precisión, es considerada la forma más avanzada de radioterapia, ya que los haces de protones que se utilizan dejan la mayor parte de su energía en el tumor y preservan los tejidos sanos cercanos, mejorando así la calidad de vida de los pacientes.
Se trata de una terapia que presenta beneficios específicos en la atención a niños con cáncer, por lo que los profesionales del CeArP trabajarán en estrecha colaboración clínica con el Hospital de Pediatría Juan Garrahan.
Durante el acto dejó inaugurado también, mediante videoconferencia, el Bioterio que funciona dentro del Instituto de Oncología “Ángel H. Roffo”.