Acto de reconocimiento a la Red Federal de Control Público: Palabras del Jefe de Gabinete

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PALABRAS DEL JEFE DE GABINETE DE MINISTROS, JORGE CAPITANICH, EN EL ACTO DE RECONOCIMIENTO A LA RED FEDERAL DE CONTROL PÚBLICO, REALIZADO EN LA CASA DE GOBIERNO

 

Muy buenos días a todos y a todas.

Al señor Síndico General de la Nación; señores miembros de distintos organismos de Control Externo; señor presidente del Secretariado Permanente; ministros, ministras del Poder Ejecutivo; representantes de otros países que nos visitan; intendentes; funcionarios; público en general: muchísimas gracias por estar y acompañarnos en esta oportunidad.

Después de tan claras, excelsas y profundas reflexiones, la verdad es que solamente me queda transmitirles el beneplácito por el lanzamiento de esta Red Federal de Control Público, manifestar las cálidas y afectuosas salutaciones de nuestra presidenta de la Nación, la doctora Cristina Fernández de Kirchner, por este emprendimiento que es la continuidad de lo que oportunamente se suscribiera el 28 de abril del año 2004, por el entonces presidente Néstor Carlos Kirchner, precisamente para articular una Red Federal que hoy tiene 38 organismos integrantes, y que de acuerdo a lo que nosotros hemos podido evaluar en este informe inicial, 5.000 personas capacitadas, 8.500 participantes y una red que efectivamente nos ha permitido vigorizar las estrategias de supervisión y fiscalización de los principios básicos y de la ejecución de los principios básicos de eficiencia, eficacia, legalidad y transparencia de los actos administrativos desde el punto de vista de la asignación de recursos.

Y es muy bueno, a veces no se sabe esto pero creo que tanto Alicia como Julio lo han expuesto con nivel de detalle y por supuesto lo podría hacer también Alberto, respecto a la relación existente entre cada ministerio y la formulación de las políticas públicas con objetivos y metas, las transferencias de recursos y los sistemas de supervisión y fiscalización y control por parte de los organismos para identificar claramente la asignación de recursos y el impacto del mismo en el desenvolvimiento efectivo del territorio.

Nosotros por instrucción de la presidenta de la Nación, en la Jefatura de Gabinete de Ministros hemos impulsado la realización de 204 objetivos y 274 metas en el período 2014 y 2015.

Esto implica cumplir objetivos y metas ambiciosos, por ejemplo, la reducción de la mortalidad infantil a un dígito. Como bien decía Alicia, partimos de la base del año 2003 con casi 16 por mil, una reducción sistemática que nos va a llevar a una meta de 9,8 por mil, o sea de un dígito para el año 2015.

Eso es algo extraordinario pero a veces este indicador “mortalidad infantil” no significa nada si no lo ponemos en valor cuando decimos que es un niño menos que se muere, y eso es producto de la sensibilidad de un gobierno que es capaz de proteger socialmente a todo lo que significa la vida humana.

Esto es trascendente no solamente por el tema de reducción de mortalidad materna, de mortalidad infantil, sino lo que significan las políticas de inclusión. Para que ustedes tengan una idea muy precisa, el presupuesto público, porque muchos hablan del gasto público, del déficit fiscal, pero nadie habla para qué efectivamente se utilizan las herramientas de políticas públicas y del gasto público para asignarlo en cada uno de los territorios.

Primero, el gasto público, el 74 por ciento se destina en cada una de las provincias argentina, 74 por ciento. En segundo lugar, 120.000 millones de pesos es salarios y remuneraciones globales por distintos aspectos que tienen que ver con la ejecución de las mismas; 80.000 millones de pesos es todo lo que significa gastos operativos y de funcionamiento del sector público; 105.000 millones de pesos es los servicios de capital e intereses de la deuda; 285.000 millones de pesos se estiman aproximadamente en transferencias corrientes, que mucho tiene que ver con no solamente con lo que se denomina el tema de subsidios. Los subsidios, en definitiva, tienen un doble adjetivo, por un lado implican la reducción de un insumo estratégico para el desarrollo industrial, que es la energía. El costo energético más barato estimula a que las industrias inviertan para procesar la producción, la generación de valor agregado, el sostenimiento de políticas expansivas en materia de empleo. ¿Y eso que significa? Tener más industrias significa más producción, más producción más empleo, más empleo más salario, más salario más consumo, más consumo más actividad, más actividad más recaudación. Ese círculo virtuoso es producto de políticas públicas activas.

Lo mismo ocurre con lo que significa el ingreso disponible para las familias. Muchas veces el gobierno recibe muchas objeciones desde el punto de vista del precio final del gas, del precio final de la energía eléctrica, del precio final que promueve para los servicios que tienen que ver con agua potable y cloacas, pero la verdad es que para muchas familias se trata de un incremento por vía indirecta del ingreso disponible. Es decir, las familias en vez de destinar una parte de sus ingresos a un servicio público más caro, que podría ser prohibitivo o que podría generar condiciones de imposibilidad para su acceso, lo que hace es utilizarlo efectivamente para el consumo de otros bienes y servicios para potenciar la demanda agregada, para aumentar el consumo, para promover la actividad económica, para que esa actividad económica implique financiamiento desde el punto de vista tributario, y en consecuencia, el sostenimiento de la actividad del sector público.

Y la verdad es que muchas de las transferencias son de distinta naturaleza y características. Por ejemplo, en la República Argentina, desde el 25 de Mayo del año 2003 a la fecha, se han distribuido 67 millones de libros. O pensar que con recursos públicos nacionales, municipales o provinciales, entre escuelas nuevas y refaccionadas a nuevas y ampliaciones, se ha llegado a cerca de 10.000 escuelas en toda la República Argentina.

O que a partir de las políticas de inclusión social hoy tenemos por la Asignación Universal por Hijo 1,2 por ciento del Producto Interno Bruto en materia de inclusión social. Eso implica que nuestros niños, adolescentes y jóvenes tienen garantizado el acceso al derecho a la educación y la salud.

O que la cobertura previsional haya aumentado del 66 por ciento a casi el 93 por ciento en los últimos 11 años, lo cual implica un enfoque extraordinario desde el punto de vista de la inclusión, la equidad distributiva y la resolución de un problema de distribución inter temporal del ingreso. O lo que decía Alicia desde el punto de vista de las acciones en el territorio, porque es absolutamente imprescindible sostener y pensar en la economía social. ¿Cuántas personas quedaron excluidas absoluta y sistemáticamente por muchos años, de la posibilidad del acceso al empleo o al trabajo digno? ¿Cuántos hijos no pudieron ver a sus padres trabajar todos los días? ¿Cuántos hijos de esos padres que estaban desempleados no podían ir a una escuela? ¿Cuántos de esos hijos no tenían una cobertura desde el punto de vista de vacunación? Hoy tienen 16 vacunas de carácter obligatorio, es la mayor cobertura de América latina y es una de las mayores coberturas preventivas en materia sanitaria del mundo por parte de la República Argentina.

Y cuando sumo eso, también me parece importante observar que el presupuesto público contiene transferencias a las provincias argentinas en aproximadamente 264.000 millones de pesos, en materia de coparticipación federal, de distribución automática y otras transferencias nacionales.

O también lo que significa el impacto desde el punto de vista de estas políticas activas en materia de la Seguridad Social. La seguridad social ha incrementado de 5 puntos del PBI a casi 12 puntos del PBI, para este año es probable pensar entre  445 y 475.000 millones de pesos.

Ahora bien, ¿por qué se puede hacer todo eso? Por una razón muy sencilla, porque la política económica ha estimulado la demanda agregada, el consumo y esto ha posibilitado tener 6 millones de puestos de trabajo. ¿O ustedes cómo creen que se financia la seguridad social? Se financia de aportes y contribuciones. ¿Y quiénes aportan? Los trabajadores cuando tienen trabajo. ¿Y quiénes contribuyen? Los empleadores cuando pueden emplear. ¿Y quiénes además contribuyen al sistema de seguridad social? Los empresarios y trabajadores con los impuestos directos e indirectos. Entonces eso genera un impacto redistributivo extraordinario, porque la cara visible de los que trabajan en cada una de las localidades de nuestra extensa geografía territorial de más de 2,7 millones de kilómetros cuadrados, octava superficie del mundo, es llegar a un pueblo, a una localidad.

Lo que muchos no dicen en la Argentina es que nosotros tenemos un programa de fibra óptica de 51.000 kilómetros de extensión, eso implica pensar para el año 2015 en una interconexión en tiempo real para que una localidad como La Eduvigis en el Chaco se pueda comunicar en tiempo real con una transparencia y una calidad extraordinaria de un servicio público. Si eso no hubiera ocurrido por parte del Estado La Eduvigis no estaría conectada y los alumnos de La Eduvigis no podrían usar su netbook ni conectarse ni a su vez acceder a una tecnología eficiente.

Esas son las políticas públicas que tienen impacto territorial. Cuando uno piensa en ese trabajador excluido, piensa en una economía social y a partir de ahí hay que diseñar políticas públicas activas. ¿Y cómo se diseñan? A través de cooperativas. O el programa Ellas Hacen, uno tiene que ir y recorrer lo que significan las mujeres activamente integradas al programa Ellas Hace, con su capacitación, su perfeccionamiento, terminar sus estudios, lograr dignidad y lograr que por su propia voluntad y sus propios medios, a partir de esta política activa por parte del Estado, se les permita verdaderamente un proceso de transformación extraordinaria en su calidad. O el caso de Fines, un millón y medio de personas, 500.000 ya han terminado sus estudios a partir de este programa Fines. Esto es pensar las políticas públicas con un sentido de equidad y de inclusión.

Pero para eso hay que tener equipos de trabajo, para eso hay que tener identificación de la demanda en el territorio, para eso hay que tener militancia en la más profunda concepción de su sentido. Militancia significa dar testimonio de vida. Y uno da testimonio de vida desde la vocación por lo público, interviniendo en los problemas de la gente y resolviéndolos, porque la verdad es que en la República Argentina durante muchos años de nuestra historia en definitiva muchos dirigentes políticos actuaban como comentaristas deportivos o como simples periodistas, o sea comentando la realidad. Una cosa es tener una idea, porque ideas tenemos todos, y de buenas ideas está lleno el mundo, lo importante es transformar las ideas en acción y para eso se necesita la política en el más profundo sentido de la palabra.

La política no solamente significa planificar para hacer, hacer para comunicar lo que se hace, sino también una dimensión de convicción, de responsabilidad y de coraje. Muchas veces uno cuando observa a ciertos dirigentes políticos en la Argentina, con una impronta de especulación permanente y de enorme cobardía, se pregunta si esos dirigentes podrían enarbolar las banderas que permitan garantizar la inclusión social y la equidad. Porque a veces frente a un mundo de una injusticia social en donde el 1% de la población se lleva entre el 43 y el 47% del ingreso y el 50% de la población solamente el 2%, estamos hablando de que existe un mundo desigual y existe injusticia social internacional. Y la injusticia solamente se repara de una manera, con justicia social. Y la justicia social implica tener un Estado organizado con capacidad para regular la asignación de los recursos del Estado.

Y eso significa terminar con las recetas decimonónicas del liberalismo para tener una concepción profundamente justicialista, que implica finalmente poner al Estado al servicio del pueblo para transformar su calidad de vida, para pensar que el sueño no solamente corresponde a unos pocos privilegiados sino que el sueño es efectivamente ejercer derechos.

Como decía Alicia, no es lo mismo tener beneficiarios en la vieja concepción neoliberal que tener derechos, porque el derecho se ejerce, y se ejerce de un modo transparente, y la transparencia en el ejercicio de derechos implica también tener una red de control y tener efectivamente organismos que sean capaces de verificar que el derecho se aplica, se ejecuta, se cumple, porque hay convicción de la presidenta de la Nación y de cada uno de los funcionarios que son responsables de las áreas competentes.

A veces muchos medios de comunicación, desde una concepción monopólica desde el punto de vista mediático, lo único que hacen es pretender minar la credibilidad y la confianza de quienes construyen, pero el mundo ha sido siempre así, muchas veces injusto con aquellos que luchan todos los días para transformar la realidad. Desde ese hermano nuestro, que en algún momento perdió la esperanza porque no conseguía tener un acceso al trabajo y hoy lo puede hacer.

Por eso las políticas públicas son extraordinarias o muy amplias, van desde la Asignación Universal por Hijo hasta el plan Progresar, y van también desde una política alimentaria hasta estrategias de emergencia. Y van también desde un plan, como es la implementación del REPRO, precisamente para satisfacer los problemas lógicos que tiene el andamiaje del desenvolvimiento de un sistema económico que está expuesto a crisis internacionales. En el 2009 tuvimos cerca de 2900 empresas con casi 150-160 mil trabajadores que fueron definitivamente atendidos por políticas activas por parte de Estado.

Entonces la verdad es que él y ustedes, que son también responsables de la implementación de estos programas, saben cómo llegar hasta el más recóndito de los parajes, para hacer una vivienda, para garantizar agua potable, para llegar a muchas localidades que fueron desatendidas durante muchos años con red de agua potable, gas y cloacas, para llegar con su vivienda, para acceder al trabajo, para lograr que después de muchos años esa persona adulta que vivía en un rincón de nuestro pueblo y nuestra tierra pueda acceder a una pensión no contributiva. No es menor avanzar de casi 454.000 casos a casi un millón y medio, eso es algo extraordinario. Eso se siente en el corazón de cada una de aquellas personas que vio transformar la concepción neoliberal de un beneficio en un derecho que hoy puede disfrutar junto a su familia.

Por eso es muy importante pensar que esta Red Federal de Control Público tiene un sentido social y tiene la sensibilidad de aquellos que entienden que las políticas públicas llegan a personas de carne y hueso. Si ustedes no tuvieran esa sensibilidad para ejercitar el control desde una concepción muy clara en medir la calidad de los mismos, probablemente estos programas no se hubieran podido implementar con la calidad y la eficacia que se ha hecho.

Quiero decir que allí ha estado el Estado, ha estado un presidente como Néstor Kirchner, una presidenta como Cristina Fernández de Kirchner y un equipo humilde de funcionarios que entendieron que la militancia es dar testimonio de vida todos los días y que seguramente esta Red Federal de Control Público ha sido la base para seguir haciendo. Porque finalmente lo que más importa en la vida  es transformar la calidad de vida de nuestro pueblo y eso lo hacemos entre todos. Muchas gracias.