Monseñor Arancedo afirmó que la presidenta Cristina Fernández “ha tenido el gesto” de invitar a un encuentro a los obispos, en función de la proximidad de las celebraciones de Navidad y Año Nuevo. “Hemos hablando de cosas generales, llegando la navidad, de paz, de encuentro entre argentinos”, señaló.
El prelado dijo que tanto los obispos como la Jefa de Estado esperan que “cuanto antes todos estos conflictos puedan llegar a soluciones, para que podamos vivir en paz”. Sostuvo que a la Primera Mandataria “la vi muy entera, muy dispuesta, con mucha esperanza”.
Aseguró que “no había una agenda, no había temas previstos”. Respecto a las subordinaciones de fuerzas de seguridad, indicó que vio a la Presidenta “preocupada por todo lo que pueda significar que una fuerza de seguridad que tiene una cadena de mandos, haya pasado esto”.
Arancedo aseguró que “esto que hemos vivido no tiene que volver a pasar”. “Si hay dificultades, hay que encontrarse a dialogar. Evitar por todos los medios esto que ha puesto en riesgo no solo las vidas, sino los bienes de muchas personas”, sostuvo.
Por otra parte, el titular de la Conferencia Episcopal señaló que en la charla “también salió el tema de la preocupación por el narcotráfico, el daño que está generando el avance de la droga, el narcotráfico que va instalándose en muchos sectores de la sociedad”. “Hace falta una respuesta de toda la sociedad: de la política, de la justicia, de las fuerzas de seguridad, y sobre todo de la cultura, para que el joven vaya generando proyectos de vida y diciéndole que no a la droga”, consideró.
El obispo destacó también la designación del padre Juan Carlos Molina al frente del Sedronar: “Me pareció muy bien que esté él a nivel de asistencia, ejerciendo una función pastoral. No enfrentando el delito, el narcotráfico, para eso están otros niveles del gobierno”, comentó.