PALABRAS DEL JEFE DE GABINETE DE MINISTROS, JORGE CAPITANICH, EN EL ACTO DE FIRMA DE ACUERDOS CON LOS GOBERNADORES DE LAS PROVINCIAS
Muy buenos días, buenas tardes ya.
Muchísimas gracias a todos y a todas.
Queridos y queridas gobernadores y gobernadoras de la República Argentina, de distintas provincias que por supuesto, son queridos amigos, compañeros de trabajo y muchísimas gracias tanto a Axel Kicillof como a Diego Bossio, por estar y a todos los miembros del Comité.
Nosotros la verdad que tenemos un gran gusto de estar junto al ministro Manzur, al secretario Parrilli y todo el equipo de gobierno, por instrucción expresa de la Presidenta de la Nación, con el objetivo de trabajar en lo que significa el cumplimiento de las metas fijadas por el programa PROCREAR. Las metas a lograr implican la construcción de 400.000 viviendas, con las cuales 80.000 viviendas ya tienen el proceso de financiamiento actualmente las cuales 50.000 tienen que ver con terreno propio y 36.000 con un proceso de financiamiento de la titularidad del terreno.
Como ustedes saben y cada uno de nosotros lo conoce perfectamente en cada una de nuestras respectivas provincias, ha habido un proceso especulativo creciente, es decir, un incremento en el valor del bien inmueble, en los terrenos que, en muchos casos constituye una restricción a los efectos de obtener la perspectiva de contar con el terreno para la construcción del bien inmueble, que implica cumplir con el sueño de largas generaciones respecto a tener la vivienda propia.
La República Argentina, a partir de Néstor Kirchner y obviamente con la continuidad de esta impronta de nuestra Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, ha generado las condiciones para la asignación de recursos en materia de infraestructura pública, y en este contexto cerca de 1 millón de soluciones habitacionales han significado un impacto extraordinario para reducir el déficit habitacional. Paralelamente con eso, cerca entre 9 y 10 millones de personas pudieron acceder a agua potable, cloacas, también en muchos casos a la extensión de pavimento urbano, la construcción de veredas, la perspectiva de apertura de calles y el proceso de regularización de los asentamientos urbanos de carácter espontáneo en forma creciente.
Siempre comento que en mi provincia 287 asentamientos urbanos se generaron desde 1973 a la fecha, y eso obviamente constituye un fenómeno muy particular en todo el mundo, pero sobre todo en la República Argentina a partir de la década del 70. Es decir, un incremento sustantivo de la población urbana en detrimento de la población rural. Esto implica urbanización creciente y acelerada. América latina lo vivió en toda la década del 70, 80, 90 hasta la actualidad. Ahora la están viviendo muchos países asiáticos, principalmente la República Popular China.
Por lo tanto, nosotros sabemos muy bien lo que eso significa desde el punto de vista del crecimiento y la extensión de las sociedades urbanas, las demandas sobre terrenos y lo que significa muchas veces que un bien inmueble, por ejemplo en Resistencia, o quizás en Formosa, o en La Rioja, o en Salta, o en cualquier provincia, tenga un valor que no tenga gran diferencia con algunos terrenos principalmente ubicados en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o también en la provincia de Buenos Aires.
En consecuencia, esta acción promovida por el Estado a partir de ANSES a través lógicamente del financiamiento para la adquisición del terreno y también de la vivienda propia, implica una asignación de recursos de una fase inicial para 40.000 terrenos equivalentes a casi 4.000 millones de pesos. Esto por la fijación del tope correspondiente y eso significa también un gran desafío de nuestros gobernadores, de los intendentes a los efectos de establecer estrategias de regularización dominial de lotes urbanos. Esto implica loteo urbano masivo y un sistema simplificado con un régimen que diría, de simplificación de trámite que permita, porque en muchos casos, hay muchas restricciones para programas masivos de loteos urbanos. Esto es, que las exigencias por parte de los municipios están asociadas a que primero tenga calle abierta, que tenga electricidad, que tenga agua potable, que tenga cloacas para que luego se pueda hacer el loteo. Y eso es como el huevo o la gallina. Es necesario tener un mecanismo que nos permita el acceso rápido a la propiedad del bien inmueble, para que en un terreno determinado se pueda construir una vivienda en el marco de una infraestructura que inexorablemente requiere la inversión por parte del Estado.
Por eso, es muy bueno lo que ha hecho ANSÉS y es muy bueno el esfuerzo que hacen cada uno de los gobernadores, respecto a establecer un mecanismo de cofinanciamiento para el acceso al terreno con la infraestructura social básica, para garantizar que muchas familias que pueden tener un sueño que es construir la vivienda propia después de largos años de espera, lo puedan hacer a través de este tipo de herramientas.
Es bueno recordar que en la República Argentina hoy tenemos un empleo de obreros de la construcción que superan 410.000 trabajadores, y que en definitiva la participación de la inversión pública es el equivalente a 3,9 por ciento. Si uno toma la construcción privada y pública, está en torno al 5 por ciento del Producto Bruto Interno, que tenemos el máximo nivel de consumo en materia de despacho de cemento que supera los 12 millones de toneladas, o que también los ladrillos huecos son de más de 500 millones que más o menos está en relación con lo que es el consumo del año 2011. Y por supuesto, para citar otros bienes que integran la matriz de insumo producto para la industria de la construcción, y que por supuesto, nosotros sabemos que construir una vivienda implica demandar ladrillos. En nuestras respectivas provincias muchos ladrilleros tienen esa posibilidad. Sería muy bueno ver como uno puede tener una tipología jurídica, de organización de los consorcios de ladrilleros para tener un sistema homogéneo de producción de muy buena calidad, con mayor tecnología, que incremente la productividad para aumentar también la producción de ladrillos, porque también eso puede ser un cuello de botella y una restricción desde el punto de vista de la construcción de viviendas. Así, por lo mismo, determinados tipos de insumos que son estratégicos y a su vez también lo que significa aberturas, como puertas, ventanas o determinados tipos de insumos o bienes estratégicos o intermedios que forman parte de la cadena productiva para la construcción de una vivienda.
Por lo tanto, para nosotros y lo sabemos muy bien, quienes hemos tenido la responsabilidad de gobernar y tenemos la responsabilidad de gobernar en cada uno de nuestros distritos territoriales, lo que significa una vivienda en términos de efecto multiplicador en el empleo. Todos sabemos la relación de 1 a 2,5 ó 3 empleos que genera la construcción de una vivienda, y eso tiene un impacto extraordinario en el empleo formal, en la percepción del salario de convenio y en el mejoramiento de la calidad de vida de los trabajadores de la construcción. Siempre decimos que en el año 2002, depende del mes que se tome había entre 60, 68.000 trabajadores de la construcción, hoy superan los 410.000. Pero esos trabajadores de la construcción cuando iban a trabajar, en el año 2002 en muchos casos iban a pie, después en bicicleta, después pudieron comprarse una moto, y muchos trabajadores de la construcción, empleados de la construcción, ya pueden acceder a un auto, en botas en el marco de la mayor especialidad correspondientes sobre la base de mejores salarios y de mejor productividad.
Por lo tanto lo que ha significado PROCREAR es realmente positivo, también es muy importante porque cuando uno hace el análisis desde el 27 de octubre desde el año 2010 cuando se hizo el Censo Nacional de Población y Vivienda, uno puede ver claramente que el hacinamiento por cuarto u hogar se redujo ostensiblemente, pero una parte incrementada ha sido en categorías de viviendas tipo A, esto es clase media que al no acceder al crédito hipotecario, tenía dificultades para lograr la construcción de nuevas viviendas. Entonces en una misma casa de familia o en un mismo hogar convivían más de una familia, y esto, obviamente generaba hacinamiento desde el punto de vista poblacional.
Por eso es muy importante esta estrategia excepcionalmente diseñada por la Presidenta de la Nación y ejecutada por este Comité y por quienes me acompañan hoy. Así que felicitaciones porque aparte, es muy interesante, lo voy a afirmar categóricamente, lo que significa el Fondo de Garantía de Sustentabilidad desde el punto de vista de la generación de recursos.
Cuando uno asigna un crédito hipotecario de estas características de modo masivo, tiene una doble particularidad, por un lado acrecienta el fondo en virtud de aportes y contribuciones de más trabajadores. Y por otro lado el recupero de los mismos en virtud del pago de las cuota correspondiente.
Entonces, el fondo tiene a crecer sistemáticamente a partir de una doble vía, por más aportes y contribuciones, por más empleo y, por otro lado, por mejor calidad de recuperación por el crédito otorgado en virtud de la imposición financiera que significa el crédito hipotecario.
Por lo tanto, la ingeniería de diseño es verdaderamente excepcional, ataca el problema de hacinamiento de clase media y en segmentos que no tenían acceso al crédito hipotecario y genera obviamente un efecto multiplicador en el empleo y nuevamente un diseño que permitirá una transformación estructural de la calidad de vida en todo el país. Porque este es un sistema muy transparente, por sorteo, por asignación de cupo, fundamentalmente en la distribución territorial de los recursos. La verdad es un diseño federal, un diseño transparente, un diseño cuyo efecto multiplicador garantiza finalmente la expansión productiva, la cadena de valor, la generación de empleo, pero sobre todo, mejor calidad de vida para muchos argentinos cuyos sueños fueron postergados durante mucho tiempo.
Muchísimas gracias por sumarse a este esfuerzo colectivo, y naturalmente podremos cumplir las metas en forma conjunta, trabajando coordinadamente para cumplir estos objetivos.
Muchas gracias, que tengan muy buen día.