La presidenta Cristina Fernández recordó que nueve años atrás, el ex presidente Néstor Kirchner, viajó también a Tucumán a celebrar el Día de la Independencia, en “un mundo totalmente diferente y también un país totalmente diferente, éramos nosotros los que nos habíamos caído del mundo”. Indicó que el ex mandatario “nos proponía un camino que no era independiente del mundo, porque sabía que había un mundo globalizado. Pero necesitábamos romper las cadenas que durante décadas se habían tejido sobre las posibilidades de los argentinos”.
Rememoró que Kirchner “tuvo que soportar burlas, porque tal vez no tenía la enjundia académica de otros”, pero destacó que “venía con la frescura, pero también con la convicción de alguien que había militado de muy joven” y que creía que “otro país era posible”.
La Jefa de Estado señaló que gracias al “proceso de fuerte industrialización”, iniciado durante el gobierno de Kirchner, en Tucumán la desocupación descendió del 25 al 4 por ciento, “por debajo de la media nacional”. “Ese proyecto no era solamente nacional, popular y democrático, sino también profundamente federal”, enfatizó.
“Desde aquel 9 de julio la Argentina comenzó lentamente pero inexorablemente a levantarse sobre sus ruinas, a levantar sus banderas, a sentirse orgullosos de ser argentinos”, consideró la mandataria.
Cristina Fernández sostuvo que cuando le tocó asumir la Presidencia estaba convencida que “la lucha no es solo por crecer, sino crecer con igualdad”. “No nos importa el crecimiento económico por sí mismo, sabemos que el crecimiento tiene que venir con la redistribución del ingreso”, expresó. Y sostuvo que en el proyecto de su gobierno se unen “las dos partes de la patria, la del 25 de mayo y la del 9 de julio, porque son la misma cosa, son la lucha por los ideales para tener una patria mas grande”.
Argentina frente a la crisis internacional
La Presidenta de la Nación afirmó que “este 9 de julio nos encuentra con el mundo dado vuelta”. A continuación destacó que “Argentina ha crecido como nunca lo había hecho en sus 200 años de historia”
La Jefa de Estado enumeró que se crearon mas de 5 millones de puesto de trabajo, se recuperó la administración de los aportes de los trabajadores, Aerolíneas Argentinas, YPF. También puntualizó que Argentina es el país con mayor cobertura previsional, con un 95 por ciento, y que posee el mejor salario básico de toda Latinoamérica.
A continuación destacó: “Hoy nos encontramos con un mundo dado vuelta. Ese mundo ideal que le refregaron en la cara (a Kirchner), durante sus cuatro años de gestión, que me refregaron a mí, se ha derrumbado”.
Explicó que estamos ante “una crisis mundial sin precedentes. Primero dijeron que era las subprime, el primer argumento fue echarle la culpa a los pobres que habían comprado casas y no las podían pagar; después fue la caída de Lehman Brothers; y ahora apareció la verdad desnuda: han timbeado durante años en los principales centros financieros mundiales, miles de millones”. “Me ha tocado ver a mí economías otrora florecientes, que se derrumban por el peso de su propia deuda soberana”, afirmó
Asimismo, consideró que “no estábamos equivocados cuando planteábamos la necesidad de producción, del capital asociado al trabajo”. En ese sentido, afirmó que se continuará con “política proactivas, anticíclicas: como PROCREAR, como créditos para jubilados y pensionados, por eso también reformamos la Carta Orgánica del Banco Central, para que los bancos destinen parte de sus créditos a las empresas”.
“Necesitamos que nuestros empresarios inviertan para poder seguir con la rueda del crecimiento, para agregar cada vez más valor a nuestros productos. Porque cada vez que se agrega valor, son miles de argentinos que ingresan al mercado de trabajo”, sentenció.
En otro tramo, la mandataria anunció que “el próximo 3 de agosto la Argentina terminará de pagar el corralito en dólares que se hizo en 2001”. Señaló que aquella medida que perjudicó a miles de argentinos no fue anticipada por “ningún consultor económico de los que anuncian todos los días las cosas terribles que vamos a hacer”. Sostuvo que, pese a que nadie lo anticipó, la medida se tomó y “dejaron a la Argentina y a miles de argentinos colgados del pincel. Nosotros vamos a devolverle lo que se quedaron en otros gobiernos”.
La necesidad de la unidad
La Presidenta aseguró que “la unidad nacional es presupuesto básico para seguir creciendo”. Enfatizó que “unidad nacional no quiere decir que todos pensemos lo mismo. Unidad nacional es ponerse de acuerdo en las cosas básicas para que el país siga creciendo”.
Asimismo, sostuvo que se necesita “una unidad superior, la unidad de América del Sur, la UNASUR”. Explicó que a partir de la unidad y de sus potencialidades la “región y Argentina en ella tienen un protagonismo inédito”.
“Este 9 de julio debe servir para que todo argentino, piense como piensa, sepa que no puede dejar engañarse nunca más, ni vea en otro argentino a un enemigo. Todo lo contrario, si la mayoría de los argentinos tiene las mismas necesidades”, afirmó Cristina Fernández. En ese sentido, consideró que “sólo a un pequeño grupito le ha ido bien, cuando le ha ido mal a las grandes mayorías”.
Respecto a la relación entre deuda y PBI, la Presidenta recordó que cuando Kirchner vino por primera vez a Tucumán “debíamos el 130 por ciento de nuestro PBI; hoy vengo yo a decir que debemos el 14 por ciento a tenedores particulares, el resto es intra administración pública”, explicó.
También reconoció las deudas pendientes, al indicar que “cuando conseguiste el trabajo, querés ver si te podés comprar la casa, el autito o la moto; después si podés mandar a los chicos a la universidad, universidad que va a seguir siendo popular, nacional, y totalmente gratuita”.
Asimismo, la Jefa de Estado destacó la importante obra pública, que integró al norte del país “para quebrar ese maleficio que cargamos durante años, de una zona centro, a la que emigraban miles y miles de tucumanos, salteños, jujeños, riojanos”.
Entre las obras de su gestión, también subrayó “el matrimonio igualitario, los documentos para los trans: la igualdad”. Señaló que la argentina es “una sociedad que ha devuelto a miles y miles de argentinos su verdadero identidad. Ha reparado, ha dado igualdades. No le ha quitado igualdad a nadie, al contrario, ha ampliado igualdades a otros que no las tenían”. “Me siento orgullosa de estar en esta Argentina igualitaria, solidaria, reparadora y justa”, expresó.
La juventud, vanguardia del cambio
La Presidenta de la Nación sostuvo que “esa frase que cantan en las consignas, de que en los malos momentos, los pibes van a estar, es cierta, porque es una verdad histórica”. Afirmó que “son los jóvenes los que empujan, los baluartes, y la vanguardia del cambio, porque está en el ADN de la juventud”.
“Yo quiero que ustedes, jóvenes universitarios y secundarios, como lo hacíamos nosotros, vayan a los barrios junto a los más humildes, porque allí es donde se aprende lo que se sufre, donde se genera la sensibilidad, que nunca más se pierde”, pidió a los jóvenes presentes. Y opinó que “no es casualidad que Eva tuviera veintipico de años. Cómo no iba a revolucionar este país: mujer, joven”.
Organización para la solidaridad
Por último, la Presidenta expresó: “Yo pido que a esta Argentina le pongamos unidad, organización y solidaridad”. “Unidad, porque depende de nosotros, de los 40 millones de argentinos que tiremos para el mismo lado, para seguir creciendo”, afirmó. Y agregó: “Organización, porque se requiere que cada uno de nosotros se organice para el gran objetivo que es la solidaridad, la equidad, la igualdad”. “No es una unidad para cualquier cosa, es unidad para ayudar a los demás”, concluyó
Cristina Fernández estuvo acompañada durante el acto por el vicepresidente Amado Boudou, el gobernador de Tucumán, José Alperovich, la presidenta provisional del Senado, Beatriz Rojkes de Alperovich, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, los gobernadores de La Rioja, Luis Beder Herrera, de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, de Jujuy, Eduardo Fellner, el jefe de gabinete Juan Manuel Abal Medina, ministros del Poder Ejecutivo, legisladores, intendentes, y representantes de organizaciones sociales.
La Presidenta había llegado a San Miguel de Tucumán 10 minutos antes de las 13 a bordo del Tango 01. La acompañan integrantes del gabinete nacional y en la estación aérea fue recibida por el gobernador José Alperovich.
Desde el aeropuerto "Benjamín Matienzo" se dirigió a la Casa Histórica, donde se declaró la Independencia, donde recibió una copia del acta en español y aymara.
Luego rindió homenaje en el histórico recinto a los próceres que declararon allí la Independencia en 1816 y participa de la tradicional ceremonia en el Salón de la Jura de la Independencia, donde colocará una ofrenda floral y firmará el Libro de Visitantes Ilustres.
Posteriormente se trasladó al Hipódromo de Tucumán para encabezar el acto central por el Día de la Independencia, donde dirigió un discurso al país.