PRESIDENTA.- Sí, realmente siempre hay que esperar al documento final, porque con estas cosas uno nunca sabe, pero ayer a la madrugada, a las 2 de la mañana aproximadamente nuestro sherpa que ahora es Alfredo Charadia, logró la inclusión en el preámbulo sobre el tema del crecimiento con el tema del trabajo, lo que era la consigna de Pittsburg fundamentalmente y que era lo que realmente perseguía la OIT y también la Confederación Internacional Intersindical. Esto fue logrado a las 2 de la mañana pero estábamos igualmente esperando la redacción del documento, siempre pasa en todas las Cumbres que hasta último momento no se puede acceder al documento final pero descontamos que esto va a ser así. En definitiva, tal cual lo había charlado con ustedes ayer, este era un G-20 de conceptualización, un G-20 donde las medidas en materia de reforma al sistema financiero internacional que fueron reclamadas entre otros, por nosotros pero con algunos otros participantes con mayor peso específico como el caso de China. Obviamente, inclusive el presidente Hu Jintao con muy buen criterio lo calificó como "sistema bancario fantasma", me gustó mucho el término, porque realmente ejemplifica con mucha claridad lo que está sucediendo en el sistema internacional donde se desplazan fondos que no se saben sus titularidades, si son activos tóxicos o no tóxicos, así que me pareció muy ajustado y todos reclamaron que precisamente para la Cumbre de Seúl esto más la reformulación y la participación en el Fondo Monetario Internacional también esté definido, nosotros planteamos nuevamente el tema de las agencias calificadoras conjuntamente con el sistema financiero internacional y el tema de los paraísos fiscales. Dimos el ejemplo del hostigamiento que ha tenido Argentina y sigue teniéndolo por parte de un ciudadano estadounidense que dejó de ser ciudadano estadounidense para radicarse en un paraíso fiscal, no pagar impuestos en los Estados Unidos, o sea no contribuye con sus impuestos en los Estados Unidos, pero sin embargo se sirve de la Justicia de Estados Unidos y hace lobby ante el Parlamento para obtener protección para los fondos buitres, es un caso típico no ya de hostigamiento a la Argentina, sino de incumplimiento a las normas elementales con su propio país de origen, donde todo buen ciudadano por lo pronto si tiene una buena capacidad patrimonial, debe contribuir pagando sus impuestos.
Planteamos claramente el tema de por qué no estamos de acuerdo con las políticas de ajuste, independientemente de que los países tienen el derecho de adoptar las políticas que consideren más convenientes, pero ejemplificamos porque en la cena de anoche varios presidentes hablaron del tema de las deudas soberanas, de lo que habla todo el mundo, no es ninguna novedad, y yo retomé el tema hoy con el ejemplo de la Argentina que no hablaba desde una posición crítica sino desde una posición empírica si se quería, porque nosotros habíamos tenido el default soberano más grande de la historia, 160 mil millones de dólares, y realmente las políticas anteriores a ese 2001, 1997 cuando por ejemplo se desprendió la Argentina de la acción de oro y de la participación que tenía el Estado Nacional en YPF para de esa manera cubrir, se acuerdan de Roque Fernández, el déficit fiscal lo que obligó a todas las provincias que también teníamos participación accionaria en el capital, a venderlo, porque obviamente si no las acciones luego se hubieran caído estrepitosamente y hubiéramos sido desfinanciados al vender el Estado Nacional en su participación mayoritaria, y lo que era importante, su acción de oro que era la que podía decidir la política energética en materia petrolera del país. También recordé la reforma laboral del ´98, yo era entonces diputada, luego lo que fue la reforma laboral de la Alianza, lo que fue por ejemplo el impuestazo que significó para los sectores medios "la tabla de Machinea" que fue una de las primeras medidas que adoptó el gobierno de la Alianza más la reducción. Cuando uno iba describiendo esto, todos miraban porque realmente se parece, casi es una réplica exacta de lo que está pasando aquí, la reducción del 13 por ciento para el sector público, la reducción del 13 por ciento para todo el sistema jubilatorio, y les dije que esto había sido en el año 1999-2000 pero que finalmente no había dado solución al problema, porque eran problemas de carácter estructurales que requerían una política sustancialmente diferente y que no era un problema de ajuste o de no ajuste, que era la experiencia nuestra y que luego, a partir del año 2003 cuando aplicamos políticas que ellos no recomendaban, me refiero a los organismos multilaterales de crédito, es más, que criticaban, logramos por primera vez en la República Argentina tener superávit comercial y superávit fiscal, los famosos superávit gemelos. Durante todo el tiempo anterior habíamos tenido los déficit, lo mismo que está sucediendo hoy en Europa y nos dijeron que tenía que haber ajuste para eso. Nosotros no creíamos eso, los gobiernos de entonces sí y finalmente lo que quise hacer es un ejemplo de cómo salimos de esta cuestión. Yo sostuve que nadie puede explicarme en forma consistente que si un país está endeudado con un determinado Producto Bruto Interno, si reduce ese Producto Bruto Interno, va a poder hacer frente a esa deuda o a una deuda mayor. Evidentemente es un planteo absolutamente inconsistente.
Planteé también el tema, como les dije, de paraísos fiscales, y luego esto motivó una intervención posterior del presidente Sarkozy que dijo algo así como que América latina no sabía del hostigamiento que había tenido o que tenía el euro; mencionó mi intervención específicamente, con lo cual obviamente me vi obligada a responderle.
En primer lugar me parece que, en cuanto a buenos modales ya que siempre están todos reclamando buenos modales, interpelar personalmente a otro presidente porque ha dado una idea que por ahí uno no está de acuerdo, nunca lo había visto en ningún encuentro multilateral por parte de nadie. Hay un montón de gente que dice cosas con las cuales yo no estoy de acuerdo y no lo interpelo ni digo fulanito de tal o menganito de tal, al contrario, normalmente lo que se acostumbra cuando uno está de acuerdo es decir: bueno, tal cual lo dijo el presidente fulanito o la presidenta menganita, y si uno no está de acuerdo no menciona a ningún presidente, porque son cuestiones de forma. Como me mencionó me vi obligada a responderle, en primer lugar decirle que no consideraba de buen tono en reuniones multilaterales interpelar a alguien porque no se estaba de acuerdo en lo que se decía, y en segundo lugar que a mí me importaba muchísimo el euro, porque en el Banco Central de la República Argentina una parte de las reservas son en euros, con lo cual pocos debemos estar tan interesados en que el euro se estabilice y tenga un buen futuro. Yo estoy segura que el Banco Francés no tiene ningún peso argentino en sus reservas y no le interesa la estabilidad argentina. A mí sí me interesa la estabilidad de Francia, porque la estabilidad es parte de lo que yo tengo en reservas en el Banco Central. En cuanto a la experiencia Latinoamericana, en materia de hostigamiento contra la moneda, en Latinoamérica en general pero en Argentina en particular, podemos dar cátedras acerca de hostigamientos, de embargos desde edificios hasta fondos para pagar los sueldos de embajadas, hasta fondos soberanos depositados, realmente podemos dar cuenta de todo esto y por eso sabemos lo difícil de la situación y queremos que la situación mejore, lo que pasa que creemos que se mejora de otra manera pero cada país tiene la libertad para adoptar sus propias políticas. No hacemos como hicieron con nosotros cuando trataban de imponernos políticas. Nosotros no acostumbramos a hacer eso, porque creemos firmemente en la libertad de cada país para desarrollar su proyecto político y económico. Así que hasta ahí todo muy bien.
Luego me parece que la síntesis de la reunión es que no se adoptó como se pensaba que iba a hacer la recomendación del ajuste, como algunos querían que se legitimara la política esta, al contrario, muchos hicieron una defensa muy encendida del tema de la demanda agregada y del mercado interno, caso de China, caso de la India, caso de Turquía que hizo una fuerte defensa en materia de combatir el desempleo y de generar empleo como un método adecuado para el crecimiento, y el propio Estados Unidos que también el presidente Obama sostuvo -obviamente esto no significa que todos los que tengamos esto digamos que tenemos que ser un desastre en materia fiscal- de hecho la República Argentina ha sostenido desde el año 2003 a la fecha como pilares macroeconómicos del modelo, la existencia de los superávit gemelos, con lo cual también dije esto, o sea creo que, al contrario, hemos sido luego del 2003, uno de los mayores defensores de políticas fiscales correctas, ahora, en una época de crisis tenemos que suspender los estímulos o detenerlos puede afectar gravemente el incipiente crecimiento que llevamos adelante, algo que coincidieron todos.
En síntesis, creo que lo que es más importante que comienza a haber una decisión también de que cada país o cada región adopta sus modelos de acuerdo a las necesidades y particularidades de cada uno de ellos. Esto no hacía falta reunirse en el G-20 para poder decirlo, pero creo que es importante que desde los centros de poder del mundo, que siempre tuvieron una marcada tendencia a marcarle a todos y cada uno del resto de los países lo que tenían que hacer, haya una adopción de políticas de respeto a lo que cada país decide en materia económica.
Así que creo que fue muy positiva en este sentido y creo que va a ser más positiva aún en Seúl. Yo les había adelantado antes de esta reunión que en realidad los resultados concretos en materia de sistema financiero internacional, en el cual todos, absolutamente todos saben que debemos regularlos, porque en definitiva tal cual lo dijo el presidente José Luis Zapatero, en realidad esto no es una crisis de la política, es una crisis del sistema financiero que estamos pagando los políticos. Esto lo dijo muy claramente y me pareció una expresión muy acertada, muy veraz además, condice mucho con la realidad.
Así que esto es un poco la síntesis de la reunión, estamos ahora esperando que se emita el documento, finalmente todavía no se había entregado, quedó Charadia y obviamente el Canciller también a cargo de todo esto; participamos recién en el almuerzo donde se habló de la Ronda de Doha en la cual también no hay todavía un acuerdo definitivo. En ese sentido el presidente Barack Obama fue muy claro, muy explícito y muy realista además en el planteo, me pareció muy sincero y muy realista.
PERIODISTA. (Inaudible)
PRESIDENTA.- Bueno, si el documento final es como el que me dijeron que terminó no, porque una de las claves era precisamente que se debía introducir el tema del trabajo, que había sido la gran conclusión de Pittsburg, hasta ese momento veníamos hablando de los bancos, del problema financiero, de cómo se fondeaban los bancos, como si los trabajadores no tuvieran absolutamente nada que ver o no fueran las principales víctimas en definitiva de la crisis. Yo creo que la gran incorporación de Pittsburg inclusive cuando los sindicatos van a entrevistarse con el presidente Obama y con otros líderes, se acuerdan que tuvimos tambièn una entrevista con Guy Rider y los otros líderes que nos fueron a ver tambièn fue la de incorporar el tema del trabajo decente y de calidad como un ordenador del crecimiento económico, inclusive creo que ayer estaban rescatando en la reunión de los sherpas a las dos de la mañana, creo que fue inclusive Charadia quien lo presentó un documento en este mismo sentido de Merkel que en alguna oportunidad me había dicho que no sirve cualquier crecimiento, cosa que compartimos absolutamente, sino que sirve el crecimiento que genera un trabajo digno, genuino y de calidad. Así que a las dos de la mañana se resolvió la incorporación finalmente en el preámbulo y la verdad que nos dio mucha alegría porque es muy importante seguir reafirmando esto. Estamos muy convencidos, no es una cuestión dogmática y lo que también es que no le suelten la mano a ningún país, hicimos este pedido porque tenemos la experiencia de cuando a la Argentina nos soltaron la mano para que sirviéramos -tambièn lo dije en la reunión - casi como de escarmiento en el mundo o de conejillo de Indias y que yo le recomendaba que no hicieran eso con ningún país porque realmente eso además de ser una tragedia para el país en el cual sucede, en el marco de lo que se ha vivido en el mundo y todavía se está viviendo sería francamente muy negativo. Nosotros habíamos tenido una muy mala experiencia con eso, en el año 2001, cuando nos soltaron la mano, hablé concretamente de la responsabilidad del Fondo Monetario Internacional en eso, no de esta dirección actual del Fondo Monetario, sino de la que estaba en aquel momento, creo que era la señora Krueger, si mal no recuerdo, era una verdadera pesadilla, Freddy Krueger casi, pero Strauss-Kahn no tenía absolutamente nada que ver, ni siquiera estaba, así que también hice esa aclaración para que nadie se sintiera aludido, pero realmente la experiencia nuestra y recién allí pudimos construir un sistema financiero con solvencia y además - luego en charlas que hemos mantenido con distintos líderes- lo que nosotros planteamos es que el achicamiento de la demanda agregada no puede nunca generar reactivación en la economía y que si realmente la eurozona tiene un 80 por ciento de su comercio intrazona (euro) lo idea sería poder sostener cada uno de los países integrantes de la eurozona de modo tal que puedan seguir manteniendo la activación económica. Esta es una opinión, no es una directiva ni una orden, es simplemente una opinión de un país que ha tenido una experiencia muy fea en esta materia y que lo único que queremos y esta es realmente la intención con la cual venimos es aportar esto, que no es ni dogmático, ni ideológico, sino que es algo empírico, nos pasó a 40 millones de argentinos, nos fue muy mal y es el aporte que hacemos de cómo podemos encarar y cada país o cada uno lo va a hacer de acuerdo con sus criterios seguramente y está muy bien que así sea; lo mismo que pretendemos para nosotros que es soberanía para decidir nuestras políticas es lo mismo que le respetamos a los demás. Lo bueno es que ahora este respeto queda plasmado, en el sentido de que cada país tiene - digamos - la libertad, la amplitud de poder decidir esas políticas y además hacerlo en un marco de cooperación y solidaridad también internacional. Porque lo que si creo que todos, absolutamente todos estamos convencidos es que a nadie le conviene que al otro le vaya mal, que era lo que yo trataba de explicarle a Sarkozy con el euro; a mí no me conviene que al euro se desvalorice, primero porque lo tengo en las reservas; segundo porque no me torna competitiva mi divisa, mi signo monetario, o sea que el euro esté como estaba antes es lo que más nos podía convenir en materia, por ejemplo, de turismo o en cualquier otra materia, en cambio en términos competitivos del tipo de cambio. Así que esto es lo que muchas veces no se entiende. Tal vez sea porque nunca les tocó vivir, por lo menos a esta dirigencia actual europea, situaciones de crisis y el ADN que tienen de la crisis es un ADN, como todo ADN transmitido pero no vivido. La experiencia de la Gran Depresión en el mundo, en los años 30, ó la experiencia de la Segunda Guerra fue obviamente una cosa muy traumática, pero como yo les decía ayer una cosa es la experiencia que tuvo Estados Unidos con el desempleo y otra cosa es la experiencia que tuvo Alemania, cuando surgió luego el nazismo, luego de que empapelaban con billetes las paredes de sus casas.
Entonces yo respeto mucho esas cosas y creo que cada uno tiene la libertad para decidir, simplemente uno cuenta su propia experiencia.
PERIODSITA.- ¿Hubo alguna mención del tema Malvinas?
PRESIDENTA.- No, no porque no es el lugar, nosotros solemos hablar de las cosas donde corresponde hablar. Estuvimos hace unos días en el Comité de Descolonización en Naciones Unidas, donde es el ámbito en el cual está planteada la cuestión Malvinas y allí se hizo. Si mantuvimos una conversión con el primer ministro Cameron, ayer a la noche, precisamente sobre las cuestiones estrictamente vinculadas al G-20 y a la economía, inclusive me presentó a su sherpa y tuvimos allí un interesante intercambio de opiniones sobre la cuestión de la eurozona, etc. Pero Malvinas es otro ámbito, eso es Naciones Unidas y no correspondía en este ámbito.
PERIODISTA.- (Inaudible)
PRESIDENTA.- Bueno hasta ayer no lo querían incluir, finalmente luego a la noche se hizo, fue recién hoy técnicamente para ser más exactos, hoy a las dos de la mañana, pero te reitero quiero ver el documento, quiero leerlo porque me acuerdo una discusión que tuve en Londres, cuando nos cambiaron con el entonces primer ministro Gordon Brown cuando nos quisieron cambiar el texto de un documento. ¿Se acuerdan cuando el tema de la flexibilización laboral, en Londres?
PERIODISTA.- ¿Cómo terminó finalmente el intercambio con Sarkozy?
PRESIDENTA.- A ella le interesa el chimento... pero terminó muy bien. Es una costumbre muy parlamentaria, más que interpelar, cuando se menciona una intervención tuya tenés una suerte de derecho a réplica, obviamente. Algo parecido pasó también cuando recién estábamos en Doha y Merkel planteó algo sobre una propuesta de Estados Unidos y ese país retomó la palabra y contestó. Eso es algo natural, nada de qué asombrarse, sino simplemente aclarar cuál era la postura argentina.
PERIODISTA.- Desde su concepción ¿ha sido un éxito la Cumbre?
PRESIDENTA.- Éxito sería si las cosas cambiaran producto de las medidas adoptadas. Ya lo habíamos definido; yo creo que el éxito ha radicado en que lo que se esperaba que fuera un choque de posiciones frente a cómo abordar la crisis no ha sido, sino que al contrario ha sido un intercambio de debates y de ideas - como señaló el primer ministro canadiense- y entonces unos piensan que hay que poner acento en una política, y otros pensamos que debemos poner acento en otra, sin que esto signifique posiciones ni de peleas, ni de desencuentros, simplemente tampoco el hecho de poner el énfasis en la situación del estímulo no te puede llevar a decir: "bueno, hay que tener un déficit del 80 por ciento" porque nosotros tampoco sostenemos eso, o sea si yo te digo que para poner políticas de estímulos tenemos que incurrir en un déficit, como tiene creo que Gran Bretaña, que habló de 11 puntos de déficit sobre su PBI, un déficit más que importante. Evidentemente ahora el problema es saber si ese déficit se enjuga con ajustes o se enjuga de otra manera, esto me parece que es la clave. Por eso creo que no hubo lo que se esperaba que era el choque de ambos mundos, como se decía; por el contrario, creo que hubo un intercambio y me parece que lo que sí urge - y creo que en ese sentido este encuentro del G-20 ha sido de transición - es que Seúl tenga finalmente normativas respecto del sistema financiero internacional o como lo definiera Hu Jintao, que me gustó mucho, el sistema financiero fantasma, la verdad que esa frase la voy a adoptar sin copyright, no le voy a pagar copyright.
PERIODISTA.- Presidenta, ¿algún representante de otro país pudo exponer una experiencia completa como la Argentina?
PRESIDENTA.- No, no, no es que nosotros tengamos esa vocación de exclusivos y de únicos, no, en realidad el default más grande históricamente ha sido el de la República Argentina. También dije que acabábamos de concluir... porque allí fue cuando también incluí el tema de los paraísos fiscales, los fondos buitres y las agencias de calificación. Dije que acabábamos de concluir el canje de la deuda con un 92,5 por ciento, porque en realidad - a último momento - se contabilizaron 180 millones de dólares más, lo que nos hacen llegar a 66,8; casi el 67 por ciento del canje y realmente tuvimos mucho hostigamiento por parte de fondos buitres para que no se llevara a cabo esto, que tiene radicación precisamente en paraísos fiscales, que sostuve que son los que realmente complican la economía, no solamente de la Argentina sino del mundo, son los que le sustraen - en el caso de ese señor estadounidense - que renunció a su ciudadanía estadounidense, adoptó otra nacionalidad para no pagar impuestos en los Estados Unidos. Esto evidentemente está perjudicando a su país y lo mismo puede suceder en Francia, en Inglaterra o en cualquier otro país, o sea los paraísos fiscales son focos en donde hay evasión, en donde hay corrupción y además están directamente vinculados también con el tema del narcotráfico y del terrorismo, con lo cual evidentemente hay una conjunción que no solamente se refiere al sistema financiero internacional como problema, sino vinculado con problemas que son verdaderos flagelos internacionales, con lo cual la totalidad - yo diría - de los países que estábamos sentados hoy en G-20 y yo creo que la totalidad de los países del mundo que queremos combatir, entonces creo que es importante poner las cosas en su lugar y trabajar fuertemente de aquí para el próximo G-20 en Seúl para obtener una definición de estos temas.
PERIODISTA.- (Inaudible).
PRESIDENTA.- Estados Unidos ha hecho una reforma a su sistema financiero, esto obviamente es atribución propia de Estados Unidos y de cualquier otro país que quiera hacerlo a su propio sistema, pero no hubo país que no dijera que se tiene que tomar normas de regulación, de carácter transnacional, que quede claro. No es que te dicen: "usted tiene que transformar el sistema financiero en su país, no, no es así y no correspondería que fuera así porque no todos los sistemas financieros tienen problemas de insolvencia o problemas de activos tóxicos. La Argentina por el sólo hecho de haber estado alejada del mercado de capitales lo que era visto como una desventaja fue una gran vacuna preventiva contra la toxicidad de activos que podía haberse introducido en el país de haber habido... (se corta la transmisión).