Asimismo, anunció que también enviará al Congreso la de reforma de la Ley penal Tributaria, "para que los evasores también tengan trajes a rayas en este país". "Es necesario tener un funcionamiento del capital más transparente que asegure que los trabajadores puedan conservar sus fuentes de trabajo y consumir, y que el que tiene la suerte de ganar mucho dinero gane más dinero todavía, pero que también pague todos los impuestos que tenga que pagar", sentenció.
Por otra parte, volvió a defender el proyecto de pago de deudas con reservas al señalar que el mismo busca "evitar el endeudamiento con tasas usurarias" y que el superávit pueda ser utilizado en políticas anticíclicas.
También salió en defensa del presupuesto acordado para el corriente año, cuyos lineamientos principales intentan ser modificados por un sector de la oposición en el Congreso. En ese marco, señaló que con ese presupuesto "estamos ayudando a través de programas de asistencia directa con más de 10 mil millones de pesos a la mayoría de las provincias argentinas". "De los 298 mil millones de presupuesto, la absoluta mayoría se ejecuta en las provincias", aseguró la Presidenta. Y recordó que su administración es la única que ha coparticipado con las provincias los fondos obtenidos a partir del cobro de derechos de exportación.
Por eso, lamentó que "los mismos que nos dejaron la deuda de 2001" hoy pugnen por modificar el presupuesto y obstaculicen el pago de la deuda generada por "el corralito, el Plan Brady, el megacanje y la pesificación asimétrica".
"Por eso yo les pido a todos los legisladores de la República Argentina, cualquiera sea su partido, cualquiera haya sido su responsabilidad en la historia, pensar un poco más en el país", expresó, y agregó que "parece mentira que estemos discutiendo si vamos a pagar con la plata que tenemos ahorrada o si vamos a salir a endeudarnos al 15 %".
Asismismo, Cristina Fernández admitió no entender por qué la oposición intenta "desbaratar un proyecto de país que quiere recuperar la confianza en los argentinos y salir de ese maldito default".
"Siento que la Argentina es una gran fábrica recuperada que en algún momento se cerró y llegó a ser líder, y hoy hemos recuperado y abierto esta fábrica, y les prometo que cueste lo que cueste esa fábrica va a seguir abierta y funcionando, no la van a cerrar más", aseguró la Jefa de Estado.
"Nunca me sentí ni quiero ser jefa de nadie ni de nada, simplemente soy un soldado de la causa nacional, de la producción y del trabajo, de equidad y la justicia, y de la igualdad de oportunidades", concluyó la Presidenta.
En tanto, el presidente de la cooperativa, Hugo Corpo, recordó que hace 6 meses la situación de la empresa era terminal, pero los trabajadores lograron recuperarla con el apoyo de todas sus familias. "Decidimos unidos hacer frente a la realidad, y hubo mucha gente que nos guió en el camino y nos aconsejó", recordó el directivo, e hizo especial mención al trabajo del INAES y del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, mentor de la recuperación de esta firma. "Tenemos la responsabilidad de mostrar que somos capaces de llevar esta empresa adelante, lo vamos a hacer y le vamos a dar un mensaje a todos los trabajadores, para que trabajen y que luchen", expresó Corpo.
La empresa cuenta hoy con 134 trabajadores y una importante cantidad de materia prima, clientes, solicitudes de pedidos, crédito y todas las condiciones necesarias de producción, de acuerdo a lo explicado por sus autoridades.
Acompañaron a la Presidenta en el acto, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; el ministro de Trabajo, Carlos Tomada; el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno; y otras autoridades nacionales