"Es una decisión que no solamente el mercado, sino la economía en su conjunto han visto y aceptado y por eso la vamos a sostener", aseguró Cristina Fernández en oportunidad de firmar un contrato para la construcción de una planta de tratamiento de líquidos cloacales para la localidad de Campana.
Allí, la Jefa de Estado convocó a los argentinos a "hacer todos una reflexión" acerca de la disputa legal desatada a partir de la creación del citado Fondo, e identificar a quienes "molesta" el objetivo del endeudamiento. "Les molesta el desarrollo de la Argentina", aseguró.
En ese sentido, aseguró que la decisión del juez de Estados Unidos Thomas Griesa, de trabar embargo sobre una cuenta del BCRA en Nueva York es el resultado de "una formidable maniobra política en la que concluyen varios actores", porque el crecimiento de Argentina "no es conveniente para pequeñas minorías internas y poderosísimos poderes externos". "Los fondos buitres quieren que el país siga tomando deuda", aseguró en ese sentido la Primera mandataria.
Por otra parte, calificó de "curioso" que sectores internos y externos se opongan a la instrumentación del Fondo del Bicentenario dado que "es una forma de ayudar a garantizar a todos los acreedores externos que la Argentina está en condiciones de pagar la deuda". Los objetivos del Fondo eran dos, explicó la Jefa de Estado: utilizar reservas que rinden 0,5% anual y evitar a salir al mercado de capitales a pagar tasas del 14% ó 15% de acuerdo al nivel actual de Riesgo País. "No se entiende que alguien que tiene excedente de reservas pague tasas del 14% o 15%, salvo que uno tenga interese con esos sectores que han vivido de esa Argentina endeudada", expresó Cristina Fernández. Además dijo que utilizar parte de las reservas para el desendeudamiento "nos generaba la posibilidad de utilizar el superávit fiscal para proyectos laborales, para proyectos de inversión de obras, para el crecimiento de la economía".
En ese marco, recordó que "durante todo 2009" desde varios sectores se anunció que el país retornaría al default, hecho que, finalmente, nunca aconteció merced a la fortaleza del sistema económico nacional.
No obstante, la Presidenta sostuvo que "nada de lo que nos pasó a los argentinos ni ahora ni durante nuestra historia fue culpa de los de afuera", porque "siempre se encontraron a otros argentinos para poder generar ese endeudamiento y ahogar a la Argentina", aseguró.
Asimismo, criticó la actitud del destituido presidente del BCRA, Martín Redrado, que "se ha convertido en una suerte de ocupa" al intentar retener el cargo. Y en ese marco recordó que al titular de esa entidad la designa y remueve la Presidenta con consejo de una comisión del Senado, pero esa comisión no se ha constituído.
También cargó contra la jueza María José Sarmiento, a la que acusó de convertirse "en una suerte de jueza delivery que le hace lugar a todos los pedidos de la oposición". Y descalificó la actitud del vicepresidente Julio Cobos, a quien acusó de querer "ser presidente antes del 2011".
"No hablo con subjetividades, sino con hechos puntuales, concretos e inéditos en la República Argentina", expresó la Mandataria. Y convocó a "tener tranquilidad, responsabilidad y calma y saber las cosas que están en juego, las maniobras en curso, quienes las difunden, propagandizan y dirigen".
También señaló que "necesitamos otra calidad institucional" con "una oposición que sepa ser oposición".
Finalmente, destacó que pese a todos los obstáculos, los argentinos "estamos creciendo nuevamente, estamos generando nuevos puestos de y hemos generado nuevas oportunidades para todos los argentinos".
"Créanme que yo tengo mucha fortaleza, he enfrentado a lo largo de mi vida personal y política de joven situaciones muy difíciles como las que vivió todo un país y también en lo personal", aseguró la Presidenta, quien concluyó afirmando que: "Estoy muy segura de mis convicciones, nunca las cambie, y nunca nadie jamás podrá decir que estuve de un lado y salté a otro, no soy lo que andan saltando un partido a otro partido o de un lugar a otro lugar, estoy en este lugar y nunca me moví ni me pienso mover de este lugar que es la defensa de los intereses de los argentinos".
Las expresiones de la Jefa de Estado tuvieron como marco el acto de firma del contrato para la construcción de la planta depuradora de líquidos cloacales de la Ciudad de Campana, en el Salón Mujeres Argentinas del Bicentenario de la Casa de Gobierno.
Allí, la Jefa de Estado convocó a los argentinos a "hacer todos una reflexión" acerca de la disputa legal desatada a partir de la creación del citado Fondo, e identificar a quienes "molesta" el objetivo del endeudamiento. "Les molesta el desarrollo de la Argentina", aseguró.
En ese sentido, aseguró que la decisión del juez de Estados Unidos Thomas Griesa, de trabar embargo sobre una cuenta del BCRA en Nueva York es el resultado de "una formidable maniobra política en la que concluyen varios actores", porque el crecimiento de Argentina "no es conveniente para pequeñas minorías internas y poderosísimos poderes externos". "Los fondos buitres quieren que el país siga tomando deuda", aseguró en ese sentido la Primera mandataria.
Por otra parte, calificó de "curioso" que sectores internos y externos se opongan a la instrumentación del Fondo del Bicentenario dado que "es una forma de ayudar a garantizar a todos los acreedores externos que la Argentina está en condiciones de pagar la deuda". Los objetivos del Fondo eran dos, explicó la Jefa de Estado: utilizar reservas que rinden 0,5% anual y evitar a salir al mercado de capitales a pagar tasas del 14% ó 15% de acuerdo al nivel actual de Riesgo País. "No se entiende que alguien que tiene excedente de reservas pague tasas del 14% o 15%, salvo que uno tenga interese con esos sectores que han vivido de esa Argentina endeudada", expresó Cristina Fernández. Además dijo que utilizar parte de las reservas para el desendeudamiento "nos generaba la posibilidad de utilizar el superávit fiscal para proyectos laborales, para proyectos de inversión de obras, para el crecimiento de la economía".
En ese marco, recordó que "durante todo 2009" desde varios sectores se anunció que el país retornaría al default, hecho que, finalmente, nunca aconteció merced a la fortaleza del sistema económico nacional.
No obstante, la Presidenta sostuvo que "nada de lo que nos pasó a los argentinos ni ahora ni durante nuestra historia fue culpa de los de afuera", porque "siempre se encontraron a otros argentinos para poder generar ese endeudamiento y ahogar a la Argentina", aseguró.
Asimismo, criticó la actitud del destituido presidente del BCRA, Martín Redrado, que "se ha convertido en una suerte de ocupa" al intentar retener el cargo. Y en ese marco recordó que al titular de esa entidad la designa y remueve la Presidenta con consejo de una comisión del Senado, pero esa comisión no se ha constituído.
También cargó contra la jueza María José Sarmiento, a la que acusó de convertirse "en una suerte de jueza delivery que le hace lugar a todos los pedidos de la oposición". Y descalificó la actitud del vicepresidente Julio Cobos, a quien acusó de querer "ser presidente antes del 2011".
"No hablo con subjetividades, sino con hechos puntuales, concretos e inéditos en la República Argentina", expresó la Mandataria. Y convocó a "tener tranquilidad, responsabilidad y calma y saber las cosas que están en juego, las maniobras en curso, quienes las difunden, propagandizan y dirigen".
También señaló que "necesitamos otra calidad institucional" con "una oposición que sepa ser oposición".
Finalmente, destacó que pese a todos los obstáculos, los argentinos "estamos creciendo nuevamente, estamos generando nuevos puestos de y hemos generado nuevas oportunidades para todos los argentinos".
"Créanme que yo tengo mucha fortaleza, he enfrentado a lo largo de mi vida personal y política de joven situaciones muy difíciles como las que vivió todo un país y también en lo personal", aseguró la Presidenta, quien concluyó afirmando que: "Estoy muy segura de mis convicciones, nunca las cambie, y nunca nadie jamás podrá decir que estuve de un lado y salté a otro, no soy lo que andan saltando un partido a otro partido o de un lugar a otro lugar, estoy en este lugar y nunca me moví ni me pienso mover de este lugar que es la defensa de los intereses de los argentinos".
Las expresiones de la Jefa de Estado tuvieron como marco el acto de firma del contrato para la construcción de la planta depuradora de líquidos cloacales de la Ciudad de Campana, en el Salón Mujeres Argentinas del Bicentenario de la Casa de Gobierno.