Al hacer uso de la palabra, la Jefa de Estado elogió el acto de los trabajadores conducidos por Hugo Moyano al señalar que "si todos los actos políticos, sindicales o cualquier otra índole que se celebraran en el país fueran como este, para hablar más de media hora de los logros y de las cosas hechas en lugar de hablar de los demás, cuánto mejor y cuánto más habría crecido la Argentina todavía".
Por ese motivo, la Presidenta manifestó estar "orgullosa de estar aquí" y de "ser parte de este movimiento político en el que milité desde muy joven", en referencia al peronismo, "porque ha sido siempre un movimiento político pleno de realizaciones, reconocimientos, toma de posiciones claras y concretas" a favor de "los intereses de los trabajadores y los sectores más vulnerables de la Argentina". "Siento el orgullo de pertenencia y de identidad", reafirmó la Mandataria.
Al ver a los asistentes al acto, la Cristina Fernández dijo recordar "las viejas imágenes de un país donde los trabajadores eran mayorías y los hombres y mujeres podían ganar el pan para ellos y sus hijos sin otra necesidad que sus propias manos y capacidades".
"Luego de décadas de procesos que atentaron contra el trabajo decente, podemos volver a hacer un acto como este porque el trabajo ha vuelto a la Argentina, y ha vuelto a partir de un proyecto político que cree en la necesidad de un mercado interno potente y fuerte, de trabajadores con salarios dignos", expresó.
Luego volvió a celebrar la figura de Moyano al señalar que cuando él "enumeraba todas y cada una de las obras que en materia de sanatorios y de centros turísticos ha hecho para sus trabajadores, sentí que ha recuperado lo que ha sido la raíz de la construcción sindical en Argentina y del movimiento sindical más importante de toda Latinoamérica: los trabajadores".
Por eso, la Mandataria les dijo a los asistentes al acto que "no necesitan de dirigentes que dividan o que enfrenten, necesitan dirigentes sindicales que se pongan al frente en la lucha por sus derechos pero además que puedan tener resultados concretos para exhibir".
También aclaró que "cuando decimos que queremos organizaciones empresariales fuertes junto a sindicatos de trabajadores que también sean fuertes, es porque estamos diciendo que queremos construir una Argentina en la cual todos tengan trabajo, los empresarios rentabilidad y los trabajadores salud, vivienda, salario y educación para sus hijos".
"El símbolo más fuerte que podemos dar hoy es este: miles y miles trabajadores festejando en su día hechos y realizaciones", aseveró.
Por otra parte, manifestó que "no concebimos a los trabajadores como un instrumento político para que a partir de sus penurias o desgracias alguien llegue al poder. "Al contrario- dijo - trabajamos por la felicidad del pueblo, eso nos enseñaron, eso aprendimos y eso es lo que mejor sabemos hacer".
"También sabemos, y tal vez esta Presidenta lo sepa mejor que nadie, que muchas veces hay intereses minoritarios pero poderosos que intentan frustrar los procesos democráticos de transformación social y de crecimiento económico", señaló Cristina Fernández, para agregar enseguida que "será porque tal vez interese que no haya trabajadores o sindicatos que defiendan sus derechos, será tal vez porque algunos añoran épocas donde con más de dos dígitos de desocupación era fácil y barato conseguir un trabajadores".
"Todos sabemos que cuando hay buenos salarios y régimen de pleno empleo se fortalecen los trabajadores, ser fortalece la familias y se fortalece el país", expresó.
Para Cristina Fernández, "algunos no comprenden en su necedad y en su miopía histórica que no hay países grandes y empresas poderosas si no hay una gran masa de trabajadores con salarios y derechos para hacer vivir al país".
Y en ese marco, trazó un recuento de los principales logros de su gestión y de quien la antecedió en el cargo, el actual diputado Néstor Kirchner: La devolución al Estado la administración de los recursos de los trabajares; la promoción de la movilidad de los jubilados argentinos, "que lleva más de 16 aumentos del año 2003 a la fecha, luego de años de congelamiento y castigo por el solo hecho de ser jubilados"; la recuperación de nuestra línea de bandera, Aerolíneas Argentinas; el abordaje de la reforma política y la sanción de una nueva ley de medios audiovisuales; y la sanción de la asignación básica universal por hijo para desocupados y trabajadores informales.
Así, la Jefa de Estado reiteró su intención de comprometerse "frente a todos ustedes una vez más como Presidenta de la República Argentina a seguir al frente de este proyecto que ha logrado el mejor salario mínimo vital y móvil de toda América Latina", que "ha logrado también el retorno de las convenciones colectivas de trabajo" y que ha hecho que "medio millón de trabajadores que hasta el año pasado estaban en negro hoy estén registrados con trabajo decente", indicó.
"No voy a venir a hablar mal de nadie, ya hay demasiados pululando por todas partes en los medios de comunicación hablando mal de los otros, yo vengo a contar las cosas que he podido hacer junto a ustedes en estos dos años de mi gobierno", expresó la Mandataria. Y en ese sentido reafirmó "el compromiso de una generación que quiere ingresar en el año del bicentenario en un país mejor, más justo, más igualitario, más equitativo y más democrático".
"Ese es mi compromiso: Siempre estaré junto a los trabajadores porque creo en ellos y porque creo que son el motor de la patria y la historia", concluyó.
Acompañaron a la Presidenta en el acto el ex presidente y actual diputado nacional por el PJ, Néstor Kirchner, ministros del gabinete nacional, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, dirigentes de otros gremios e invitados especiales.