Inauguración de un shopping en San Justo.

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ, EN EL ACTO DE INAUGURACIÓN PROTOCOLAR DEL SHOPPING DE SAN JUSTO, PARTIDO DE LA MATANZA

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Muy buenos días a todos y a todas. La verdad que hoy tengo dos sorpresas; la primera, que yo no sabía que el titular de esta empresa compartió conmigo en La Plata, porque es platense igual que yo, años en el colegio comercial de La Plata, pero él es más viejito, tiene dos años más, se lo ve bien, téngase confianza. Y la otra sorpresa son los objetivos separatistas que tiene, me parece, La Matanza, que anda planteándose como el quinto Estado y diciendo que Córdoba es la tercera. Ojo con los cordobeses que van a enojar con vos.

Pero en serio, estoy muy contenta, estoy muy feliz; esto es algo más que la inauguración de un shopping, es algo más que una inversión de 25 millones de dólares, que por cierto es más que importante, es más que la generación de empleo que produjo cuando lo construyeron y la que produce ahora en su apertura con la ocupación. ¿Saben qué es? La democratización de la Argentina. ¿Y por qué?

Porque el shopping era un concepto de un espacio privado y público al mismo tiempo, vinculado con sectores y lugares de alto poder adquisitivo. La idea del shopping era la idea de Recoleta, de Palermo o de los que tienen mucho poder adquisitivo. Este shopping se construye, además que por la decisión de sus empresarios, porque la Argentina cambió, porque hay más trabajo, porque hay mercado interno y entonces un lugar como La Matanza, impensable que tuviera un shopping hace tiempo, hoy también lo tiene.

Eso se llama democratización en la sociedad e igualdad de oportunidades para todos. No hay que vivir en la Recoleta o en Palermo para tener derecho a un shopping, se puede vivir en La Matanza y también tener derecho a tener un shopping que, les puedo asegurar -y esto es para las revistas que siempre me andan criticando, que yo de shopping sé- es un muy buen shopping por diseño, por los pasillos anchos, muy modernos como en los grandes centros internacionales también. No han hecho una cosa para los pobres, de segunda, han hecho una cosa de primera, en un lugar de primera también como es La Matanza. (Aplausos)

En todas estas cosas uno advierte las transformaciones y el cambio. Recién, como señalaba Daniel, venimos de un club de barrio donde la ANSES dispuso sus stands para poder distribuir las tarjetas para la Asignación Básica Universal. Este mes de diciembre 3.509.000 pibes van a tener asignación, que va a llegar a 1.979.000 familias que antes no tenían este tipo de ingreso. (Aplausos)

Es cierto, demanda un gran esfuerzo, en este mes y con estos números de diciembre son 638 millones de pesos, y en el año, de seguir estas cifras, serían 7.500 millones que seguramente van a ser más, porque a medida que se va incorporando gente en el proceso de inscripción, de verificación de las condiciones para ser sujeto de acceso a este beneficio, seguramente van a ser más.

Significa además la posibilidad de sentirse parte de una Argentina que por distintas circunstancias -no vamos a empezar a contar lo que nos pasó en el pasado, sino vamos a empezar a contar las cosas que estamos haciendo hoy y por las que vamos para adelante- todavía no ha logrado que todos sus hombres y mujeres tengan trabajo decente y que no necesiten que el Estado les dé esta tarjeta; que el derecho a la asignación sea porque son trabajadores registrados. Ese es el gran objetivo que tengo como Presidenta, que quienes hoy están cobrando la asignación familiar universal como un seguro de protección social luego no solamente sea un beneficio social sino un derecho porque son trabajadores registrados y entonces les corresponde, como a todos lo trabajadores registrados en la Argentina, cobrar su asignación familiar. Esta es la Argentina que quiero y por la que voy a luchar y seguir luchando todos los días de mi gestión. (Aplausos)

También decía hace un rato que ayer, tal vez más imperceptiblemente, se ha producido otro fenómeno que es el de haber logrado aprobar una reforma política, por primera vez en muchos años en la Argentina, en la cual la sociedad va a democratizar la vida interna de los partidos políticos a partir de que va a ser obligatorio votar en internas abiertas para definitivamente llevar la gente también a la vida interna de los partidos.

Ustedes saben que yo milité desde muy jovencita y lo hacíamos con una inmensa vocación de servicio, yo era clase media, como lo éramos todos en aquel momento y luchábamos desde distintos lugares, con distintas ideas, pero desinteresadamente, por un país distinto.

Luego lo que fue muchas la distorsión y también la estigmatización de la política como un instrumento de cambio, fue tornando a la política casi como un lugar repudiable, criticable, y yo creo que esta reforma que termina con el dedo de todos, que va a neutralizar el peso de los aparatos, que va a permitir que la sociedad ingrese a la vida de los partidos para decidir quiénes son sus candidatos y no los dirigentes de turno, va también a retornar a un proceso de democratización y revalorización de la política, que es necesaria en toda las sociedades desarrolladas. Yo decía hace unos instantes que con esta reforma le devolvemos militantes a los partidos políticos, porque va a ser necesario convencer, persuadir a la sociedad; y con la asignación básica universal terminamos también con el clientelismo en la política y ponemos a los clientes donde deben estar, en un shopping, en un supermercado, en un negocio de barrio, en un almacén. (Aplausos)

Esta es una gran transformación, y déjenme decirles que me siento muy orgullosa, no como protagonista sino simplemente como instrumento, nunca me la creí ni me la voy a creer, siempre pienso que los hombres y mujeres que en un momento determinado de la historia ocupamos un lugar no somos los protagonistas, simplemente somos un instrumento que la historia toma para producir modificaciones y progresos; también pueden ser instrumento para retraso, para dependencia y para miseria.

Pero déjeme sentirme humildemente como una presidenta que ha luchado siempre y lo seguiré haciendo desde cualquier lado que me toque estar por la igualdad de oportunidades, por la distribución del ingreso y por una Argentina más justa y más equitativa para todos sus hijos.

Muchas gracias y felicitaciones a los empresarios que creen y apuestan a la Argentina, a la provincia de Buenos Aires y a la Matanza. ¡Vamos todavía y muchas gracias! (Aplausos)