La presidenta Cristina Fernández al encabezar el acto de inauguración de viviendas, pavimentación de calles y un jardín de infantes, financiados por el gobierno nacional, en el barrio Esperanza Grande, del partido bonaerense de Quilmes, se referió a las necesidades de los que menos tiene.
Durante el acto, Cristina Fernández destacó "la esperanza de un país más justo, de una sociedad más equitativa, la esperanza de que alguna vez lo que han sido beneficiados en el reparto de los dones comprendan la necesidad de tender la manos solidaria a los sectores más vulnerables"
En su discurso, la jefa de Estado reafirmó que el trabajo "es el mejor antídoto contra la pobreza" y aseguró que el gobierno nacional seguirá profundizando sus políticas de inversión social con trabajo para que "miles que hoy no tienen trabajo, tengan la dignidad del trabajo"
Además, la Presidenta destacó la necesidad de tener "una Argentina en blanco" donde "los que más tienen le tiendan la mano a los que menos tienen"
"Hay que entender que es necesaria una sociedad equilibrada, donde los que más tenemos le tendamos la mano a los que menos tienen a partir del pago de impuestos, de no tener dinero en negro, la necesidad de una Argentina en blanco", sostuvo la mandataria.
En otro tramo de su discurso, La presidenta consideró "imprescindible" garantizar oportunidades "de trabajo y de vida" para los habitantes de todo el país para que "todos podamos tener los derechos básicos que reconoce la Constitución"
"No estamos pidiendo a alguien que abandone sus lujos, sus mansiones o sus aviones, simplemente que, con una partecita, contribuyan a que todos podamos tener los derechos básicos que nos reconoce como ciudadanos la Constitución "Ese día estaremos en paz con nosotros mismos, con nuestras conciencias y con dios", afirmó Cristina Fernández.
La ceremonia se desarrolló en la sede del jardín de infantes número 963, con la presencia del gobernador bonaerense, Daniel Scioli, del intendente de Quilmes, Francisco Gutiérrez; el secretario General, Oscar Parrilli; y otras autoridades provinciales y representantes de entidades de bien público.
Durante el acto, Cristina Fernández destacó "la esperanza de un país más justo, de una sociedad más equitativa, la esperanza de que alguna vez lo que han sido beneficiados en el reparto de los dones comprendan la necesidad de tender la manos solidaria a los sectores más vulnerables"
En su discurso, la jefa de Estado reafirmó que el trabajo "es el mejor antídoto contra la pobreza" y aseguró que el gobierno nacional seguirá profundizando sus políticas de inversión social con trabajo para que "miles que hoy no tienen trabajo, tengan la dignidad del trabajo"
Además, la Presidenta destacó la necesidad de tener "una Argentina en blanco" donde "los que más tienen le tiendan la mano a los que menos tienen"
"Hay que entender que es necesaria una sociedad equilibrada, donde los que más tenemos le tendamos la mano a los que menos tienen a partir del pago de impuestos, de no tener dinero en negro, la necesidad de una Argentina en blanco", sostuvo la mandataria.
En otro tramo de su discurso, La presidenta consideró "imprescindible" garantizar oportunidades "de trabajo y de vida" para los habitantes de todo el país para que "todos podamos tener los derechos básicos que reconoce la Constitución"
"No estamos pidiendo a alguien que abandone sus lujos, sus mansiones o sus aviones, simplemente que, con una partecita, contribuyan a que todos podamos tener los derechos básicos que nos reconoce como ciudadanos la Constitución "Ese día estaremos en paz con nosotros mismos, con nuestras conciencias y con dios", afirmó Cristina Fernández.
La ceremonia se desarrolló en la sede del jardín de infantes número 963, con la presencia del gobernador bonaerense, Daniel Scioli, del intendente de Quilmes, Francisco Gutiérrez; el secretario General, Oscar Parrilli; y otras autoridades provinciales y representantes de entidades de bien público.