Cristina Fernández arribó a la base militar del aeroparque metropolitano procedente de El Salvador, luego de participar en una misión de apoyo al derrocado presidente de Honduras Manuel Zelaya, cuyo retorno al país fue impedido por el gobierno de facto que el 28 de junio se instauró en ese país.
La mandataria llegó esta mañana luego de participar ayer en El Salvador de una misión con sus pares de Ecuador, Rafael Correa, y de Paraguay, Fernando Lugo, en defensa de la democracia en Honduras y en toda la región.
La presidenta Cristina Fernández sostuvo anoche, antes de regresar a la Argentina, que reaccionar contra el golpe militar que depuso al mandatario de Honduras Manuel Zelaya no limita sus efectos a esa nación sino que constituye una defensa de la democracia para todos los países.
"Reaccionar contra lo que está sucediendo en Honduras no es defender al presidente Zelaya. Es defendernos a todos y cada uno de nosotros", dijo la mandataria.
Cristina Fernández habló en nombre de sus colegas de Ecuador, Rafael Correa, y de Paraguay, Fernando Lugo, con quienes estuvo presente, en fuerte señal de apoyo, en la conferencia que el depuesto presidente hondureño ofreció en San Salvador la noche del domingo (primera hora del lunes en la Argentina), tras su frustrado regreso a Tegucigalpa.
"No estoy hablando (solamente) en nombre los presidentes aquí presentes sino en nombre de millones y millones de ciudadanos del mundo que definitivamente en el siglo XXI han decidido que la democracia es un bien insustituible e irremplazable", destacó la jefa de Estado.
La Presidenta sostuvo que esas personas están convencidas también de "que la democracia y el respeto a la voluntad popular y a las instituciones, es la garantía última y definitiva para la vigencia irrestricta de los derechos humanos, que durante el siglo XX han sido tan violentados"
"Por esas razones es que hoy estoy aquí y voy a estar en todos y cada uno de los lugares en el mundo que sea necesario para garantizar la democracia y la vigencia de los derechos humanos", señaló la Presidenta.
Cristina Fernández afirmó que el apoyo internacional al depuesto mandatario hondureño, y la posición tomada en conjunto con otros líderes de la región, constituyen una expresión de reconstruido multilateralismo.
"La presencia que tenemos hoy aquí los presidentes no son decisiones personales. Lo estamos haciendo en el marco de lo que muchos venimos reclamando desde hace tiempo en un mundo que se había vuelto peligrosamente unilateral", detalló la jefa de Estado.
"Hemos rescatado desde siempre la reconstrucción del multilateralismo, regional y universal, como la garantía definitiva de que ninguna nación, ningún individuo pueda sentirse superior sobre el resto y decidir en nombre de todos", subrayó la mandataria.
"Reconstruir entonces esa multilateralidad, reconstruir la presencia de los organismos que nos representan a todos y a los cuales todos, todas las naciones y todos los individuos debemos acogernos, como la OEA y la ONU, es la garantía de poder volver a vivir en un mundo más justo y más seguro", afirmó la Presidenta
La mandataria argentina señaló por ende, como un hecho nada casual la presencia en ese acto del secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, del presidente de la asamblea de las Naciones Unidas, Miguel D'Escoto.
Finalmente, la jefa de Estado puntualizó "Un mundo multilateral, multipolar, plural, respetuoso de los derechos de todas las naciones y los derechos de los pueblos. Siento que hoy estamos cumpliendo ese mandato, que es el mandato del respeto a los derechos humanos, por eso también en nombre de los presidentes que me han encomendado para estas palabras, quiero llevar toda mi solidaridad y acompañamiento en el dolor a quienes hoy han sufrido la represión"
La mandataria llegó esta mañana luego de participar ayer en El Salvador de una misión con sus pares de Ecuador, Rafael Correa, y de Paraguay, Fernando Lugo, en defensa de la democracia en Honduras y en toda la región.
La presidenta Cristina Fernández sostuvo anoche, antes de regresar a la Argentina, que reaccionar contra el golpe militar que depuso al mandatario de Honduras Manuel Zelaya no limita sus efectos a esa nación sino que constituye una defensa de la democracia para todos los países.
"Reaccionar contra lo que está sucediendo en Honduras no es defender al presidente Zelaya. Es defendernos a todos y cada uno de nosotros", dijo la mandataria.
Cristina Fernández habló en nombre de sus colegas de Ecuador, Rafael Correa, y de Paraguay, Fernando Lugo, con quienes estuvo presente, en fuerte señal de apoyo, en la conferencia que el depuesto presidente hondureño ofreció en San Salvador la noche del domingo (primera hora del lunes en la Argentina), tras su frustrado regreso a Tegucigalpa.
"No estoy hablando (solamente) en nombre los presidentes aquí presentes sino en nombre de millones y millones de ciudadanos del mundo que definitivamente en el siglo XXI han decidido que la democracia es un bien insustituible e irremplazable", destacó la jefa de Estado.
La Presidenta sostuvo que esas personas están convencidas también de "que la democracia y el respeto a la voluntad popular y a las instituciones, es la garantía última y definitiva para la vigencia irrestricta de los derechos humanos, que durante el siglo XX han sido tan violentados"
"Por esas razones es que hoy estoy aquí y voy a estar en todos y cada uno de los lugares en el mundo que sea necesario para garantizar la democracia y la vigencia de los derechos humanos", señaló la Presidenta.
Cristina Fernández afirmó que el apoyo internacional al depuesto mandatario hondureño, y la posición tomada en conjunto con otros líderes de la región, constituyen una expresión de reconstruido multilateralismo.
"La presencia que tenemos hoy aquí los presidentes no son decisiones personales. Lo estamos haciendo en el marco de lo que muchos venimos reclamando desde hace tiempo en un mundo que se había vuelto peligrosamente unilateral", detalló la jefa de Estado.
"Hemos rescatado desde siempre la reconstrucción del multilateralismo, regional y universal, como la garantía definitiva de que ninguna nación, ningún individuo pueda sentirse superior sobre el resto y decidir en nombre de todos", subrayó la mandataria.
"Reconstruir entonces esa multilateralidad, reconstruir la presencia de los organismos que nos representan a todos y a los cuales todos, todas las naciones y todos los individuos debemos acogernos, como la OEA y la ONU, es la garantía de poder volver a vivir en un mundo más justo y más seguro", afirmó la Presidenta
La mandataria argentina señaló por ende, como un hecho nada casual la presencia en ese acto del secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, del presidente de la asamblea de las Naciones Unidas, Miguel D'Escoto.
Finalmente, la jefa de Estado puntualizó "Un mundo multilateral, multipolar, plural, respetuoso de los derechos de todas las naciones y los derechos de los pueblos. Siento que hoy estamos cumpliendo ese mandato, que es el mandato del respeto a los derechos humanos, por eso también en nombre de los presidentes que me han encomendado para estas palabras, quiero llevar toda mi solidaridad y acompañamiento en el dolor a quienes hoy han sufrido la represión"