Muy buenos días a todos y a todas, señores oficiales de las Fuerzas Armadas, señores suboficiales: permítame hoy como Presidenta de todos los argentinos sustraerme de mi carácter de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas. Hoy mirando y entregando estas viviendas, incorporando definitivamente al personal de nuestras Fuerzas Armadas a los planes de federales de viviendas, creo que estamos dando cumplimiento a uno de los artículos más importantes de nuestra Constitución y que es el artículo 16, el que consagra la igualdad de todos los ciudadanos. Por distintos motivos y distintas etapas históricas en nuestro país este principio no tuvo cumplimiento, no es el momento de recordar sino de superar y precisamente en este acto estamos superando esta historia de separaciones o desigualdades.
Pero también quiero decirles que soy la Presidenta de todos los argentinos, y que creo profundamente en la igualdad de oportunidades, porque muchas veces bajo el principio constitucional de la igualdad consagramos injusticias al no entender ni saber que no todos han tenido las mismas oportunidades de poder acceder a una casa, a un estudio, a una vivienda digna.
Por eso hoy más que el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, estoy acá como Presidenta de a todos ustedes, ciudadanos argentinos que visten uniforme, como otros se ponen guardapolvo para ir a enseñar o para ir a operar, u otros se van a trabajar con un mameluco o un casco. Quiero que sepan que yo me siento muy cerca todos y que definitivamente los argentinos, superando una historia difícil, tenemos que a través de gestos y actitudes concretas volver a estrechar nuestras manos y volver a construir un camino común Esa es en realidad la función que tiene que impulsar un presidente, una presidenta o cualquiera que se precie, por sobre todas las cosas, de ser un buen argentino.
Hoy la voz no me está ayudando pero quédense tranquilos que hoy me puede faltar la voz, pero me sobran fuerzas y convicciones para seguir en esta senda que hemos emprendido. Muchas gracias a todos.