Cristina Fernández en el anuncio de las Becas del Bicentenario

PALABRAS DE LA PRESIDENTA CRISTINA FERNÁNDEZ, EN EL ANUNCIO DE LAS BECAS DEL BICENTENARIO, EN EL SALÓN DE LAS MUJERES, CASA DE ROSADA    

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Muy buenas tardes a todos y a todas, en principio felicitaciones a todos y cada uno de los chicos y chicas argentinos que han resultado beneficiarios en este Programa de Becas. Quiero decirles que la educación ha sido para todos nosotros, y cuando hablo de nosotros hablo de una generación que apostó muy fuerte a un proyecto de movilidad social ascendente, y donde nosotros mismos fuimos protagonistas de esa movilidad social ascendente precisamente a través de la educación, la idea del progreso, de que íbamos a estudiar no solamente en nuestra escuela primaria y en nuestra escuela secundaria, sino que queríamos llegar a la universidad para tener un futuro mejor. Lo que decían estos chicos en ese fantástico documental que hizo el canal Encuentro, el ministerio de Cultura, acerca de las posibilidades de progreso económico a través de la Educación Superior, fue también lo que nos movilizó a todos nosotros normalmente provenientes de clase media o de hogares de trabajadores. Son la educación y el trabajo los dos ejes que definen el progreso en serio de una sociedad.

Este gobierno, desde el año 2003, le ha dado a una educación no solamente un lugar en los discursos sino un lugar en la gestión concreta de gobierno, no solamente a través del proyecto de financiamiento para la educación, de los 6 puntos de PBI para alcanzar como meta en el 2010, no solamente a través del plan 750 escuelas y luego mil escuelas, sino encaminando una manera diferente de vincular la educación con el modelo de país y con el modelo económico Charlábamos siempre con Lino Barañao y con Juan Carlos Tedesco, acerca de que durante mucho tiempo hubo una disociación entre lo que fue la universidad y el modelo productivo económico del país, tal vez porque durante mucho tiempo carecimos de un modelo donde necesitáramos trabajadores calificados, donde necesitáramos técnicos, donde necesitáramos ingenieros, porque no teníamos una economía basada en la producción y el trabajo. Por eso este Plan de Becas para 30 mil jóvenes argentinos, que como bien lo ha definido el ministro de Educación con justicia, es el programa más ambicioso en materia de becas para carreras universitarias, no solamente por la modalidad que va increscendo lo que recibe cada alumno, lo cual asegura la permanencia del alumno hasta el final de la carrera y que obtenga finalmente su título, sino porque es orientarlo hacia un modelo de país productivo. Por eso las 200 carreras, tecnicaturas y profesorados que incluyen la lista en la cual se puede anotar el alumno que ingresa al plan.

Tiene que ver con la necesidad que comenzamos a ver a poco de transitar en este nuevo modelo de país que lo que nos reclamaban muchas veces de las empresas, donde faltaba mano de obra calificada para dar mayor competitividad. Pero nosotros queremos dar una competitividad a la economía que no esté basada en la baja calidad del trabajo y por lo tanto en el bajo salario, sino que la competitividad que le queremos dar a nuestra economía y que necesita nuestro modelo, es la capacitación de los recursos humanos para que pueda haber mejor trabajo y mejor remuneración. Hay otros modelos en el mundo, que están basados en la baja intensidad del salario en la composición de los costos de los productos o servicios de una determinada economía. Nosotros creo que tenemos que apostar, y de hecho lo estamos haciendo con esta fuerte inversión que este año va a ser de 150 millones de pesos, a que la competitividad de la Argentina sea por la calidad de nuestros recursos humanos y la calificación de nuestros trabajadores, nuestros técnicos y nuestros profesionales.

Por eso estamos haciendo este esfuerzo muy grande, y creo que vamos a tener que evaluar también el tema de los 12 mil alumnos, vamos a charlar con la gente de finanzas, por que hubo un exceso de anotación, sobre 30 mil vacantes se anotaron 42 mil alumnos, vamos a ver cómo procesamos esos 12 mil chicos y chicas que también tuvieron al necesidad de presentarse ante el Estado para poder tener un futuro diferente y mejor. Yo creo que tenemos que seguir también en esta orientación.

Además, los datos de las escuelas técnicas, una cosa que también había sido demolida en la Argentina; no teníamos escuelas técnicas y fuimos los que restablecimos precisamente la educación técnica y no es casualidad que el 40 por ciento de los inscriptos en este plan de becas provenga, precisamente, de escuelas técnicas, educación técnica a la que le queremos seguir dando mucha importancia.

En el día de ayer iniciamos el proceso licitatorio para 250.000 laptops, de modo tal que los alumnos de los últimos tres años, tercero, cuarto y quinto año de todas las escuelas técnicas de nuestro país, puedan tener una computadora que, por supuesto, estará en el colegio. (APLAUSOS)

La combinación de los esfuerzos que puedan y que deben hacer los alumnos, las esperanzas y las ilusiones que veíamos recién en el corto que tienen las familias, nos tienen que llevar a tratar de hacer todo el esfuerzo de perfeccionarnos cada vez más.

Yo creo que, además -lo charlábamos ayer cuando estábamos en la reunión tratando el proceso licitatorio de las 250.000 laptops-, estamos en un momento del proceso del conocimiento y de la adquisición del conocimiento que yo digo de fronteras. Tenemos en el sistema educativo problemas que muchas veces se colocan en cabeza de los alumnos. Se dice "los chicos no prestan atención" o "a los chicos no les interesa estudiar" y yo creo que no es así. Yo creo que hay un sistema educativo, no solamente en la Argentina, sino en el mundo, que está vinculado a una forma de aprendizaje, que fue la hicimos nosotros, de pensamiento abstracto, de libro de texto y de esa manera se enseñaba.

Pero a mí no me van a poder convencer que los chicos no se pueden concentrar ni pueden estudiar, cuando son capaces de estar tres o cuatro horas frente a una computadora. Esto significa que estamos ante una necesidad de reformular los sistemas de aprendizaje y de conectividad entre los profesores y los alumnos que debemos abordar, pero no nos preocupemos, porque no es un problema de la Argentina únicamente, es un problema también del mundo y tenemos que abordarlo.

Yo creo que en ese sentido tenemos que trasponer esa frontera. Yo siempre comparo esta etapa de las computadoras con la etapa de la imprenta de Gutenberg, debe haber sido cuando terminó el conocimiento que estaba solamente en los conventos o en las iglesias y pasó a la sociedad a través de la imprenta.

Estamos en un momento de frontera del crecimiento similar y creo que seguir trabajando mucho en ese sentido y creo que, precisamente, es desde las partes técnicas, desde las partes de aprendizaje fundamentalmente de todo lo que tiene que ver con la ingeniería informática, diseño de software, en que podemos ayudar a diseñar una nueva forma de enseñar, una nueva forma de aprender.

No creo que todo tiempo pasado fue mejor, no soy una que piensa eso. Normalmente, cuando uno traspone los 50 años tiene esa tendencia a decir que todo tiempo pasado fue mejor. Yo creo que lo mejor siempre está por venir, siempre creí de esa manera y por eso me incorporé desde muy joven a la política, porque creo que hay que seguir transformando y trabajando para el futuro y hacerlo en forma positiva.

Creo que todos ustedes, que van a iniciar esta experiencia de incorporarse al estudio de carreras técnicas, pueden también ayudar mucho, porque nadie mejor que ustedes conocen las cosas que les interesan a ustedes y a los que se conectan en su propio mundo. También una característica de las que hablábamos ayer, es que hoy los jóvenes tienden a conectarse entre sí como generación a través de la cibernética.

Tenemos también -por eso este programa de becas y por eso las 250.000 laptops de ayer- que apuntar a la inclusión de los que no pueden hacerlo porque sus familias carecen de los medios para poder incorporarlos.

Este programa de becas tiende, fundamentalmente, a la otra gran parte en la que nosotros concebimos a la educación, no solamente como un fenómeno de información, no solamente como un fenómeno de formación, sino a la vez como una política de inclusión social.

Por eso, estamos muy contentos y vamos a seguir trabajando en esto que era una de mis ilusiones más grande que las presentamos el año pasado, un 11 de septiembre, para el Día del Maestro, si mal no recuerdo, cuando lanzamos este plan en esta misma Casa de Gobierno nada más que en el Salón Blanco y hoy lo hacemos aquí, en el Salón de Mujeres Argentinas del Bicentenario.

Es un orgullo y una gran alegría poder darles a estos jóvenes la oportunidad que tal vez no la hubieran tenido si el Estado no hubiera estado presente. Creo que es también una intervención, es también una política necesaria la presencia del Estado para lograr que la educación no sea solamente el derecho que tiene alguien por haber nacido en un hogar con posibilidades económicas y que le es negado a los que no tienen estas posibilidades.

Para estas cosas creo que tenemos que seguir trabajando y profundizando la inclusión en la Argentina a través de la generación de trabajo, de capacitación y de educación, con recursos del Estado que, en definitiva, son los recursos que todos los argentinos aportan cuando pagan sus impuestos. Ustedes son parte de los impuestos que pagan los argentinos.

Muchas gracias y buenas tardes. (APLAUSOS)