Muy buenos días a todos y a todas: de todas las obras en materia ferroviaria que me tocado anunciar, esta tiene un sabor particular. Yo viajaba desde muy joven en el tren, en este tren, en el General Roca; había dos maneras de transportarse desde La Plata en transporte público hasta Buenos Aires, por la vieja línea del Expreso Río de La Plata que unía La Plata-Buenos Aires y la otra era el tren; había que ir hasta las calles 1 y 44, a la estación, a la vieja estación que veo sigue tan vieja en realidad bastante más vieja que en la época en que yo la utilizaba, porque creo que de todos los servicios ferroviarios que se han abandonado, tal vez el más deteriorado, el que más impactó el abandono de una política ferroviaria nacional ha sido precisamente la línea General Roca; sin lugar a dudas, es la más deteriorada.

Me acuerdo de esos viajes donde pasábamos por Plátanos, Quilmes, Berazategui, Avellaneda finalmente hasta llegar a Constitución, inclusive cuando por allí el tren se detenía no en alguna estación sino en el medio del trayecto, aún así a mí me encantaba mucho más viajar en tren; yo siempre prefería ir en el tren antes que ir en el colectivo cuando viajaba a Buenos Aires, porque es un modo de transporte muy especial, uno siente otras cosas cuando va en el tren.

Pienso que esta obra, como recién decía Daniel, conjuntamente con toda la renovación del sistema ferroviario, es un salto a la modernidad de la República Argentina muy importante.

Recuerdo cuando anunciábamos el tren de alta velocidad Buenos Aires-Rosario, decían "falta tal vez esto, falta lo otro". Lo que en realidad se está haciendo es todo un desarrollo de puesta en marcha de una infraestructura ferroviaria moderna, contemporánea. Obviamente, ni todos los anuncios ni todos los proyectos pueden hacerse exactamente el mismo día, pero lo cierto es que hay una decisión y junto a la decisión la planificación de una política ferroviaria diferente en la República Argentina; creo que esto es lo más importante y lo que tenemos que rescatar.

Me acuerdo también que inclusive era el modo de transporte político; cuando había grandes movilizaciones las agrupaciones políticas nos congregábamos en la vieja estación en las calles 1 y 44 y de allí partíamos, no hacia Plaza Constitución sino hacia Plaza de Mayo, digamos que Plaza Constitución era el punto de llegada.

Creo argentinos y argentinas que obras de esta naturaleza hacen sin lugar a dudas, como recién decía Daniel, al mejoramiento de toda la articulación de todo el servicio productivo, pero fundamentalmente a la calidad de vida de los trabajadores, porque en definitiva si algo transporta el General Roca son trabajadores de toda la zona Sur que viene a prestar servicios a la Capital Federal esencialmente. Entonces creo que esta obra no solamente hace a la puesta en marcha de la modernidad, sino que es un gesto de justicia hacia un sector del Conurbano Bonaerense, el sector Sur que siempre había estado muy abandonado en materia ferroviaria. Por eso la presencia, la decisión de esta electrificación del Roca.

También me parece importante la modalidad que se ha adoptado de dividirlo en tres tramos y que además las ofertas puedan ser sobre la totalidad de los tramos o sobre uno de los tramos, porque ayuda, me parece, a una mejor competencia, a una mejor decisión a la hora de otorgamiento de la licitación. Creo que es un buen sistema, porque nos ha dado muy buenos resultados.

Así que, con todas las ganas de siempre, con todo el compromiso de siempre y como todos los días, trabajando para mejorar la calidad de vida de todos nosotros, los argentinos.

Muchas gracias y tengan todos ustedes muy buenos días. (APLAUSOS)