José de San Martín: El héroe libertador y su legado inmortal

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Un día como hoy pero de 1850 fallecía el General Don José de San Martín en Boulogne-sur-Mer, Francia. A 174 años de su deceso, recordamos el paso a la inmortalidad del Padre de la Patria, una figura central en la historia de América Latina y uno de los grandes arquitectos de la independencia sudamericana.

La conmemoración de esta fecha no solo honra su muerte sino que también celebra su trascendencia, su legado y su impacto duradero en la región. Su figura ha sido inmortalizada en la memoria colectiva de la Argentina y del continente, no solo por sus logros militares, sino también por los valores que encarnó: libertad, justicia y unidad.

El 17 de agosto fue instituido como feriado nacional en la Argentina para rendir homenaje al General San Martín y reconocer su papel en la emancipación de Argentina, Chile y Perú.

El legado de San Martín va más allá de sus hazañas militares. Su visión de una América Latina libre y unida sigue siendo un ideal para muchas naciones. Promovió la idea de que la libertad no solo era un derecho inalienable, sino también un deber colectivo. Fomentó valores como la disciplina, el sacrificio, la humildad y la abnegación.

“Serás lo que debas ser o no serás nada" - San Martín

Este fue uno de sus pensamientos más recordados que evidenciaron su compromiso con el deber y el honor. También es conocido por su firme oposición a cualquier forma de tiranía y su defensa del sistema republicano.

En 1812 San Martín creó el Regimiento de Granaderos a caballo con el objetivo de liberar América. Entre sus hitos fundamentales en la historia de la independencia sudamericana, San Martín es recordado por el Cruce de los Andes (1817), la Batalla de Chacabuco (1817), la Batalla de Maipú (1818) y la liberación de Perú (1821), entre otras.

Tras su retiro de la vida política y militar, San Martín vivió en el exilio en Europa, donde se mantuvo alejado de las disputas internas que asolaban las nuevas naciones independientes. A pesar de su alejamiento, su figura se mantuvo como un símbolo de integridad y sacrificio por el bien común.

Su legado de valores y principios siguen siendo una guía para las generaciones presentes y futuras. Desde 1850 sus restos se encuentran custodiados por los Granaderos en el Mausoleo del General San Martín, ubicado en el lateral derecho de la Catedral Metropolitana.