El presidente Alberto Fernández encabezó esta tarde, en el Museo del Bicentenario, la recepción de la réplica del mural "Retrato de personajes: Gabriela Mistral y Berta Singerman" del artista mexicano Roberto Montenegro, que quedará expuesto como muestra de la hermandad y la fortaleza del vínculo entre ambos países.
“Esta obra está dedicada a ellas, una chilena y una argentina, y la pintó un mexicano. Una maravillosa síntesis de lo que debe ser América Latina: lugar de mancomunión y donde nos encontremos”, resaltó el mandatario durante la ceremonia.
En esa línea afirmó: “En los tiempos que vivimos, donde a veces el individualismo es tan cruel y deja tan de lado la solidaridad, ver la obra del muralismo, que es un trabajo en equipo, también nos debe llamar a la reflexión de las maravillas que se pueden hacer trabajando en el conjunto”.
Sobre el vínculo histórico entre ambos países, el mandatario explicó que “México significa mucho, porque fue tierra donde encontraron cobijo muchos argentinos que tuvieron que exiliarse del terror”, al tiempo que invitó a celebrar “el arte que México nos regala”.
El presidente estuvo acompañado por el ministro de Cultura, Tristán Bauer; la escritora e investigadora mexicana, Beatriz Gutiérrez Müller; la secretaria de Cultura de ese país, Alejandra Frausto; y el titular de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Héctor Vasconcelos.
Al tomar la palabra, Gutiérrez Müller destacó “la amistad que une entrañablemente desde tiempos ancestrales” a México y Argentina, y señaló: “Traer a estos espacios la belleza del mural que está detrás de nosotros es realmente un acto significativo por el gozo de ver a mujeres enormes como Gabriela Mistral y Berta Singerman”.
En su intervención, Bauer agradeció a “México que tanto ha cobijado científicos, artistas, trabajadoras y trabajadores” de Argentina a lo largo de la historia, al tiempo que subrayó la importancia y "lo fundamental de la cultura para el desarrollo sostenible, la paz, la inclusión y la cohesión social”.
A su vez, la secretaria de Cultura de México precisó que “hoy lo que más importa es el bienestar de los pueblos, y donde se abrieron las heridas más dolorosas se está desatando una revolución de paz a través del arte y la cultura, como lo hizo José Vasconcelos hace 100 años para hacer una sociedad más justa”, y definió: “El muralismo es un movimiento de arte político, público y democrático para que todas y todos nos reconozcamos en él”.
Por su parte, el senador Vasconcelos subrayó que Gabriela Mistral y Berta Singerman “se convirtieron ambas en parte medular de un período fundacional y memorable de la cultura mexicana”, al tiempo que transmitió su agradecimiento a las artistas “por su contribución a una gesta singular para la cultura mexicana moderna y por su devoción al ideal que subyacía a dicha odisea, la idea de una América Latina unida y enaltecida”.
Luego de sellar en simultáneo las estampillas de ambos países, Gutiérrez Müller obsequió al mandatario argentino una moneda conmemorativa dedicada a Berta Singerman y una caja con fotografías de la artista ruso-argentina.
Participaron también del acto la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, la embajadora mexicana ante Argentina, Lilia Eugenia Rossbach Suárez, autoridades nacionales, miembros del cuerpo diplomático de ese país, y representantes del área de la cultura de ambas naciones.
El mural fue elaborado por el pintor mexicano Roberto Montenegro en 1922, ante el pedido del entonces secretario de Educación Pública de ese país, José Vasconcelos. La obra sintetiza parte del manifiesto del movimiento muralista mexicano, además del pensamiento místico y filosófico del propio Vasconcelos que consideraba que el arte pictórico debía reflejar los principios y costumbres del pueblo.