El presidente Alberto Fernández entregó hoy, a una familia de Tucumán compuesta por los padres y sus siete hijos, la casa número 50.000 construida por el Gobierno nacional durante los dos últimos años en todo el país.
“Siempre digo que no hay momento más gratificante para mí que el momento en que entrego una casa a una familia. Tener un techo es tener un lugar donde poder vivir dignamente, donde poder ver crecer a sus hijos en tranquilidad y en paz. Es la posibilidad de ser parte de un barrio para vivir comunitariamente compartiendo”, señaló Fernández, acompañado por el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo.
“Todas estas casas habían quedado abandonadas con un nivel de avance de las obras de casi el 90% y que inexplicablemente en el año 2017 dejaron de hacerlo”, explicó el mandatario, luego de la recorrida por el predio habitacional Manantial Sur, de la capital tucumana.
“Para que estas casas puedan existir, hacen falta de Estados”, señaló el Presidente, y añadió: “Estas casas no las hacen los bancos. Cuando las hacen los bancos, los créditos se llaman UVA y la gente se queda hipotecada de por vida”.
Por su parte el ministro Ferraresi, recordó que “ustedes pasaron mucho tiempo por acá, vieron que las casas estaban abandonadas y sentían dolor. A partir de la decisión de Alberto Fernández de tener un ministerio que se ocupe del tema del hábitat, vinimos a repararlo y que a nunca más en la Argentina nos vuelva a pasar ese dolor”.
Estuvieron presentes el jefe de Gabinete, Jorge Manzur; el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; y la interventora del Instituto Provincial de la Vivienda (IPVyDU), Stella Maris Córdoba, entre otras autoridades provinciales y de la ciudad capital.
A través del Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, se encuentran en ejecución más de 125.000 viviendas correspondientes al Programa Federal Casa Propia, mientras que se entregaron más de 55.000 créditos para la construcción y 102.000 para refacción.