El presidente Alberto Fernández mantuvo esta tarde una reunión con el presidente de General Motors Internacional, Shilpan Amin, quien le anunció que la compañía comenzará a producir la SUV Chevrolet Tracker en su planta del Complejo Automotor de Alvear, en la Provincia de Santa Fe, lo que demandó una inversión directa de 350 millones de dólares para el mes de julio.
El objetivo de la empresa es exportar el nuevo vehículo a países de Latinoamérica, principalmente a Brasil y Colombia, adonde destinará el 80% de la producción que incorporó la tecnología de manufactura 4.0.
Durante el encuentro, el mandatario dialogó con los ejecutivos de General Motors sobre el proyecto de ley de Promoción de la Movilidad Sustentable, que prevé la creación de un régimen especial para los vehículos propulsados por fuentes de energía sustentables.
La ley establece un régimen de beneficios tanto para la demanda (público comprador de vehículos) como para la oferta (terminales, autopartistas, fabricantes de baterías y cargadores, entre otros actores del sector). El trabajo se inscribe en la posibilidad de la Argentina de convertirse en un referente regional en la materia, aprovechando el potencial de litio con el que cuenta el país.
El jefe de Estado estuvo acompañado por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Santiago Cafiero; y el embajador argentino ante los Estados Unidos, Jorge Argüello.
Por General Motors participaron, junto a Shilpan Amin, el vicepresidente Global de Políticas Públicas, Thomas Cooney, la jefa de Gabinete del vicepresidente de la firma, Alethea Gordon, y el Director Global de Asuntos Regulatorios, Daniel Frakes.