"Los argentinos aprendimos con dolor y con esfuerzo y vamos a reafirmar el camino que hemos tomado, que es el del trabajo, del diálogo y el de construir oportunidades a partir de las múltiples potencialidades que tiene nuestro país", afirmó el presidente Mauricio Macri.
El Jefe del Estado sostuvo que "todavía hay un núcleo que está convencido que hay una posibilidad" de que el país salga adelante "sin trabajar y sin respetar las mínimas leyes de convivencia", pero aseveró que el acto electoral de este año "va a ratificar que los argentinos no vamos a volver atrás".
El Presidente habló durante la cena anual de la Fundación Libertad, celebrada en el Goldencenter del complejo Parque Norte, donde compartió una charla con el premio Nobel de la Literatura, Mario Vargas Llosa.
Durante su participación en el encuentro, al que llegó acompañado por la primera dama, Juliana Awada, luego de que ambos asistieron a la recepción en su honor ofrecida por los Reyes de España en el Hotel Four Seasons, Macri saludó al secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro.
Asistieron, además, el jefe de Gabinete, Marcos Peña; el canciller Jorge Faurie y los ministros de Transporte, Guillermo Dietrich, y de Seguridad, Patricia Bullrich.
Macri subrayó que "hace tres años y medio la Argentina produjo un cambio que sorprendió al mundo" en momentos en que "el populismo nos llevaba a una fase de degradación como la que hoy vemos en Venezuela".
Sin embargo, advirtió que entonces todavía "no había conciencia del nivel de gravedad y de profundidad" que tenía la caída que había sufrido el país y de lo que significaba "tener un cepo, no tener energía y estar aislados del mundo".
"Era una telaraña de una complejidad absoluta frente a la cual necesitamos bastante tiempo para tomar control de la situación", señaló.
Afirmó que hoy hay un fuerte contraste respecto de aquel cuadro de situación, ya que la Argentina ha tomado la decisión de "construir instituciones sanas, tener calidad democrática, una buena relación con el mundo e invertir en toda la infraestructura que necesita un país de nuestro tamaño".
"Hemos construido rutas y autopistas como nunca en los últimos 65 años, puertos, energía, redes de cloacas, agua potable", remarcó.
Señaló que "ahora estamos en un momento muy duro, pero es un camino de construcción, el mismo que recorrió España con resultados tan buenos, también Colombia, Perú".
Afirmó que "lo que estamos haciendo es una reforma más estructural en lo económico, pareja con lo que hicimos en las instituciones, en las relaciones exteriores y en infraestructura".
Macri apuntó que en la medida que se mantenga este rumbo "con persistencia, con equilibrio fiscal y con un presupuesto sano" la Argentina "va a recuperar la moneda para terminar con la inflación, impulsar el crédito y volver a tener movilidad social ascendente".
En ese sentido el Presidente destacó la importancia de no volver a caer en "la fascinación de las soluciones mágicas y de los atajos".
"Hace 70 años que probamos ese tipo de soluciones y nunca funcionó. Creíamos que podíamos pasar por arriba de la ley de la gravedad y así fuimos acumulando cada vez más pobreza", advirtió.