La Primera Dama, Juliana Awada, visitó a familias afectadas por las inundaciones en Chaco y se reunió con integrantes de los equipos de rescate que trabajaron durante la emergencia climática.
"Hoy estuvimos en Chaco, una de las provincias más afectadas por las inundaciones, acompañando a las familias evacuadas. En estos momentos difíciles, estar cerca es fundamental para que sepan que no están solos, que estamos para escucharlos y acompañarlos en este camino y que van a salir adelante" dijo la Primera Dama.
Awada viajó junto a la ministra de Salud y Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley, y el secretario de Gobierno de Salud, Adolfo Rubinstein.
Luego de ser recibida en el aeropuerto local por el gobernador Domingo Peppo, la Primera Dama y los funcionarios se trasladaron hasta la localidad de Santa Sylvina.
Allí se reunieron con la intendenta local Susana Maggio para analizar la marcha de las acciones que se están realizando con el objetivo de garantizar asistencia a los vecinos damnificados y reparar los daños que provocó la emergencia en el casco urbano.
En primer lugar mantuvieron un encuentro con el personal que trabajó en las tareas de rescate y luego se visitaron el hospital "Dr. Moreno Díaz Setuvi", donde la Primera Dama conoció a Olga, una vecina de 50 años con problemas de salud que fue evacuada días atrás.
Además, estuvieron en la Feria Franca, un espacio integrado por 20 familias de pequeños productores de la zona, mucho de los cuales resultaron afectados por la emergencia hídrica.
Las zonas de la provincia de Chaco que sufrieron el impacto de las inundaciones continúan recibiendo asistencia en el marco del operativo de emergencia que lleva adelante el Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR).
Estas acciones se desarrollan con la participación de efectivos del Ejército, Gendarmería, Prefectura Naval y la Policía Federal e incluyen la distribución de medicamentos y elementos de primera necesidad provistos por el Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación, entre otras tareas.
El Gobierno declaró el pasado 24 de enero el estado de Emergencia Hídrica por 180 días en las provincias afectadas e instruyó a los Ministerios y a los diferentes organismos estatales para que adopten todas las medidas necesarias para brindar ayuda a los pobladores y para que se activen también, a través del Banco Nación y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), distintos mecanismos de asistencia a los productores.