Resumen
Néstor Carlos Kirchner fue un abogado y político argentino que ocupó la presidencia de la Nación entre 2003 y 2007. Nació el 25 de febrero de 1950 en Río Gallegos, Santa Cruz, y tuvo una extensa trayectoria política en su provincia, donde fue gobernador durante tres mandatos consecutivos (1991-2003). Llegó a la presidencia en un contexto de crisis económica, social e institucional, tras la crisis de 2001, con el desafío de estabilizar el país y recuperar la gobernabilidad. Su gestión incluyó una reestructuración de la deuda externa, el crecimiento económico y una política activa en materia de derechos humanos. En 2007, decidió no buscar la reelección y apoyó la candidatura de su esposa, Cristina Fernández de Kirchner, quien asumió la presidencia. Luego continuó su actividad política hasta su fallecimiento el 27 de octubre de 2010, dejando una fuerte impronta en la política argentina de las siguientes décadas.
Biografía
Néstor Kirchner nació en Río Gallegos, Santa Cruz, el 25 de febrero de 1950. Estudió Derecho en la Universidad Nacional de La Plata, donde conoció a Cristina Fernández, con quien se casó en 1975. Durante los años 70, participó en la militancia política peronista y, tras el golpe de Estado de 1976, regresó a Santa Cruz, donde trabajó como abogado. Con la recuperación de la democracia en 1983, comenzó su carrera política en el Partido Justicialista, primero como intendente de Río Gallegos (1987-1991) y luego como gobernador de Santa Cruz (1991-2003). Su gestión provincial se caracterizó por la administración de fondos provenientes de regalías petroleras y la expansión de la obra pública. En 2003, se presentó como candidato presidencial con el apoyo del entonces presidente Eduardo Duhalde y asumió el cargo tras la renuncia de Carlos Menem a disputar la segunda vuelta electoral.
Presidencia
Néstor Kirchner asumió la presidencia el 25 de mayo de 2003, tras obtener el 22% de los votos en la primera vuelta electoral, en un contexto de crisis económica y social. Su gestión se centró en la recuperación del crecimiento económico, el descenso del desempleo y la renegociación de la deuda externa, logrando una reestructuración con quitas significativas. En el ámbito institucional, promovió una renovación en la Corte Suprema de Justicia y una mayor intervención del Estado en distintos sectores económicos. En cuanto a política de derechos humanos, impulsó la anulación de las leyes de obediencia debida y punto final, lo que permitió la reapertura de juicios por crímenes de lesa humanidad. En política exterior, fortaleció los vínculos con países de América del Sur y tuvo una relación fluctuante con organismos financieros internacionales. En 2007, decidió no presentarse a la reelección y apoyó la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner, quien fue electa presidenta.
Post Presidencia y fallecimiento
Tras dejar la presidencia, Kirchner continuó con una fuerte presencia en la política argentina. Fue elegido diputado nacional en 2009 y asumió la presidencia de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), desempeñando un papel en la política regional. Durante este período, mantuvo una activa participación en la gestión de gobierno junto a Cristina Fernández de Kirchner. En 2010, sufrió problemas de salud y fue sometido a dos intervenciones cardíacas. El 27 de octubre de 2010, falleció en El Calafate, Santa Cruz, a los 60 años, a causa de un paro cardíaco. Su muerte generó un fuerte impacto en la escena política argentina, con múltiples manifestaciones de apoyo y despedida. Su figura sigue siendo objeto de debate en la política del país, debido a su rol en la reconfiguración del peronismo y su influencia en el período posterior a su gobierno.