Ésta es una síntesis de la conferencia de prensa dada hoy por el Presidente en Olivos.
La turbulencia pasó, el problema sigue siendo el déficit fiscal
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Consideramos superada la turbulencia, como dijo el presidente del Banco Central, pero es muy importante reconocer el momento de nerviosismo que se vivió, mucha gente con angustia y miedo.
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No es comparable con crisis del pasado, porque de esas crisis los argentinos ya aprendimos, y ahora tenemos las herramientas y el equipo necesarios para hacerles frente y solucionarlas.
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Tenemos que hacer un balance y entender que el problema es el déficit fiscal. Tenemos que reducirlo porque es una carga para todos, pero además porque, como el déficit nos hace depender del financiamiento externo, nos genera una vulnerabilidad muy grande.
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Lo que pasó en esta semana es que el mundo ha decidido que la velocidad con que nos habíamos comprometido a reducir el déficit fiscal no es suficiente en términos de garantizar que vamos a hacerlo con la seriedad y la profundidad que se necesita.
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Por eso tenemos que acelerar y tenemos que sentarnos todos en serio, alrededor de una mesa, y hacer un gran acuerdo alrededor de cómo vamos a equilibrar algo que la Argentina no logra hacer desde hace más de 70 años.
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Los argentinos necesitan tener previsibilidad, necesitan tener la certeza de que este gasto descontrolado no los va a terminar aplastando otra vez en este esfuerzo que están haciendo.
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Necesitamos sacarnos esta mochila que pone en peligro el trabajo de cada laburante que sale a las 6 de la mañana, todos los días, y se toma el transporte público, trabaja 8 horas y no falta nunca, y él no recibe nada de todos esos subsidios, de todas esas cosas que están dentro del Presupuesto, de todos esos privilegios que tenemos que ver y sentarnos con seriedad para ver cómo los acotamos y cómo logramos que podamos vivir con lo que tenemos y no sigamos endeudando a las futuras generaciones.
Autocrítica
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"La autocrítica que me hago, por mi personalidad, por mi temperamento, es que yo siempre he sido muy positivo y optimista y tal vez puse metas demasiado optimistas para todos. Pero sentí que no estábamos preparados para enfrentar un ajuste profundo desde el primer día. Tampoco esta locura que todavía escuchamos que dicen que está todo bárbaro y que podemos seguir con este déficit y podemos seguir en el desorden absoluto, que nos llevaba a una situación de colapso como la de Venezuela".
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"Por otro lado, tampoco políticamente la Argentina estaba preparada para dar un debate serio, como siento que hoy estamos. Hoy ya empiezo a escuchar que todo el mundo empieza a decir: 'sí, es verdad, basta de mentiras, digamos las cosas como son'".
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"Con metas demasiado optimistas alguna gente se irritó, porque muchos dicen que no hicimos un diagnóstico suficientemente duro o descriptivo concreto de la realidad que heredamos. Hicimos algo, el primero de marzo de 2016. Creímos que era suficiente, porque tampoco creímos que era tan bueno hablar de lo mal que estábamos".
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Además, tuvimos problemas de coordinación entre el Gabinete Económico y el Banco Central. Tenemos para mejorar ahí y estamos, en estos días, trabajando juntos y hemos mejorado mucho. El Banco Central es independiente y esa coordinación tiene que hacerse sin vulnerar su independencia.
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Estamos recorriendo todo el tiempo caminos inexplorados, en los cuales intentamos hacer las cosas lo mejor posible, pero el problema de fondo es que para los argentinos, especialmente para la dirigencia argentina, es el momento de que nos hagamos cargo de corregir este problema, que se arrastra hace muchas décadas, y que sistemáticamente nos ha llevado a crisis, default, generación de pobreza y destrucción de empleo.
La responsabilidad de bajar la inflación queda en manos del Banco Central
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En esta nueva etapa vamos a delegar, como corresponde, la responsabilidad de la baja de la inflación en el Banco Central y él irá comunicando cuáles son las medidas que va tomando y los pronósticos que tiene.
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Lo que queda claro es que es fundamental bajar la inflación porque es lo que más castiga a los que menos tienen y lo que más castiga a los trabajadores. Además es una traba al crecimiento, y el objetivo fundamental del gobierno es crecer, es generar oportunidad y hacerlo en forma federal, en todo el país.
Los pedidos del FMI
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El Fondo no habló de las leyes laborales ni tampoco del tipo de cambio. Nosotros somos precisos, decimos exactamente lo que se habla, acá no hay agendas ocultas, está todo sobre la mesa. No hay ninguna negociación oculta, es una negociación pública, y nadie nos va a condicionar.