Esta es una síntesis de las palabras de la ministra de Seguridad en su audiencia de hoy en el Senado, al respecto de la desaparición de Santiago Maldonado.

• Es intención de nuestro gobierno llegar a esclarecer este caso.

• Nosotros no vamos a ser cómplices de absolutamente nada, ni lo somos. Somos un gobierno democrático, institucionalista, un gobierno que cree en el Estado de Derecho, que cree en los Derechos Humanos.

• Somos un gobierno que está absolutamente compenetrado con la necesidad de que la Argentina sea un país de convivencia en paz y estamos absolutamente compenetrados con la necesidad de generar un modelo de convivencia con los pueblos originarios y poder tener una cierta distancia respecto de la actitud violenta de grupos minoritarios en la zona sur de nuestro país.

• Grupos que han tenido acciones extremadamente violentas como la quema de refugios, la quema de camiones, la quema de máquinas, en los últimos tiempos la quema de la estación de la trochita, o la quema violenta de un puesto que estaba habitado.

• A partir de esto, se realizaron reuniones entre el gobierno nacional, el Ministerio de Seguridad, los Ministerios de Seguridad de las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut.

• En Neuquén, el problema no es tan grave como sí lo es en Chubut y Río Negro, y en esas reuniones se tomaron una serie de medidas para bajar estos niveles de violencia y lograr que la zona viva en paz.

• Los niveles de violencia y la quema de refugios, casas y estaciones de tren nos han preocupado fuertemente y creemos que es importante que el Estado Nacional y el Parlamento argentino puedan distinguir lo que es la acción del pueblo mapuche, que como todos ustedes saben está regido por leyes y sus derechos garantizados en nuestra Constitución, de lo que puede ser un grupo que, permanentemente, tiene acciones violentas en la zona.

• Acciones que llegan a casos como el del 21 de julio que fue un episodio muy extremo y muy violento de quema de una casa donde vivía un puestero que fue maniatado, que fue violentado, que fueron quemadas todas sus pertenencias y que, realmente, nos retrotraen a situaciones de violencia que creo que la Argentina no quiere repetir de ninguna manera.