A continuación, una selección de los discursos:
Mauricio Macri
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Mucho se ha dicho acerca de mi frase de que tenemos el mejor equipo de los últimos cincuenta años. Hoy ratifico lo que dije. Sobre todo si uno mira 50 años atrás y encuentra una Argentina donde la pobreza casi no existía y que tenía uno de los mejores sistemas de educación pública del mundo.
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La gente tiene que saber que tiene derecho a vivir dignamente, tiene derecho a recibir las herramientas, a recibir una educación de calidad para que ellos y sus hijos puedan progresar.
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Lo más triste que puede haber para cualquier ser humano es que alguien te regale el presente para robarte el futuro. Te anula la capacidad, la posibilidad de lo que significa para vos construirte un futuro, porque cuando vos te lo construís eso te genera una dignidad y una impronta, una presencia, y vos sabés que hiciste esto y lo transmitís, y tenés una seguridad.
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Lo peor que logra el populismo es la resignación, que la gente crea que se tiene que conformar con eso, se tiene que conformar con vivir sin cloacas, sin agua potable, sin pavimento.
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Tenemos la obligación de transmitirles ese horizonte, esa esperanza, esa visión que tenemos porque claramente de eso se trata liderar. Hasta ahora todo lo construimos y queda claro porque creyeron en lo que les decíamos. Creyeron porque nos vieron cerca.
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Entonces digo, tenemos esa obligación, y hasta ahora todo lo construimos y queda claro, y lo diré de vuelta, porque creyeron en lo que les decíamos, y creyeron porque nos vieron cerca, nos vieron gente normal, gente que no les quiere decir que esto es un sobretodo, no, les decimos esto es una camisa, y eso empezó a construir un vínculo desde la verdad, por eso yo machaco con la verdad, porque todo es la verdad, y la Argentina tiene que volver a manejarse con la verdad, nos han enfermado mucho con la mentira y con los eufemismos, en vez de hablar en forma directa.
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Así que busquen bien adentro, busquen bien adentro que lo tienen, y claramente lo tienen, si están acá tienen esas reservas, tienen esa entereza, tienen ese corazón, busquen bien adentro. Y recuerden también que lo que más me costó entender, desde que asumí la presidencia, es el cambio del simbolismo, lo que representa la palabra de uno hoy. Todos ustedes tienen que hacer lo mismo y entender que aunque ustedes crean que no, en su barrio, en el supermercado, en el club, en el colegio cuando van a buscar a un hijo, hay siempre varios que los están observando y diciendo: “este trabaja en el Gobierno, este es uno de los que quiere el cambio, este es de Cambiemos”.
María Eugenia Vidal
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Lo clave este año es sostener nuestros valores. Valores, como dijeron Marcos y Horacio, de estar, y de hacer. Y yo le sumo es liderar. Para mí el estar y el hacer no tienen que ver con una disciplina, no tienen que ver con ponerlo en la agenda, no tienen que ver con las reuniones o las recorridas, o poner hoy toca timbreo. Es más profundo que eso. Es una manera de ser. Ni siquiera de gobernar. Y yo espero y apuesto y confío en que cada uno de ustedes son eso. Porque si no no estaríamos acá. Ustedes son “estar” y “hacer”. Porque eso es lo que nos define como personas, antes que como gobernantes.
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Y si estamos y hacemos, vamos a cometer menos errores. De eso estoy segura. Compartiendo lo que dijeron antes, el problema no es equivocarse. El problema es no escuchar antes. Y para escuchar antes hay que ponerse en el lugar del otro. Escuchar no es sólo poner la oreja, es pensar todo el tiempo en la posibilidad de que a lo mejor estamos equivocados y el otro tiene razón.
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Si tenemos ese “estar” y ese “hacer”, entonces podemos liderar. Porque todos ustedes son líderes. Cada uno desde su lugar son líderes de cambio. Ser líder no es salir en la foto, no ir a un programa de televisión, no es medir en una encuesta. Ser líder es poder mostrar el futuro, ser capaz de entusiasmar al otro con lo que todavía no ve. Poder decirle que aunque hoy transite una dificultad o un conflicto, al final del camino va a estar mejor. Y esta vez va a ser un mejor de verdad, no un “mejor” de maquillaje ni de parche. No es un mejor de “ganamos un año y en la otra elección vemos que hacemos”. Es un mejor en serio, es un mejor de verdad.
Marcos Peña
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Luchamos todos los días por revalidar que nosotros queremos una argentina distinta, con una cultura de poder distinta, que genere una realidad para todos aquellos que necesitan de nuestra tarea para poder soñar, aunque no sea para ellos, una realidad distinta para sus hijos y nietos.
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Hay que entender que a veces cuando se genera un poco de frialdad, de dudas, de distancia, de críticas, muchas veces de nosotros mismos. Cuando ponemos en duda los errores es porque nos alejamos de nuestra convicción y nos volvemos racionales y fríos, tecnocráticos.
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Es una locura pensar que un equipo humano no puede fallar, lo que tenemos que hacer es mejorar todos los días para cometer la menor cantidad de errores. Pero el error que no tenemos que cometer nunca es dejar de ser quienes somos, es perder nuestra identidad o corrernos de eje, porque esa defraudación no se recupera nunca más.
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Si nosotros volvemos siempre a quienes somos, por qué estamos acá, para quién trabajamos, y cómo vamos a ir logrando todos los días un mejor cambio y una mejor realidad, entonces vamos a estar bien.
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Conectémonos con esa misión increíblemente inspiradora de ser la generación que de verdad cambie la historia de este país.
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Tenemos que asumir que estamos acá para liderar, para marcar un camino, un horizonte. No alcanza con transmitir que vinimos a ordenar nuestro país. Tenemos que conectarnos con los sueños, con las aspiraciones, porque eso le permite a los argentinos entender hacia dónde vamos y muchas veces soportar la dureza cuando esos momentos tardan en llegar.
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Este año vamos a revalidar que no llegamos acá por error. Que no llegamos acá por descarte o porque los otros eran peores. Llegamos acá porque representamos un sueño de una mayoría de argentinos y lo vamos a lograr llevar adelante.
Gabriela Michetti
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En estos momentos en los que se pone a prueba todo lo que estamos haciendo, es cuando más tenemos que volver a ponernos en el día inicial cada uno de nosotros decidió involucrarse en lo público para poder servir a nuestro país con la idea de un bienestar mayor para las personas, sobre todo para las que ven que su camino en la vida no tiene oportunidades para desarrollar un proyecto personal.
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A veces los microclimas en los que estamos nos envuelven y nos contagian, nos contaminan. Por eso también es bueno volver al origen, preguntarnos por qué y para quién hacemos las cosas. Para empezar, uno de cada tres argentinos, que están esperando que hagamos lo que nos comprometimos a hacer. Y tenemos que hacerlo, porque sólo si lo hacemos juntos va a tener el efecto que esperamos que tenga.
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Hay que tratar de darse como mínimo dos o tres días al mes para ir a recorrer los barrios, los lugares más vulnerables de la Argentina, y estar en contacto permanentemente con nuestra gente.
Horacio Rodríguez Larreta
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Llegamos acá por el valor del hacer, estamos acá para transformar y eso requiere un esfuerzo enorme, mucho más que en otros ámbitos.
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Cada día que no hacemos, cada expediente que dejamos un día o que lo resolvemos en la reunión de la semana que viene, es una escuela que no se abre, es un tren que no llega, es una inundación que no se soluciona, es una inversión que no se concreta y no genera trabajo.
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La cantidad de razones que hay en el Estado para que algo no suceda son infinitas y es por esto que para gestionar se requiere método y seguimiento.
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El valor más importante es el estar cerca. Llegamos acá gracias a la cercanía y esto quiere decir estar en todas sus formas, desde reuniones con vecinos, visitas a los barrios o recorridas de hospitales. Lo importante, como dije, es estar.