Las seis provincias de la Patagonia comparten geografía, identidad, oportunidades y desafíos similares. Pese a ello, no ha existido hasta ahora una lógica común para abordar esta situación.
Reconocemos la necesidad de que la Patagonia tenga una mirada integral y expresamos la decisión política del Gobierno Nacional para coordinar y acompañar este proceso.
Por eso convocamos esta reunión de trabajo con los gobernadores, el comienzo de un camino que identificará ejes y programas para avanzar en una visión común. El objetivo es repetir esta reunión cada tres meses. Los ministros del gabinete también trabajarán con sus colegas de las provincias patagónicas. Queremos que la discusión sea participativa, con las universidades, las empresas, los municipios y la sociedad civil.
La reunión de hoy es la primera vez en más de 20 años en que el presidente convoca a los seis gobernadores patagónicos para conversar sobre los desafíos de la región.
Creemos que la Patagonia tiene un potencial enorme. El Proyecto Patagonia es una invitación a conversar sobre cómo ir acercándonos a ese potencial. Algunos desafíos son más urgentes, como la creación de empleo, el crecimiento de sus ciudades y las necesidades de infraestructura y conectividad.
Otros, de más largo plazo, nos permiten soñar. Estamos trabajando en un Plan de Riego para multiplicar la superficie cultivable en la Patagonia. Además de Vaca Muerta, queremos que la Patagonia se convierta en uno de los centros mundiales de las energías renovables, sobre todo con la energía eólica. El Mar Argentino tiene un potencial gigantesco. Al igual que el turismo, los Parques Nacionales y la relación con la naturaleza. El Instituto Balseiro y el Invap podrían convertirse en los ejes de un polo de investigación, desarrollo e innovación.