En el marco de ForestAr 2030 y del Plan Nacional de Restauración de Bosques Nativos que lidera la Secretaría de Ambiente de la Nación, comenzó la plantación de 4.500 árboles en el Parque Nacional Los Alerces, en la provincia de Chubut, con el objetivo de recuperar áreas de bosque nativo afectadas por los incendios forestales ocurridos en 2015.
El trabajo, que involucra coihues y cipreses de semillas provenientes de la zona, es realizado en el faldeo del Cerro El Dedal por voluntarios de distintos sitios del país con la supervisión y el apoyo logístico de personal de ese parque y de la Dirección Nacional de Conservación de la Administración de Parques Nacionales.
Se trata de una zona afectada por el fuego en la que los bosques incendiados tienden a transformarse en matorrales, más inflamables y propensos a volver a quemarse y persistir como tales, impidiendo así la posibilidad de que vuelva a haber un bosque maduro en el lugar afectado.
Dicha situación fue producida por la acción del fuego y la colonización de especies exóticas invasoras, muy utilizadas con fines ornamentales en la zona, que aprovechan estos disturbios y dificultan la recuperación del bosque nativo.
El Parque Los Alerces, ubicado al oeste de la provincia, es una gran área protegida y patrimonio mundial de la Unesco, que incluye a los lagos Futalaufquen, Verde, Krüger, Rivadavia, Menéndez y el río Arrayanes.
En representación de la Secretaría de Ambiente de la Nación estuvo presente el secretario de Política Ambiental en Recursos Naturales, Diego Moreno, y participaron además el presidente de Parques Nacionales, Eugenio Bréard y el director ejecutivo de la Asociación Amigos de la Patagonia, Sebastián Homps.
La actividad es llevada adelante junto con la Administración de Parques Nacionales, la Subsecretaría de Bosques e Incendios de Chubut y la Asociación Amigos de la Patagonia.