La producción de gas en junio creció un 5,8 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior, y representa la producción más alta desde septiembre de 2008, de acuerdo a los datos de la Secretaría de Energía.
La producción de petróleo, en tanto, se incrementó en un 2,5 por ciento y acumula 16 meses de crecimiento interanual ininterrumpido.
El aumento de la producción permitió al país desplazar importaciones, incrementar las exportaciones y aproximarse al equilibrio de la balanza comercial energética durante los primeros meses del año.
Durante el primer semestre de 2018 el déficit fue superior a los 1.000 millones de dólares, mientras que en el primer semestre de este año acumula 126 millones.
El aporte de Vaca Muerta compensó una caída del 7 por ciento en la producción de gas convencional y permitió continuar con las exportaciones a Chile por un promedio diario de 4,33 millones de metros cúbicos y un máximo de 6,3 millones.
Por su parte, la producción de petróleo alcanzó los 497 mil barriles por día y acumula 16 meses de crecimiento interanual ininterrumpido.
El no convencional tuvo un aumento del 47 por ciento y ya representa un 18 por ciento de la producción total.