El Gobierno declaró hoy el estado de emergencia agropecuaria para Mendoza, Santa Fe, Santiago del Estero y Tucumán, una medida que activa los mecanismos de asistencia para los productores de esas provincias cuyas actividades fueron afectadas por las inundaciones, bajas temperaturas y granizo.
El secretario de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, firmó las resoluciones publicadas hoy en el Boletín Oficial, de acuerdo con la recomendación emitida días atrás por la Comisión Nacional de Emergencias y Desastres Agropecuarios (CNEyDA), que es la encargada de analizar y dictaminar sobre los pedidos de las provincias afectadas.
En el caso de Mendoza, ante los daños provocados por tormenta de granizo, el período de emergencia abarcará del 1 de enero al 31 de marzo de 2019 para las producciones agrícolas de bajo riesgo en algunos distritos de los departamentos de Lavalle, Luján de Cuyo, Junín, Maipú y Rivadavia.
Para Santa Fe, la declaración de emergencia por inundaciones regirá, desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2019, y beneficia a productores de los departamentos de la capital provincial, Garay, Las Colonias, San Justo, San Javier, San Martín (distritos de Carlos Pellegrini, María Susana y Piamonte), San Cristóbal (distritos de Aguara Grande, San Cristóbal, Las Avispas, Huanqueros, Villa Saralegui, La Lucila, Ñanducita, Colonia La Clara y Soledad), San Jerónimo (distritos de Coronda y Larrechea) y Belgrano (distritos de Bouquet, Montes de Oca y Tortugas).
Con respecto a Santiago del Estero, la asistencia abarcará el período de doce meses, a partir de enero de 2019, para las localidades de Cañada Escobar, Colonia Gamara y Clodomira (departamento de Banda), La Cañada y Hurito Huasi (departamento de Figueroa), y Colonia El Simbolar, Fernández, Vilmer, Forres y Beltrán (departamento de Robles), todas afectadas en forma directa por las inundaciones de enero pasado.
En Tucumán, contempla la totalidad del territorio provincial por efecto de las bajas temperaturas y las precipitaciones intensas ocurridas durante octubre y noviembre del año pasado.
El período comprende del 1 de octubre de 2018 al 30 de septiembre de 2019 para las producciones de arándanos, papas, garbanzos y trigo.
Etchevehere señaló que “con la inmediata publicación de las declaraciones de emergencia habilitamos los mecanismos que prevé la Ley para brindar herramientas que ayudan a minimizar el impacto de los daños causados por las inclemencias climáticas a los productores de las provincias afectadas”.
Para acogerse a los mecanismos dispuestos por la Ley de Emergencia Agropecuaria Nacional (26.509), los damnificados deberán presentar el certificado extendido por la autoridad competente de la provincia.
La norma contempla una serie de beneficios impositivos y postergación de vencimientos que operen en instituciones bancarias nacionales, oficiales o mixtas.