El rompehielos Almirante Irízar continúa con su misión en la Antártida, en el marco de la Campaña de Verano (CAV) 2017-2018 organizada por el Ministerio de Defensa de la Nación para reabastecer a las bases argentinas.
El rompehielos y el buque Estrecho San Carlos implementaron por primera vez la técnica convoy, que consiste en que el buque polar le abra camino en el hielo a la otra embarcación.
La práctica se llevó a cabo durante la navegación por las aguas del Mar de Weddell, que bañan la isla Marambio, donde el Irízar se encontró a la altura de Bahía Pingüino con el aviso Estrecho de San Carlos, ambos asignados a la Campaña Antártica.
El buque polar fue abriendo paso al aviso mientras ambos navegaban en campos de hielo de gran concentración, con el fin de concretar el pasaje en bote de la dotación del refugio Groussac, integrado por ocho miembros de la Armada.
Fue la primera vez que un aviso de la clase del Estrecho de San Carlos operó en Marambio, realizando maniobras de carga con el helicóptero MI17I de la Fuerza Aérea Argentina y trasladándola con dos vehículos anfibios a rueda.
También fue la primera vez en que el riompehielos y el aviso hicieron una experiencia de convoyado en el hielo o una navegación en convoy).
Tras esa operación el Irízar, que volvió a participar de una CAV luego de diez años y tras ser sometido a un proceso de modernización y refacción en astilleros nacionales, emprendió nuevamente la navegación, hacia la base antártica temporaria Decepción.