Un grupo de investigadores del Conicet descubrió en Corrientes una nueva especie de escorpión, el Tityus curupi, en lo que representa un hallazgo de gran importancia biogeográfica, ya que no existían registros del grupo al que pertenece fuera de la zona norte de la cordillera de los Andes y de Uruguay.
El descubrimiento ocurrió en Tres Cerros, un paraje ubicado al este de la provincia, y la primera descripción del alacrán fue publicada en un artículo de la revista PLOS.one.
“No es habitual que dentro del género Tityus encontremos ejemplares entre rocas, porque generalmente habitan áreas más bajas. Sin embargo, este escorpión aparece exclusivamente en zonas rocosas arriba de los cerros, pero no en los alrededores”, señala el investigador adjunto del Conicet en el Museo Argentino de Ciencias Nacionales “Bernardino Rivadavia”, Andrés Ojanguren.
Los equipos del museo no sólo realizaron observaciones mediante las que verificaron que el nuevo alacrán es diferente a otros del mismo género, sino que además realizaron análisis moleculares que comprobaron que se trataba de una especie completamente distinta desde el punto de vista genético.
Los investigadores estiman que el veneno del Tityus curupi –denominado así en referencia a un personaje mitológico guaraní- no es muy tóxico.
“Es otra muestra de la gran biodiversidad que existe en los Tres Cerros, que es una zona en la que en los últimos años registramos un gran número de especies endémicas, tanto animales como vegetales”, destaca otro de los autores del estudio, el investigador asistente del Conicet en la Facultad de Ciencias Exactas, Naturales y de Agrimensura de la Universidad Nacional del Nordeste, Rodrigo Cajade.