El presidente Mauricio Macri recorrió una planta procesadora de almendras ubicada en el departamento mendocino de Lavalle y subrayó que “hay que agregar inteligencia” al desarrollo del campo con “más tecnología e industria de servicio”.
“El campo argentino es el primer motor, el punto de partida al cual tenemos que darle valor agregado, y para eso es necesario generar confianza y trabajar en equipo el sector público y el privado”, apuntó.
La planta industrial de la empresa Aceitera General Dehesa, inaugurada en febrero y ubicada en la Finca Santa Mónica, cuenta con 2700 metros cuadrados de superficie y equipos de última generación que cumplen con los estándares de cuidado ambiental.
El Jefe de Estado recorrió las instalaciones acompañado por el ministro del interior, Rogelio Frigerio; el secretario General de la Presidencia, Fernando de Andreis; el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, y autoridades, empleados y proveedores de la empresa.
Medio centenar de habitantes de la localidad de Jocolí y sus alrededores trabajan a diario en forma directa, mientras que 65 lo hacen temporalmente en tareas de recepción, limpieza, pelado, descascarado, selección electrónica, tamañado, envasado y almacenamiento.
El Presidente destacó que “todos los empleados de la planta estaban trabajando en el campo y se capacitaron para ahora hacer funcionar esas máquinas tan modernas”.
“Eso es lo que todos queremos, seguir aprendiendo, seguir desarrollándonos, seguir apostando por nuestro futuro”, remarcó.
La empresa invirtió en los procesos de producción agrícola de la finca y en la construcción de la planta industrial, proyectos que para llevarlos a cabo emplearon a más de 200 personas.
De las 1750 hectáreas de la finca, 800 tienen variedades de almendros de tipo español que, por su floración tardía, evitan las consecuencias de las heladas de julio y la primera quincena de agosto.