El Ministerio de Salud de la Nación puso en marcha una iniciativa que facilita el acceso a prótesis y otros dispositivos destinados a personas con movilidad reducida, que ya había sido implementada en algunas localidades, aunque se planea extenderlo a todas las provincias.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el continente americano más de 140 millones de personas padecen algún tipo de discapacidad y sólo un tres por ciento accede a la atención especializada que necesita.
Con el objetivo de aportar una solución en ese sentido, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) asiste al Servicio Nacional de Rehabilitación del Ministerio de Salud para instalar talleres de prótesis y ortesis en hospitales públicos de todo el país.
Desde esta área se desarrolló un abordaje a partir de tecnologías simplificadas de alta calidad y efectividad, de bajo costo y de fácil reparación.
“Contar con un taller público en cada provincia permitirá a los pacientes con movilidad reducida acceder a prótesis u ortesis económicas, personalizadas, en tiempo reducido y cerca de su lugar de residencia”, anticipa Rafael Kohanoff, director del Centro de Tecnologías para la Salud y la Discapacidad del INTI.
La metodología de trabajo desarrollada por el INTI consiste en construir pequeñas plantas y capacitar a profesionales para que puedan realizar los dispositivos en sus propios establecimientos.
El modelo se transfirió a ciudades y localidades como Mendoza, 9 de Julio, El Bolsón, La Rioja, Ledesma, Palpalá, Río Gallegos, Río Grande, San Fernando del Valle de Catamarca, Santo Tomé, Santiago del Estero, Tartagal y Villa La Angostura.
La exitosa experiencia en estos casos llevó a Kohanoff a elevar esta propuesta al Ministerio y a firmar un acuerdo para replicarlo en todas las provincias.
En tanto, ya está en marcha la construcción de los primeros diez talleres y luego se avanzará en los 14 establecimientos restantes.
En el mes de diciembre el Ministerio abrió una licitación para el suministro de todas las máquinas y herramientas necesarias, con la colaboración de expertos del INTI, y una vez que lleguen estos equipos se demorarán tres meses para su instalación.