El jefe de Gabinete, Marcos Peña, sostuvo que en el caso del Correo Argentino “no hubo nada” por parte del Gobierno que “se  haya apartado ni un milímetro de la ley, la ética, la transparencia y la institucionalidad” y afirmó que “no hay condonación de deuda”, ni “hecho consumado”, sino “un proceso judicial que todavía está abierto”.

Peña deploró, además, la actitud de quienes fueron responsables de graves perjuicios al Estado durante el anterior Gobierno y hoy “se rasgan las vestiduras planteando e igualando esto a escandalosos hechos de corrupción, obscenos, como los bolsos de López y otras cosas”.

“El proceso judicial está abierto, ese acuerdo sin homologación de la Cámara no es válido. El acuerdo todavía no existe como tal”, señaló el Jefe de Gabinete en declaraciones a radio Mitre.

Peña subrayó que en ese marco es que el Gobierno ha formulado el pedido para que la Justicia realice “una revisión integral” que incluya a los juicios promovidos por la empresa contra el Estado.

“Lo que tenemos que cuidar nosotros es el proceso institucional; el contenido lo tienen que llevar los abogados en el fuero judicial”, afirmó.

Peña remarcó que cuando el Gobierno pidió la intervención de la Auditoría General de la Nación “teníamos claro que eso se iba a hacer a través del Congreso”.

Destacó que la idea es “buscar instituciones que puedan intervenir y que sean independientes”.

“La Oficina Anticorrupción y la Procuraduría las nombra el Presidente. Por eso fuimos por la opción de la Auditoria”, agregó.

Sostuvo que “lo que le decimos a los abogados del Estado es que primero paren la pelota, analicen el conjunto de la discusión, que la Cámara busque expertos externos, que actúe con celeridad, porque son 15 años y cada día que pasa es peor este tema”.

“Y después, una vez que venga una propuesta, le vamos a pedir a la Auditoría, a través del Congreso, como corresponde, que haga una evaluación. Esa es la propuesta que hacemos para que los abogados del Estado, si la Auditoría General de la Nación por pedido del Congreso plantea que los términos de ese acuerdo no son buenos, vuelvan a foja cero”, señaló.

“Seamos conscientes de una cosa, y esto es el corazón de esta cuestión: ¿A quién le conviene que este tema no se resuelva nunca? A la empresa”, advirtió.

Peña agregó que “nos parece bárbaro” que desde la fiscalía “investiguen todo”, pero aclaró que es necesario investigar “desde el 2002 hasta la fecha” para poder entender “por qué este perjuicio al Estado”.

El Jefe de Gabinete alertó que “tenemos que elevar la calidad del debate político y técnico en la Argentina” luego de “doce años de un Gobierno mitómano que nos volvió locos a todos”.

“Cuando tiran cualquier cosa, cualquier cifra, en cualquier tema, lo que más pedimos es dar una discusión sobre qué estamos discutiendo, y a partir de ahí, poder dar la discusión siguiente sobre si se podrían haber hecho mejor las cosas, de qué manera”, señaló.