El Gobierno puso en marcha tres proyectos de construcción de viviendas en las localidades tucumanas de Las Talitas, Ingenio San Pablo y Villa Carmela, con una inversión total de 900 millones de pesos, a través de un convenio suscripto entre el Ministerio del Interior y el gobernador Luis Manzur.
El plan de obras para el municipio de Las Talitas, ubicado al noroeste de la ciudad de San Miguel de Tucumán, en el departamento de Tafí Viejo, incluye la edificación de las casas y el montaje de la infraestructura para llevar a los vecinos redes de agua potable, gas natural y electricidad.
Este proyecto es una de las obras que la Secretaría de Vivienda de la Nación definió como prioritarias en el Plan Nacional de Vivienda y Hábitat 2016–2019 que el presidente Mauricio Macri lanzó en abril último.
El nuevo barrio, que se levantará a través del Programa de Construcción Techo Digno, estará dividido en cuatro secciones, cada vivienda tendrá una superficie de 55 metros cuadrados y contará con dos dormitorios, una cocina equipada, comedor, baño y lavadero con pileta.
El acuerdo prevé, además, el tendido de redes de agua potable y gas natural, alumbrado público, arbolado, cordones-cuneta y conexiones domiciliarias a todos los servicios.
Además, el secretario de Vivienda y Hábitat, Domingo Amaya, le entregó al interventor del Instituto de la Vivienda de Tucumán, Gustavo Durán, notas de No Objeción Técnica (NOT) que habilitan a las autoridades provinciales a poner en marcha dos proyectos para la construcción de viviendas que demandarán una inversión de 661 millones de pesos.
Con esta autorización, el Gobierno nacional financiará edificaciones en Ingenio San Pablo, una localidad del departamento de Lules ubicada a ocho kilómetros de San Miguel de Tucumán, y otras en Villa Carmela, en Tafí Viejo.
La emisión de una NOT para cada nuevo proyecto es facultad de la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación y condición indispensable para poner en marcha el proceso de licitación de las obras.
A través del Plan Nacional de Vivienda y Hábitat, y de los diferentes programas de construcción de viviendas, microcréditos, urbanizaciones integrales y proyectos para garantizar el acceso al agua potable y cloacas a las comunidades más vulnerables del país, el Gobierno busca dar una solución habitacional a cuatro millones de argentinos en los próximos años.
Amaya destacó que la puesta en marcha de estas obras permite “cumplir con el objetivo que nos trazan el presidente Macri y el ministro Rogelio Frigerio de poner todos los recursos y la fuerza del Estado para dar soluciones a quienes más lo necesitan”.