Por cáncer podemos entender a un extenso grupo de enfermedades que comienzan en las células, componentes básicos del organismo, cuando el proceso de reproducción celular se descontrola formando nuevas células que el cuerpo no necesita y otras viejas no mueren cuando deberían. Así se forma una masa de tejido denominada tumor, que pueden ser benignos o malignos, solo estos últimos son cancerosos.
A partir del 2000, todos los 4 de febrero se conmemora el Día Mundial contra el Cáncer con el objetivo de concientizar acerca de esta enfermedad y reducir el número de muertes evitables por año.
El Ministerio de Salud nos recomienda:
· Evitar el tabaco y promover los ambientes 100 por ciento libres de humo.
· Aumentar el consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
· Realizar actividad física todos los días, por lo menos 30 minutos.
· Evitar el consumo excesivo de alcohol.
· Evitar la exposición al sol entre las 10 y las 16 horas y utilizar protectores solares.
· Adoptar hábitos de vida saludables, una dieta sana y actividad física ayudan a disminuir el riesgo de cáncer.
· Realizar controles médicos periódicos ayuda a prevenir el cáncer hasta en un 40 por ciento.
Mitos y verdades. Conocer la información adecuada facilita la prevención del cáncer:
MITO: El cáncer inevitablemente lleva a la muerte.
VERDAD: Actualmente muchos cánceres se pueden curar si son detectados a tiempo y en otros el paciente puede convivir con la enfermedad, tratándola y manteniendo una buena calidad de vida.
MITO: La depresión, la angustia y el estrés pueden causar cáncer.
VERDAD: El hecho de que una persona esté deprimida, triste o estresada no genera un riesgo mayor de desarrollar cáncer. No existe ninguna investigación o estudio que demuestre la asociación entre sentimientos o estados de ánimo con la aparición de esta enfermedad.
MITO: Los edulcorantes artificiales causan cáncer.
VERDAD: No existen estudios que demuestren que el consumo de alimentos y/o bebidas que contienen sacarina, ciclamato o aspartamo produzcan cáncer.
MITO: Si fumo pocos cigarrillos no tengo riesgo de contraer cáncer.
VERDAD: El riesgo de desarrollar cáncer aumenta a partir del primer cigarrillo que se fuma. De hecho, solo respirar el humo que exhala una persona fumadora implica mayores posibilidades de contraer enfermedades cardiovasculares, pulmonares y cáncer.
Conocé más sobre los factores de riesgo y las formas de prevención haciendo click acá.