Palabras del Presidente de la Nación en el Congreso de Inversiones Inmobiliarias
Veo que se están notando los efectos de la recuperación, estamos todos felices.
Bueno, básicamente, a la luz de lo que es el debate, hoy voy a dar una charla que tiene más de técnico que de político, dado lo sucio del debate. En especial, respecto a la sociedad y la deshonestidad intelectual con la que debaten los orcos, o cómo tratan de instalar temas. Porque parece que ahora están muy preocupados por la pobreza, por los indigentes, pero parece que en los cuatro años anteriores no había ni pobres ni indigentes, y cuando habían estado antes en el gobierno, los habían escondido debajo de la alfombra porque decían que era estigmatizante.
Por eso, si bien yo creía que había que dejar de hablar tanto de la herencia o algo, lamentablemente la deshonestidad intelectual del kirchnerismo y sus socios políticos nos obliga a tener que contar de vuelta por qué lo que estamos haciendo en el resto del mundo se considera un milagro, mientras que acá empiezan a encontrar cosas que no había hasta hace 8 meses, como si el problema de la pobreza y la indigencia fuera un problema que se gesta en un solo día.
En ese sentido, cuando nosotros llegamos al gobierno, estábamos frente a la peor herencia que recibió un gobierno en toda la historia argentina. Combinábamos elementos de las tres peores crisis que tuvo Argentina en la historia. En lo que tiene que ver en el plano monetario, teníamos un sobrante monetario, un desequilibrio monetario como consecuencia del control de capitales, que se manifestaba en una brecha de 3 a 1 con el tipo de cambio, es decir, una brecha del 200%. El sobrante monetario era el doble del que existía en la previa del Rodrigazo. Crisis que implicó que, al momento de tener que cincelar las cuentas externas, multiplicó por seis la tasa de inflación.
Con el kirchnerismo trayendo la inflación en torno al 250%, eso solamente eso de piso, hubiera puesto la inflación en términos del 1500%. Y, de hecho, siendo que además el desequilibrio era del doble, por lo menos eso solo ya hubiera llevado la tasa de inflación a niveles del orden del 3000%.
No solo eso, sino que, además, como si todo esto fuera poco, combinábamos con un balance del Banco Central aún peor que el que había durante los inicios de 1989, es decir, previo a la hiperinflación de Alfonsín, quien tuvo que huir del poder con una inflación del 5000% anual. En esa situación, la relación de pasivos remunerados respecto a lo que tiene que ver con la base monetaria era de cuatro veces. Esto quiere decir que hubiéramos multiplicado la tasa de inflación por cuatro veces, esto significa que, como si nada, nos hubiéramos ido a inflaciones del nivel del 12.000%.
Y como si todo esto fuera poco, además teníamos indicadores sociales que eran peores que los del 2001. Por lo tanto, estábamos frente a una verdadera catástrofe, verdaderamente frente a una situación social y una situación económica y financiera lamentable.
A esta pintura se le agregan algunos elementos adicionales: la economía argentina no crecía genuinamente desde el 2011, es decir, tenía fluctuaciones frente a un mismo nivel, que el nivel tope se había alcanzado en el año 2011 y nunca más se logró superar. Eso implica que, al momento de llegar al poder, estábamos con un PBI per cápita entre 13 y 15% por debajo del nivel que se había observado en el año 2011. No solo eso, el empleo formal estaba clavado en 6 millones de personas, en 6 millones de puestos de trabajo, y ese número no se había movido. Lo único que había aumentado significativamente era el empleo informal. Es decir, aquellos que tanto se jactan de cuidar y proteger a los trabajadores generaron un empleo informal más grande que el que había en el sector formal, había ocho millones de personas en el informal respecto al sector formal. Qué linda forma de cuidar a los trabajadores tiene el movimiento nacional de los trabajadores.
Como si fuera poco, como no se generaba ni siquiera empleo suficiente en el plano formal, la cantidad de empleados públicos fue llevada a 4 millones de personas; es decir, una forma encubierta de mentir la tasa de desempleo, cuya contrapartida era la caída del salario real. No por nada cuando se fueron del poder había 40% de pobres, había 10% de indigentes, dos de cada tres chicos ya eran pobres; no es algo nuevo, ya eran pobres, y una de las ofensas más grandes que generó el kirchnerismo que un tercio de los trabajadores, cuando históricamente el trabajo fue un elemento de movilización social ascendente, un tercio de los trabajadores eran pobres aun teniendo trabajo. No solo eso, sino que además a ese cuadro de actividad, empleo, salarios, pobreza e indigencia tan lamentable, se acompañaba con una tasa de inflación creciente. Pareciera que descubrieron que ahora apareció la inflación. Es muy interesante porque, luego de lo que fue el exitoso programa de convertibilidad, que fue el mejor programa económico de la historia - salvo por el hecho de que lo estamos mejorando nosotros -, básicamente el kirchnerismo tuvo distintos escalones de inflación. Néstor Kirchner llevó a la inflación a un promedio en torno al 10%; Cristina Fernández de Kirchner, en su primer gobierno, lo llevó a 20; en su segundo gobierno, lo llevó a 30; Macri lo llevó a 40; y Alberto Fernández se terminó yendo con cerca de 250% de inflación. Es decir, vean la dinámica en la cual venía acelerando la tasa de inflación.
No solo eso, sino que, además, en el mes de diciembre del año pasado, en la primera semana la inflación venía viajando a un ritmo del 1% diario, eso en términos anualizados, y les aviso que la tasa de inflación se computa en términos exponenciales, es decir, eso implica, o si ustedes quieren un crecimiento geométrico para el que lo quiere hacer en términos discretos. Y eso significa una inflación de entorno al 3700 anual; no solo eso, sino que como si esto fuera poco cuando ustedes computaban dos semanas de diciembre, es decir, ya cuando estábamos por asumir, esa tasa se había acelerado a niveles del 7500% anual. Y esto, que parece una exageración, yo recuerdo que cuando nos tocó asumir una de las cosas, más allá del no hay plata, expliqué el riesgo de la hiperinflación, y en ese contexto la inflación mayorista, que es la que suele adelantarse, mostró un índice del 54% mensual, 54% mensual les cuento que anualizado es 17,000%
Por lo tanto, así es como venía la dinámica macro. Siempre va a aparecer el que diga que ese escenario no era transpolable y en realidad lo que hacía que se fuera transpolable o no, tenía que ver con que existiera convalidación monetaria y ni que hablar que había muchos que proponían esa convalidación monetaria. Entonces, básicamente la pregunta es entonces, qué nos encontramos del lado fiscal y monetario que pudiera habilitar semejante aberración se volviera realidad.
O como quiera hacernos creer el soviético, que en realidad es una ficción y sólo una cuestión de cuentitas. El problema es que él no la sabe hacer ni siquiera con un ábaco, porque no sabe sumar ni con un ábaco.
En ese sentido, más o menos, cuando ustedes estudian la literatura de indicadores tempranos de crisis, uno de los indicadores son los déficits gemelos, es decir, la combinación del déficit fiscal con la que vendría a ser el déficit de cuenta corriente. En general, cuando ustedes tienen déficits gemelos por cuatro puntos del PBI eso es una alerta amarilla. Cuando tienen 8% del PBI es una alerta roja y se van a pegar una tremenda piña. Bueno, nosotros heredamos déficits gemelos por 17 puntos del PBI. No solo eso, de esos 17 puntos del PBI, 15 eran generados por el sector público, por el Estado, ya sea por el Tesoro y por el Banco Central, donde de esos 15, cinco correspondían al Tesoro nacional y 10 correspondían al Banco Central. Como lo habrán escuchado nombrar como déficit cuasifiscal.
Al mismo tiempo teníamos vencimientos de deuda teníamos 25,000 millones de dólares de vencimientos de deuda externa, donde la gran mayoría de esos vencimientos eran con organismos multilaterales de crédito; y aquí también había un problema, porque Argentina sistemáticamente había violado lo que eran los acuerdos con el Fondo, las metas con el Fondo Monetario Internacional. En eso sí, caerle todo al kirchnerismo sería injusto, porque si hay algo que caracterizó a la Argentina a lo largo de toda su historia es no cumplir con las metas pactadas con el Fondo Monetario Internacional.
Por otra parte, a eso mismo había vencimientos de deuda en pesos por el equivalente de 90 mil millones de dólares. Pero no solo eso; había otros problemas adicionales que básicamente tenían que ver con la quiebra del Banco Central. Básicamente, una de las cosas que hizo el gobierno anterior, nos dejó cerca de cuatro bases monetarias en el formato de lo que se llaman pasivos remunerados o pases. Pero, en lugar de ser las LELIQs, que tenían plazos de 30, 60, 90, 120, 180, y así sucesivamente, nos dejaron todos esos pasivos remunerados a un día. Es decir, que en un día podríamos haber quintuplicado la cantidad de dinero. Por lo tanto, cuando hacés la cuenta antes, no era 3000 por cuatro, sino que era por cinco, un 15000% de inflación estaba subyacente en toda esa emisión monetaria.
Pero además teníamos problemas de stocks, problemas de deuda adentro del Banco Central. Uno de los problemas que teníamos era la deuda de las SIRA, que era la deuda de los importadores, y estaban frenadas las importaciones, básicamente porque el Banco Central tenía 11.000 millones de dólares de reservas internacionales negativas. Es decir, el Banco Central estaba literalmente quebrado. De hecho, el sinceramiento se hizo durante nuestra gestión y básicamente lo que mostramos es que el kirchnerismo le rompió al Banco Central el equivalente a 45.000 millones de dólares. Un verdadero escándalo.
Pero no solo teníamos el problema de las Siras, que lo que estaba haciendo era trabar el problema de las importaciones y, por ende, se hacía muy difícil producir, sino que, además, de las importaciones solamente se pagaba el 15%. Con lo cual imponía una lógica de caja muy complicada para los importadores y para los productores. Les aviso que hoy ese número ya está por arriba del 90. Además, había dividendos pisados por el equivalente 10 mil millones de dólares. Y había algo escondido que, cuando ustedes miraban el balance del Banco Central no se notaba, que era una posición de títulos que era contingente que son los famosos puts, una verdadera irresponsabilidad, tanto el gobierno anterior como el jefe de la misión del Fondo Monetario Internacional, que lo avaló. Porque eran el equivalente de cuatro puntos del PBI. Lo que pasa es que ustedes, esos puts, no se anotaban por el valor de la contingencia, sino que se anotan por el valor del contingente, o sea, por el put en sí mismo, es una cuestión de contabilidad.
Con lo cual, si están para ser ejercidos, ustedes tienen un problema enorme que no está manifestado en el balance. Es decir, hubo complicidad para esconder esos cuatro puntos del PBI adentro del balance del Banco Central, porque como el gobierno anterior no cumplía las metas monetarias, no cumplía las metas fiscales, no cumplía las metas adentro del balance del Banco Central, entonces crearon un mecanismo por el cual esa deuda no se veía.
Entonces, cuál era la gran apuesta, la gran apuesta del gobierno anterior. Básicamente, ellos no creían que nosotros éramos liberales libertarios, ellos creían que nosotros éramos liberales libertarados, y la apuesta que hacían es que el primer día, ignorando los problemas de stocks y flujos, donde acabo de describir el despiole que había en términos de stocks y en términos de flujos, liberáramos alegremente. No hace falta que les diga que, si quintuplicábamos la cantidad de deuda del Banco Central en la base monetaria, si se defaultea la deuda de comercial, si se defaultea la deuda con los dividendos y se defaultea la deuda con el exterior, digamos, toda esa cuestión, hubiera generado las bases para generar la hiperinflación con cinco, con cuatro bases monetaria venciendo un día. Por lo tanto, en un día hubiéramos quintuplicado la cantidad de dinero, hubiéramos desatado una mega crisis fenomenal, esto hubiera estallado en el medio de las fiestas y ustedes saben que al movimiento nacional y popular le gusta agitar la violencia en el mes de diciembre y en enero, hubieran tenido nuevamente a un gobierno kirchnerista que supuestamente iba a venir a salvar todo.
Afortunadamente, no les dimos el gusto. Desde el primer momento nosotros tuvimos claro la magnitud del desafío que teníamos. Recuerdo que, en esa primera etapa, de hecho, teníamos reunión de gabinete todos los días. Recuerdo todos los días yendo a Casa Rosada, llegando a las 8 de la mañana y yéndome cerca de las 12 de la noche. Fueron, la verdad, momentos muy intensos, muy duros. Pero también es cierto que también creó un espíritu de cuerpo con todo el gabinete, gabinete con el que estoy absolutamente orgulloso y estoy consciente de que estamos llevando a cabo una gesta heroica que va a quedar marcada en los libros de texto, porque estamos comprometidos en hacer el mejor gobierno de la historia de Argentina.
Básicamente, entonces, el primer objetivo que era claro: había que evitar la hiperinflación. Nosotros, convencidos de que la inflación es siempre y en todo lugar un fenómeno monetario, entonces estábamos convencidos de que lo que había que hacer era frenar con la emisión. Y de esos elementos vinculados a la emisión, había cuestiones vinculadas al déficit fiscal, y en cuestiones vinculadas al déficit cuasi fiscal, había que cerrar el cuasi fiscal, y había que ajustar el Tesoro.
Yo recuerdo que, durante la campaña, yo hacía campaña con una motosierra, es más, hay un video mío, que es el video más popular en el planeta y que hoy por hoy lo usan muchísimos liberales de todo el mundo en campaña, que es el famoso "afuera". Ese famoso "afuera" surgió, estaba en el programa de Jony Viale explicando cómo iba a ser el ajuste. Y una de las cosas que me había propuesto Jony era que pusiera la estructura del Estado y, en vivo, yo fuera tachando cada uno de los ministerios que íbamos a eliminar. Y, dicho sea de paso, lo digo acá, estoy orgulloso de que, dentro de las cosas que eliminamos, eliminamos el siniestro ministerio de la Mujer y el siniestro INADI, que se utilizaban para perseguir ideológicamente.
De hecho, recuerdo que cuando dije que esas dependencias del Estado eran antros de persecución ideológica, recuerdo que me han dicho de todo. Con la cantidad de insultos hubiera podido llenar más volquetes que los asociados con las SIRA. Pero, al margen de eso, estos días fui reivindicado. Digo, porque una periodista militante dijo que el ‘yo te creo, hermana’ era una cuestión retórica y de acción política. Es decir, terminó de confesar que era una forma de perseguir a opositores, cargándole delitos aberrantes que después nos enteramos que son los delitos aberrantes que cometen ellos.
Entonces, lo primero que arrancamos es a achicar la cantidad de ministerios. Empezamos con el "afuera" y así llevamos la cantidad de ministerios a 9. Originalmente, teníamos la idea de reducirlos a 8, pero la dinámica requería cierta estructura, entonces, hubo que llevarlo a 9. Concretamente, el ministerio de Salud tenía que quedar adentro de Capital Humano, pero la dinámica que imponía el sector de la salud y la perversión del kirchnerismo nos obligaba a cambiar un poco originalmente la estrategia.
Y, en ese sentido, otra cosa que hicimos es déficit cero. Recuerdo algún econochanta pasado de tintura negra que decía que un ajuste de más de un punto del PBI por año era imposible, era heroico, que obviamente querer hacer un ajuste de cinco puntos del PBI, era imposible. O sea, básicamente me trataban de mentiroso, es decir, que no iba a existir tal cosa como la motosierra. De hecho, cuando fuimos a hacer el acuerdo con el Fondo monetario Internacional que todos los econochantas, sumado al que mencioné, todos decían que el programa era inconsistente. Esto es muy divertido porque si hay algo que maneja el Fondo Monetario Internacional de manera correcta, precisa, es chequear las consistencias de los programas. En ese sentido, el acuerdo que ya venía caído con el gobierno anterior, el equipo, del que va los libros de texto, van a recordar con el mejor ministro de Economía de la historia a Toto Caputo y al presidente del Banco Central, Santiago Bausili. Una tarea que hubiera demandado cerca de tres meses, lo lograron en un fin de semana.
Con lo cual, cuando decían que no teníamos plan, parece que sí teníamos plan y si no hubiéramos tenido plan, hubiéramos volado por los aires. Porque si nos hubiéramos puesto a recitar: plan integral, plan integral, digamos y no hacer nada, o hacer más de lo mismo con mucha tibieza. Algo así como el helado caliente, digamos, el esqueleto obeso, no, hubiéramos volado por los aires. Entonces, en ese, en ese contexto recuerdo que el Fondo lo que nos pedía era ‘bueno, por lo menos cumplan las metas que los orcos no cumplieron’, con lo cual dado el desvío que habían dejado era ya un desafío y lo que le sorprendía al Fondo Monetario Internacional es que nosotros nos habíamos planteado metas más ambiciosas y, de hecho, nuestra meta era el déficit cero. Imagínese con todos los econochantas de acá diciendo que lo único que se podía ajustar era un punto del PBI, era como que parecía, valoraban nuestro ímpetu, nuestra fuerza, nuestra voluntad, pero les parece con que alcanzáramos el número del Fondo estaban contentos. Nosotros nos pusimos de todas maneras la meta de déficit cero, la cual queríamos alcanzar en el año 2024 o sea, en este año. Lo interesante es que a ese gigante que tengo como ministro de Economía y de quién estoy tan orgulloso, se compenetró tanto él, su equipo, con el logro, el déficit cero. No hubo que esperar a alcanzarlo en diciembre de este año, lo logramos en el primer mes de gestión en el mes de enero.
Es más, les cuento una anécdota: un día estábamos en una reunión de gabinete y, entonces Toto se tenía que ir a otra reunión y se va. Cuando se va, me quedo con el resto de los ministros y les digo: "Miren, el esfuerzo que está haciendo ese hombre; es descomunal. Le pido a cada uno de los ministros que además bajen el 10% el gasto en cada uno de sus ministerios”. Es sorprendente, porque a la semana, todos los ministerios me habían traído propuestas para bajar el déficit. Fue tanto lo que nos comprometimos con eso que, en la etapa de arranque, el ajuste no terminó siendo de cinco puntos del PBI, sino que terminó siendo por el equivalente a 7 puntos del PBI. Obviamente, hubo una sobre reacción; teníamos que poner las cuentas en orden. Y hoy hemos empezado a recomponer esas partidas, hoy el resultado del déficit cero es una realidad.
Primero nos cuestionaron que era transitorio; se encontraron con un superávit financiero en enero, en febrero, marzo. Después dijeron que no pagábamos cosas, y cuando empezamos a pagar las cosas, también lo hubo en abril, también lo hubo en junio, en mayo y en junio. Y aviso que, si bien el número de julio da negativo, por la gran carga de intereses, porque, así como tienen la estacionalidad del pago del medio aguinaldo en el mes junio y el mes de diciembre, que, de hecho, contra todo pronóstico, tuvimos superávit fiscal financiero en junio. Cuando ustedes toman el acumulado, nos sobra dinero. De hecho, es tanto el dinero que nos sobra que dentro de la cuenta del Banco Central tenemos 17 billones de pesos acumulados. Por lo tanto, el programa de déficit cero sigue y de acá a fin de año, además, vamos a terminar absorbiendo 9 billones de pesos adicionales. Por lo tanto, el resultado fiscal está garantizado y no solo eso, sino que ya hemos garantizado el rollover de la deuda para parte del año que viene.
Y no solo eso, sino que además teníamos el problema de los pasivos remunerados, el déficit cuasi fiscal de diez puntos del PBI. Eso es interesante porque nadie hablaba en campaña del déficit cuasi fiscal; claro, era un problema técnico muy importante pero que estaba lejano al público. Entonces, nadie hablaba de eso. Así que me sentía más solo que Adán en el Día de la Madre levantando ese tema. Pero el orden de magnitudes era estremecedor. Si sabíamos que el problema fiscal era grande y eran cinco puntos del PBI, imagínense el problema del Banco Central: siendo diez puntos del PBI, era el doble. Es decir, dos tercios del problema estaban en el Banco Central.
Y mientras nadie tenía ninguna solución y creían que esto se arreglaba solo, una cosa increíble, se arreglaba solo. O los que proponían cosas nos proponían subir la tasa de interés. Algo que, si efectivamente lo hubiéramos hecho, hubiéramos probado con el mecanismo de estabilización tradicional, en lugar de tener una relación de cuatro bases monetarias remuneradas contra una, hoy tendríamos cerca de 10 bases monetarias contra una, y hoy estaríamos discutiendo el rollover de esa deuda y el carry trade, cuándo estallaba la hiper. Sin embargo, en una tarea titánica, ciclópea, por parte de Santiago Bausili, logró lo que nadie se hubiera imaginado, porque ni siquiera la parte del debate público, logró eliminar el déficit cuasi fiscal. Es decir, logró hacer un ajuste de 10 puntos del PBI en 6 meses.
Argentina hizo un ajuste fiscal en 6 meses de 15 puntos del PBI, algo que no se ha visto nunca en la historia de la humanidad, y nosotros lo hemos hecho. Y de esa manera hemos logrado parar la hiperinflación. Porque la hiperinflación, cuando veníamos en diciembre, en mayorista, veníamos viajando al 17.000%. El último dato de mayoristas, que fue del mes pasado, fue 2,7%. Es decir, que ustedes anualizan el 2,7%, y pasamos de 17.000 entonces a 35%. Pero como nosotros además tenemos una pauta de devaluación del 2% mensual, la inflación viene viajando a menos del 0,7. Eso quiere decir que, anualizado, hoy la inflación estaría viajando de manera pura a eso del 8% anual.
Debe ser por eso que en el mundo hablan del milagro económico en Argentina y la miserabilidad de los econochantas y de los políticos no les permite reconocer la gesta heroica.
Si bien el discurso lo tengo armado en términos de todo lo que hemos logrado, ahora les voy a contar cuáles son las próximas facetas de lo que es el programa de gobierno y cómo esto se va a traducir en crecimiento económico. No quiero dejar de mencionar la tarea enorme que también se llevaron en otras áreas.
En este sentido, cuando nosotros ganamos las elecciones, yo siempre digo que es como que tengo un nuevo trabajo, sí, con un poquito de responsabilidad más grande que lo normal, pero mi job description dice, que termine con la inflación, que haga más libre a la economía, básicamente que termine con la inseguridad y que la economía vuelva a crecer, eso dice mi job description. Dicho sea de paso, el tema fiscal no es un tema menor, no, porque los últimos 123 años Argentina tuvo déficit durante 113. O sea, que solamente tuvo resultado financiero positivo en 10, pero en esos 10, son casos donde Argentina estuvo en default, con lo cual, no pagaba los intereses, con lo cual, nunca tuvo resultados financiero positivo como es el que tenemos nosotros. Con lo cual, es algo nuevo la historia Argentina un gobierno que tenga superávit financiero.
Pero volviendo al job description, una de las cosas que me pidieron es que terminemos con la inseguridad y ahí quiero destacar el enorme trabajo de esa monumental Ministro que tengo en el plano de seguridad, que es la doctora Patricia Bullrich, quién ha sido muy generosa y que la historia también le va a dar su reconocimiento, no solo por el apoyo que junto al presidente Macri nos dieron para la segunda vuelta y que mientras que todo el círculo rojo analógico, en especial los perisobres, anticipaban que ganaba Massa, ganamos 56 a 44, le ganamos por 12.
O sea, no solo tuvo ese gesto, sino que además junto al doctor Petri decidieron básicamente sumarse al gobierno. El doctor Petri está haciendo una tarea verdaderamente superlativa, reequipando a las Fuerzas Armadas, como nunca se había hecho en los últimos 50 años y la doctora Bullrich, cuando yo hablé con ella, ella me señaló que le interesaba otra área porque ya había estado en Seguridad y yo le pedí que los problemas eran demasiado grandes y que necesitaba que vuelva a cubrir la cartera de Seguridad y vaya que está haciendo un trabajo brillante; no solo tuvo la grandeza de aceptar el cargo, sino que está exterminando la inseguridad y se terminaron los piquetes, los malditos piquetes que nos arruinaban cada día.
Por otra parte, básicamente los abanderados que claman tanto por los descamisados, por los humildes, por los vulnerables, que sería la palabra más correcta para utilizar, aman tanto a los pobres que lo único que hicieron fue multiplicarlos; nosotros desde el ministerio de Capital Humano nos ocupamos verdaderamente de dar contención. Una de las cosas que sucede es en el último trimestre del año pasado, kirchnerismo. Digo, el PBI ya había caído dos cinco, básicamente en el primer trimestre cayó 2,6 si toman año contra año fue 5,1. Pero piensen que solamente se había hecho algo ligeramente parecido, no de estas magnitudes durante el segundo trimestre del 2002 y ahí el PBI había caído 16%. Es decir, que algo habremos hecho bien para que la caída sea un tercio de esa brutal caída, pero esa se hizo con el peronismo en el poder, entonces no había problema y los saqueos de supermercado que había en diciembre cuando se llevaron puesto De la Rúa, a Duhalde no le pasó más.
Dicho esto, si efectivamente la política social fuera mala, hubiéramos tenido un estallido y eso no ocurrió. Porque básicamente, una de las cosas que tanto se quejaron todos, era de los gerentes de la pobreza y ahí también dimos una batalla muy fuerte con la ministro Pettovello al frente, y queríamos terminar con el curro de los gerentes de la pobreza. Y esto no es menor, porque el punto era, nosotros sabíamos que el primer trimestre iba a ser muy duro y teníamos que generar el mecanismo de contención social, por lo tanto, lo que pasara dentro del ministerio de Capital Humano era importante, y una de las primeras cosas que con gran criterio resolvió la ministro Pettovello- que además fue muy criticada por hacer esto- fue automáticamente eliminar lo que se llamaba la contraprestación del plan.
Obviamente, toda la progresía bienpensante boluprogre salió a darle con todo, porque como van a dar la prestación a cambio de nada y la realidad es que en esa contraprestación era donde se escondía la corrupción. Porque básicamente las personas cobraban el plan, es cierto, lo cobraban de una tarjeta, pero después tenían que ir y dejar constancia de que habían dado la contraprestación y ahí era donde le sacaban la mitad de lo que recibían. Concretamente les daban dos planes, uno lo cobraban y el otro se lo daban a los delincuentes gerentes de la pobreza.
De hecho, fue tan fuerte cuando se hizo este impacto y es que rápidamente Belliboni salió amenazarnos con una marcha, decía que iba a convocar 50,000 personas, porque básicamente esperaban que fueran 100,000, pero lo interesante de haber sacado los intermediarios era que la gente ahora nosotros pagábamos la misma plata, pero a los más vulnerables le llegaba el doble de dinero. Además, pusimos una línea de denuncias, recuerdo que cuando pasó esto hubo cerca de 18,000 denuncias, donde básicamente además, el que cortaba no cobraba y en ese contexto, también con el trabajo del ministro de Infraestructura de aquel momento, el doctor Ferraro, en combinación con el ministerio de Seguridad de la doctora Bullrich, se encaró un operativo, ya sea para informar a la gente en los medios de transporte los diseños de política de la ministro Pettovello y el armado de seguridad de la ministra Bullrich.
Ese día que ellos, en rigor esperaban llevar 100,000 personas, terminaron llevando 3000 personas. Había seis veces más efectivos policiales que personas en la marcha, y a partir de ese día empezamos a ganar la lucha contra la inseguridad; y cuando tuvimos que hacernos cargo de problemas que no eran nuestros, como el de Rosario, el operativo diseñado por la doctora Bullrich hizo que la cantidad de homicidios caiga un 70%, es decir también lo estamos haciendo en materia de seguridad y en materia de contención social.
Pero otra cosa a la que me comprometí, y es mi objetivo, es que Argentina sea el país más libre del mundo. Y con eso empezamos una agenda de desregulación, y ahí enviamos un DNU y enviamos la Ley Bases. Argentina la reforma estructural más grande de toda su historia fue la que se hizo durante el primer gobierno de Carlos Menem; fue la reforma estructural más grande de la historia argentina. Nosotros, si contemplamos el DNU y la Ley Bases, que hemos logrado sancionar a pesar de tener 15% de la Cámara de Diputados y 10% de la Cámara de Senadores, la combinación de esas dos reformas es ocho veces más grande que la reforma que hizo Menem. Acabamos de hacer la reforma más grande de la historia argentina.
Por lo tanto, eso también deja las bases establecidas para que Argentina pueda crecer a largo plazo. Eso implica un salto en los indicadores de libertad económica de 90 puestos, es
decir, empezamos a parecernos a algunos países europeos. Pero les tengo una noticia: a mí con eso no me alcanza. No me alcanza parecerme a Alemania, no me alcanza parecerme a Francia, no me alcanza parecerme a Italia. Yo quiero que Argentina sea el país más libre del mundo y tenemos pendiente 3.200 reformas estructurales.
Esto es, si lo que hicimos les parece grande, vienen cuatro veces más. O sea, va a haber en serio libertad acá. Y eso también debo agradecer profundamente a otro de los ministros que tengo el orgullo y el honor de contar en las filas, que es ese coloso que se llama Federico Sturzenegger. Aviso que soy cholulo de todos mis ministros. De hecho, miren qué maravilloso lo que hizo días atrás el ministro Cúneo Libarona con el juicio por jurados; o el ministro Mario Russo, que tanto lo critican por el dengue, que tiene que ver con decisiones de un año atrás. Te cuento que el doctor Mario Russo ya acaba de cerrar toda la vacunación del dengue para el año que viene. Me parece que hay que pensar mucho para decir que no hay gestión en este gobierno. El que lo entendió, lo entendió. No es un palo a quien yo le tengo mucha estima, aviso. Por eso dije: hay que pensar mucho.
Vamos a hablar de lo que se viene. Básicamente, los dos pilares, de acá hacia adelante, son dos. Perdón, es que estuve nombrando el soviético y se me pegó. Me pueden acusar de redundante, no de bruto.
Al margen de eso, el primer gran elemento es el déficit cero. Nosotros, para este presupuesto, estamos escribiendo de una manera distinta la presentación del presupuesto para asegurar el cumplimiento del déficit cero. Básicamente, ¿cómo se hacían los presupuestos hasta ahora? Se determinaban los gastos, había una erogación cierta; se presentaba una hipótesis de ingreso en función del crecimiento estimado y de la inflación estimada. Eso lo que generaba era un resultado fiscal, le tomaban los intereses y a partir de eso sacaban el resultado financiero. Y dado el resultado financiero, determinaban el financiamiento y armaban el financiamiento.
Bueno, eso dejó de ser la forma en la cual se diseña el presupuesto en Argentina. El gobierno va a presentar un presupuesto que parte de la hipótesis del déficit cero; es decir, el déficit cero es la regla, no va a haber más déficit fiscal financiero. Eso quiere decir que no vamos a tomar nunca más deuda para financiar al fisco, lo que van a encontrar es el rollover de la deuda, cosas naturales, pero no va a haber más toma de deuda para financiar el déficit financiero. Eso implica que, para que el déficit sea cero, el resultado primario, o sea, el operativo, tiene que ser igual a los intereses. Una vez que aseguramos que el resultado primario sea igual a los intereses, los cuales vienen determinados por la deuda anterior y lo que se paga de tasa, se determinan los ingresos. Va a haber una hipótesis de ingresos, inexorablemente tiene que haber una hipótesis de ingresos; esa hipótesis de ingresos obviamente que tiene que ver con una hipótesis de crecimiento del PBI y una hipótesis de inflación. Pero, como nosotros estamos convencidos de que la tasa de inflación va a seguir bajando, no queremos armar un presupuesto que quede descalzado porque en la tasa de inflación somos exitosos y la bajamos más rápido de lo que pensamos.
En ese sentido, una de las cosas que hacemos: determinamos los ingresos, hay un conjunto de partidas de gasto público que se mueven automáticamente, vinculadas a esas partidas de inflación y crecimiento. Y el remanente, bajo ese escenario base, es determinado para el resto de las partidas. Por lo tanto, el gasto público se va acomodando a los niveles de ingresos que tenemos.
Y, por ende, aseguramos el resultado primario igual a los intereses y eso asegura el déficit cero. En caso de que los números vengan para abajo, la partida residual, dados los ponderadores iniciales, es cómo se van a ajustar, de modo tal que siempre se mantenga el resultado primario igual a los intereses y el déficit cero. Y en caso que los ingresos vengan para arriba, prepárense, porque empezamos con la baja de impuestos.
Es más, de hecho, ya empezamos con la baja de impuestos. En septiembre va a empezar a regir la baja del impuesto PAIS del 17,5 al 7,5 y en el mes de diciembre se elimina el impuesto PAIS.
No solo eso, sino que, además, aquellos que hayan escuchado mi discurso en la Rural, habrán visto toda la batería de medidas que utilizamos para el sector agropecuario, que ya están en marcha. Dijimos que íbamos a bajar impuestos y lo estamos haciendo. Pero no solo eso, estamos bajando el impuesto más perverso de todos, que es el impuesto inflacionario. El verdadero peso que tiene que enfrentar una economía es el tamaño del gasto público. Cuando tomo el caso del Estado nacional y el Banco Central, le hemos devuelto a los argentinos de bien 15 puntos del PBI. Vaya que eso sí es una baja de impuestos.
De hecho, siendo que ustedes están en el sector de real estate, al margen que no me pueden negar que ha sido un verdadero éxito eliminar la ley de alquileres. Sino que, mientras en diciembre discutíamos si íbamos o no a una hiperinflación, hoy han vuelto los créditos hipotecarios a 30 años. Vaya que sí hemos dado un cambio radical en eso.
Al mismo tiempo, en paralelo, está ya en marcha implementando una política de emisión monetaria cero. Básicamente, cuando nosotros llegamos, teníamos cuatro grifos de emisión monetaria abiertos, pero de una manera inundante. No me van a decir que no uso bien las metáforas. Debe haber algo que me ha hecho un poeta.
Pero al margen de esto, nosotros nos encontrábamos con una fuente, con un grifo, que era del déficit fiscal. Uno que era el de los pasivos remunerados, otro era el de los puts y otro era el sector externo y eso era lo que generaba la emisión monetaria en Argentina. El primer paso fue el déficit cero y, por lo tanto, desde el inicio de la gestión cortamos de cuajo el financiamiento al fisco, pero eso no alcanzaba, porque teníamos el problema del déficit cuasifiscal y ahí en una enorme tarea entre el presidente del Banco Central, Santiago Bausili y otro coloso en nuestro secretario de Finanzas, el doctor Pablo Quirno, que empezó a reconstruir la curva de pesos. Nos permitió que para el mes de junio- julio lográramos terminar con la carga y el tormento que fue el tema de los pasivos remunerados y el déficit cuasifiscal. Es decir, este ajuste de 10 puntos del PBI. Otro que también va a tener que ser recordado por la historia, porque lo que ha hecho el doctor Pablo Quirno verdaderamente es monumental.
A su vez, no alcanzaba con eso, recuerdo que me tocó ir a exponer a la Bolsa de Comercio y anunciamos la fase monetaria que tiene que ver con el exceso de oferta cero. Esto es, solamente se iba a emitir dinero por sector externo, asumiendo que la emisión por sector externo es demanda de dinero y que entonces, si uno fija el tipo de cambio o tiene un mecanismo como el que tenemos nosotros, que es como fijar el tipo de cambio… que es el crawling peg, básicamente lo que ustedes tienen es que cuando dan unas características de esas, la gente va y compra los pesos, porque básicamente los necesita para hacer transacciones, entonces, ese dinero está siendo demandado y, por ende, oferta y demanda se mapean y consecuentemente no tiene presión en precios.
Cuando nosotros estábamos anunciando eso en la Bolsa de Comercio, que teníamos encaminada la negociación con los puts, nosotros hacemos el anuncio y el día lunes, cuando el doctor Caputo y el doctor Bausili estaban en reunión con los bancos, a las 10 de la mañana, tratando de cerrar el problema de los puts, vino la puñalada artera del Banco Macro, ejecutando el equivalente a 2000 millones de dólares en un día, tratando de generar un proceso de zozobra económico que tira por las nubes al programa económico y al propio Gobierno, y es la primera vez en la historia que un gobierno argentino logra enfrentar una corrida diaria por el equivalente de 2000 millones de dólares. Y eso se hizo en este Gobierno, y no nos pudieron voltear.
Todavía recuerdo lo que hubo que hamacarse durante ese día lunes con el equipo económico, con el Banco Central, para neutralizar semejante puñalada. Pero claro, la posición del Gobierno financieramente es tan sólida, esto que yo les contaba, que tenemos 17 billones de pesos del Tesoro depositado en el Banco Central, nos permitió quitar esos dos billones de pesos que hubo que pagarle al Banco Macro.
Y como fallaron eso, a la semana siguiente estaban hablando de que iban a buscar un tipo de cambio entre 1800 y 1000 y… perdón, en $2000. Frente a esa situación, recuerdo que con el doctor Caputo estábamos en Estados Unidos, estábamos en Idaho, previo a que a mí me tuviera me tocara exponer en Sun Valley, y entonces decidimos lanzar la etapa más dura y agresiva del programa monetario que era emisión cero. Y básicamente cuento esto para acomodar las burradas que dicen los economistas, que hablan de intervención y todas esas cosas, cuando ustedes tienen un equilibrio de no intervención, el tipo de cambio es libre, la variación de reserva es nula y la variación de la cantidad de dinero es nula.
En ese contexto, donde ustedes generan esa situación, obviamente no va a haber inflación, o sea, se calibra, pero es con un mercado libre. Ahora, cuál es el punto, es que por una cuestión de que todavía tenemos desequilibrios de stocks nosotros tenemos cepo y en ese contexto, donde todavía tenemos cepo, el problema radica en que los dólares que se depositan en el… que se llevan al mulc, no es que están comprando pesos, no es que quieren comprar pesos, sino que están obligados a vender dólares. Por lo tanto, eso no es demanda de dinero y, por lo tanto, se genera un exceso de oferta de dinero que sigue alimentando que la tasa de inflación tarde en bajar.
Por eso, mientras que no arreglemos el problema de stocks, que ya es muchísimo más chico que el que teníamos de inicio, lo que decidimos hacer es que esos pesos que tirábamos a la calle, por las compras del mulc, los retirábamos entregando parte de los dólares y como había brecha, de cada 3 dólares que comprábamos en el mulc quedaba uno en el Banco Central. En ese sentido, vean que la intervención previa era de 3 dólares, supongamos el caso de 3 dólares y ahora quedaba una intervención de solo un dólar, sí, pero la variación de la cantidad de dinero que daba nula que era lo que nosotros buscábamos; es decir, que en este equilibrio hay menos intervención y hay menos emisión monetaria. Es decir, y esto es lo que va a hacer, es acelerar aún más la caída de la tasa de inflación, ustedes lo que van a ver, es que este programa tiene algo que es inédito porque es un programa que para estabilizar no generó la hiperinflación antes, que licuara todos los activos financieros, a diferencia de lo que dice un imbécil que dijo que hubo un plan Bonex, no lo hubo. Lo que pasa que, claro, lo pronosticaban durante la campaña, entonces tenían que decir algún tipo de barbaridad. Y hay uno que directamente ya la imbecilidad la dijo, que casualmente está relacionado con otro que metió otro puñal por la espalda, obviamente, cobarde.
Y no solo eso, sino que, además, entonces, no estuvo la hiperinflación, no hubo la expropiación, no se fijó el tipo de cambio, porque hay un crawling peg, en ese sentido el 2% mensual y, además, todo esto se hace en un contexto de recomposición de precios relativos. Porque cuando ustedes miran la película de los precios relativos, las distorsiones son mucho menores, por lo tanto, ya es un programa económico inédito en la historia argentina y ahora, aquellos que querían el dólar entre 1800 y 2000 lloran y caminan como mandriles, porque el tipo de cambio hoy llegó a $1250.
Naturalmente esto ahora nos lleva, y la pregunta que sigue… bueno, ahora va a haber una pequeña parte en la cual voy a hablar en latín, como diría el profe De Pablo. Es decir, me voy a rajar una tremenda puteada, quiere decir eso, que tiene que ver con los imbéciles que dicen: ‘Ah bueno, pero ahora se acumula menos reservas y como se acumulan menos reservas, el gobierno no va a poder pagar’. Aun cuando tenemos asegurado los pagos todo de enero, que es cuando son los grandes vencimientos, los grandes vencimientos de deudas son en enero y julio, es cuando se pagan los intereses y se paga deuda. Entonces, es increíble, porque lo que me están diciendo es que los dólares los tengo que comprar con emisión monetaria, es decir, esa manga hijos de remil puta, les aviso que les puse rótulo, pero todavía no lo justifiqué, la justificación viene ahora: lo que me están diciendo es que yo le rompa el culo al pueblo argentino con impuesto inflacionario para pagar la deuda, por eso son unos tremendos hijos de remil puta.
Si ese argumento fuera cierto, entonces todos los países que tienen tipo de cambio flexible estarían en default. Pero no solo eso, los dólares para pagar la deuda los tiene que comprar el Tesoro en el MULC con superávit fiscal. Esa es la forma honesta de hacerlo. Porque si ustedes lo compran con emisión monetaria sin el esfuerzo fiscal, ¿qué es lo que va a pasar? Lo que están diciendo es que después va a ir el fisco y va a estafar al Banco Central, se va a llevar los dólares y ustedes se quedarán con los papelitos de colores y los volvieron a cagar. Y eso, nosotros no lo vamos a hacer.
Por lo tanto, ahora la nueva pregunta es: ¿cuándo salen del cepo? Es decir, son tan imbéciles que no entienden que están frente a un gobierno liberal. Eso de estar determinando las fechas es bien de colectivista autoritario dirigista. Es decir, si yo estoy tomando todo un esquema de política económica en el cual le devuelvo la libertad a los agentes, dependo de cumplir metas en función de que los agentes las quieran lograr.
Y eso, el cepo, ¿cuándo vamos a salir del cepo? Mire, esto es interesante, “no, porque necesitan tantos dólares”; es mentira todo eso. Yo les voy a decir cómo es. En el momento que la demanda de dinero, como consecuencia del crecimiento económico —les recuerdo que los econochantas decían que nos íbamos a una depresión o que era una “L” o que no sé qué cosa—, la economía tocó piso entre abril y mayo, y hoy está en fuerte recuperación. Pero al margen de eso, eso lo que hace es que se recomponga la demanda de dinero. Esa recomposición de la demanda de dinero hace que la demanda de base monetaria suba. Y en la medida que los bancos ven que están teniendo demanda de crédito, ¿qué es lo que van a hacer? Van a salir de la posición de LEFI y ¿van a empezar a qué? A pedir dinero. Y ahí, la base monetaria en el formato tradicional se va a parecer a la base monetaria amplia. El momento en el cual ustedes están viendo eso, la contrapartida es que, además, la tasa de inflación está bajando. Y cuando esos dos conceptos de base monetaria se unifican y es uno solo, quiere decir que terminamos de limpiar el money overhand, se terminó el exceso de oferta de dinero y puedo abrir el cepo. ¿Por qué? Porque básicamente no sobra más dinero dentro de la economía. Y al no sobrar más dinero en la economía, es como si les dé un arma sin balas: toquen el gatillo todo lo que quieran, no tienen balas, no van a poder hacer nada.
Por lo tanto, el día en el cual la base monetaria en el formato tradicional mapea con la base monetaria amplia, lo que van a tener como contrapartida es que, habiendo eliminado el exceso de oferta de dinero, la inflación es prácticamente nula. Motivo por el cual no quiero dejar fijo el presupuesto en términos de gasto, porque mi apuesta es bajar más agresivamente la inflación. En ese contexto, se puede abrir el cepo. Ahora, si ustedes se fijan, toda esa conversión es un mercado, es imposible saberlo. Por lo tanto, no puedo decir “sí, va a ser el día tal”. Pero sí puedo decir con toda seguridad que el día que esto ocurra, como hito, el cepo no tiene sentido de ser. Por lo tanto, digamos estamos trabajando también en lo que es la salida del cepo.
Pero la campaña, miren, la campaña tenía tres cosas. Nadie puede decir que los engañé: estaba la motosierra, acabo de describir la motosierra; dije que iba a perseguir a los corruptos, persigo a los corruptos; dije que iba a bajar la inseguridad, y la estamos destruyendo. Pero otra cosa con la que yo hacía campaña llevaba un dólar, claro, hicieron un dólar con mi cara y yo lo llevaba orgulloso, que tenía que ver con esta idea de eliminar el Banco Central. Es decir, la idea de la competencia de monedas, que a la postre termina con la eliminación del Banco Central.
Entonces, eso también genera una suerte de temor. De vuelta, a ver, si no están formados en economía, ¿qué van a hacer? Le van a preguntar a un economista; lo que no saben, lo que ustedes no tienen incorporado, es que los economistas argentinos sean tan burros. No solo los de Argentina, aviso, hay otros que también son burros y tienen peso en las decisiones, y también hacen bastantes problemas. Por suerte, lo apartaron.
Pero, al margen de eso, es interesante esto porque ¿qué pasa ahora si nosotros llegamos a la situación donde el dinero que hay es el dinero que verdaderamente ya limpió el sobrante monetario? Por lo tanto, ahora no sobra dinero. Y, ¿qué pasa si ahora la economía sigue creciendo? Ahí aparece un problema, porque el problema es que la gente va a demandar más dinero y sucede que la cantidad de dinero está fija. ¿Y cuál es la consecuencia de eso? La consecuencia de eso es que la economía, con el crecimiento económico, tendría que entrar en deflación. El problema radica en que si la economía no es lo suficientemente flexible en ese momento, como los activos financieros viajan más rápido que los activos reales, nos puede terminar ralentizando el crecimiento o, directamente, hundiendo la economía en una depresión o en una recesión.
Entonces, ¿cómo hacemos para monetizar la economía si la cantidad de dinero está fija? Competencia de monedas, que empiezan a competir las demás monedas. ¿Qué es lo que vamos a hacer? Vamos a dejar que los argentinos, como además el cepo no va a existir más, los argentinos puedan hacer sus transacciones en otra moneda. Entonces, ¿qué pasa? Esos dólares, por ejemplo, que ingresen al sistema en lugar de estar emitiendo dinero para comprarlos, van a poder ser usados directamente para hacer transacciones.
En la medida en que la economía crezca, los propios argentinos que demanden dinero van a estar monetizando la economía, trayendo más dólares a la economía. Y una de las cosas que pasa es que, si en dinámica la cantidad de pesos está fija y la cantidad de dólares empieza a crecer—digo dólares para simplificar el coso, porque si no competencia de monedas, competencia y todo el tiempo, es como si fuera un polinomio que lo tengo que estar extrapolando todo el tiempo—, entonces, ¿qué va a pasar? En un momento, ustedes tienen la cantidad de pesos fijo y los dólares que empiezan a crecer y la verdad que en algún momento van a ser tantos los dólares que haya en la economía que quizás ese día podamos cerrar el Banco Central. Y ese día, si yo sigo estando en el gobierno, no tengan duda de que lo voy a cerrar.
Finalmente, ahora dejé lo mejor, que es el tema de crecimiento económico. Entonces, qué es lo que va a generar crecimiento económico en esta economía, si yo lo pusiera en la terminología que usan los hijos bastardos de Adam Smith, o sea, los que no saben de crecimiento y solamente miran la evolución del PBI, yo podría decir que el PBI va a expandirse, podría decir que el PBI crece, yo le voy a decir expandir, pero lo van a manifestar como un aumento del PBI. Ese aumento del PBI, por ejemplo, una de las cosas que ustedes tienen es que hace ya más de tres meses que los salarios le vienen ganando a la inflación. Es decir, está subiendo el salario real en la Argentina. No solo eso, que el salario real en Argentina está subiendo, sino que además también están subiendo las jubilaciones, hoy las jubilaciones están mejor que en diciembre del año pasado, es decir, hay recomposición de salarios y recomposición de jubilaciones; en el fondo, estamos teniendo una recomposición de la masa salarial que se va a transformar en demanda y que, dada la capacidad instalada ociosa, eso nos permite expandir el nivel de actividad sin presiones en el nivel de precio. Por lo cual, uno de los factores de expansión y de rebote lo van a estar viendo ahí.
El otro tiene que ver con el ciclo de stocks, la verdad que los argentinos el año pasado ya veíamos venir la piña y una forma que ustedes tienen para cuidarse de la inflación es acumulando stocks. Entonces, qué es lo que se hizo, se generaron muchos stocks, de hecho, se generó una situación artificial de nivel de actividad, que, si no hubiera sido todavía mucho peor sobre el final del régimen K y en ese contexto, una de las cosas que pasó es que se acumularon muchos stocks para protegerse de la inflación y esos stocks, ustedes no lo pueden tener infinitamente; entonces, lo empezaron a liquidar en la primera parte de este año, con lo cual, eso exacerbó la caída en el nivel de actividad. Pero claro, tampoco pueden vivir con stock cero y la propia recomposición del ciclo de stocks, también va a generar expansión, es decir, que, de corto plazo, coyunturalmente, el PBI va a rebotar por dos factores: por la recomposición de salarios y jubilaciones, y por la recomposición de stocks.
Pero eso no es suficiente, eso no es crecimiento económico genuino, eso es rebote. Entonces, la pregunta es: cómo se crece, y también ahí los economistas erran de nuevo, lo cual no me llama la atención que en términos de crecimiento le erren, porque la gran mayoría son keynesianos, por ende, son brutos, por ende, no saben de inter temporalidad. Y en realidad lo que hace crecer a una economía es la inversión, pero la inversión ustedes la tienen que financiar y se financia con ahorro. Bueno, el hecho de que se haya corrido el Estado del medio y que hayamos achicado el déficit fiscal en 15 puntos del PBI, son 15 puntos de ahorro que vuelven al sector privado para que invierta, para que acumule capital, para que sea más productivo, que la producción argentina suba y que los salarios reales también lo hagan, y así caigan los pobres y los indigentes. Esa es una fuente de crecimiento.
Por otra parte, nuestro compromiso férreo, con una política de emisión cero, lo que va a hacer es que dejemos de padecer la inflación y que la inflación deje de distorsionar precios relativos, y, por lo tanto, eso permita guiar de mejor manera y de manera más eficiente la inversión dentro del sector privado y, por ende, eso también va a generar un salto en el crecimiento económico. Pero también, muy importante es el tema fiscal, porque cuando nosotros decimos déficit cero, significa que la deuda no sube. Y si la deuda no sube, la relación deuda- producto, conforme aun cuando el PBI quedará constante, es no creciente y si es no creciente el país es solvente intertemporalmente, quiere decir, que puede pagar su deuda. Y si su deuda cae o su relación deuda-producto cae o no crece, cae el riesgo país. Les recuerdo que cuando nosotros asumimos estaba en 2900 puntos básicos. Les doy la noticia de que hoy rompió la línea de los 1500, a pesar de los degenerados fiscales.
Naturalmente, conforme continuemos con esto, el riesgo país va a seguir cayendo. Que caiga el riesgo país significa que la tasa de interés va a caer, significa que, además, la acumulación de capital va a continuar. Y obviamente que cuando esto se dé va a aumentar el PBI, va a aumentar el empleo, van a aumentar los salarios reales y obviamente también esto va a hacer que caiga la cantidad de pobres e indigentes, haciendo que Argentina siga creciendo y lo haga de manera importante. Otra cosa que también me olvidé en el medio es que la eliminación del cepo le quita un peso y un freno a la actividad económica, y al liberar eso, ese exceso de oferta artificial como contraparte del exceso de demanda en el mercado de divisas, también genera un efecto rebote.
Y, finalmente, digamos, esta es la última de las reflexiones respecto a lo que genera crecimiento. Nosotros, tal como les dije antes, hemos emprendido la reforma estructural más grande de la historia de Argentina. De hecho, es la reforma estructural más grande de la historia argentina; es 8 veces más grande que la que hizo Menem. Pero para nosotros no es suficiente, no nos alcanza ir a niveles de libertad económica como les dije antes, como los de Alemania, Francia e Italia. Nosotros queremos ser el país más libre del mundo. Todos los días sacamos regulaciones; tenemos pendientes 3200 reformas estructurales y vamos a hacer de Argentina el país más libre del mundo. Porque aquellos países que son más libres, son 12 veces más ricos que los países reprimidos, tienen 25 veces menos de pobres en el formato estándar y 50 veces menos en el formato extremo. Por lo tanto, abrazar las ideas de la libertad va a hacer que Argentina sea el país más próspero de la Tierra.
En definitiva, les pido que entonces no nos acompañen como meros espectadores, que disfruten cómo va ocurriendo el milagro argentino, que nos va a hacer a Argentina grande nuevamente. Les pido que se involucren y que ustedes sean actores verdaderamente protagónicos en este milagro que va a ser de Argentina una gran potencia mundial. Por eso pido que Dios proteja a los argentinos, que las fuerzas del cielo nos acompañen y ¡Viva la libertad, carajo! ¡Viva la libertad, carajo! ¡Viva la libertad, carajo!