Discurso del presidente de la Nación, Javier Milei, en Foro Llao Llao
Buenos días. Tantos aplausos me hacen dudar sobre el mentado error tipo 2. Bueno, la charla que voy a dar hoy es sobre la herencia, lo que hicimos y lo más importante: cómo la vemos de cara al futuro y cuáles son las posibilidades que hay en esta perspectiva. Lo primero que hay que entender es el desastre que recibimos, o sea más o menos para que tengan una idea. Cuando una economía tiene déficits gemelos por cuatro puntos del PBI, eso es una alerta amarilla; ocho es alerta roja y es se van a dar una piña de lo lindo. Bueno, nosotros recibimos de herencia 17 puntos del PBI de déficit gemelos. Así es que se darán una idea del tamaño de desafío que teníamos. Esos déficits gemelos tenían un déficit fiscal consolidado de 15 puntos del PBI, donde cinco correspondían al tesoro nacional y 10 al Banco Central, donde como si eso fuera poco la posición de las Leliqs, que podían ser en 30, 60, 90, 120, 150 y 180 días la habían pasado todas a pases a un día. Esto quiere decir que al momento en que asumimos se podría haber cuadruplicado la base monetaria en un día. Digo para tener órdenes de magnitudes de las dificultades con las que nos encontrábamos. Al mismo tiempo en materia de dinámica de precios, al existir un tipo de cambio controlado con una brecha tan grande, la contracara es que existe lo que técnicamente se llama money overhang o sobrante monetario. La magnitud del sobrante monetario en ese momento básicamente era similar a la que teníamos en la previa del rodrigazo de 1975, lo cual implicó en aquel momento cuando se se quedó el país sin reservas y tuvo que forzosamente devaluar, sextuplicar la tasa de inflación, de hecho, pasó de 30 a 180 por ciento. Habíamos tenido una experiencia similar en el año 59 también de similar magnitud y también había implicado una sextuplicación de la tasa de inflación: en aquel momento pasó de 20 a 120. Por lo tanto, si nosotros teníamos una inflación que básicamente venía viajando al 200%, eso implicaba que la tasa de inflación se fuera a niveles del 1200%; además si contemplamos que podíamos estar triplicando la base, digamos incrementando tres veces la base, eso implicaba llevar la inflación a 3600 por ciento anual. Y si por otra parte consideramos que el gobierno anterior emitió 13 puntos del PBI de manera directa e indirecta con una base que hoy está en 2.6, implicaba multiplicar por 5. Es decir, metíamos cuatro veces cuatro veces más de base monetaria; es decir, estaríamos hablando de una tasa de inflación en el orden del 15000 por ciento.
Esto que parece exagerado, haciendo las cuentas desde el lado monetario, la realidad es que durante la primera semana de diciembre los precios ya venían viajando al 1% diario; eso es anualizado 3700 por ciento anual. Cuando ustedes consideran cómo venía en las dos primeras semanas de diciembre la aceleración fue tan grande que ya venían los precios viajando al 7500 por ciento anual. Y esto que parece una exageración y que de hecho muchos nos acusan de haber sido exagerados, cuando ustedes toman el caso de la inflación mayorista en el mes de diciembre fue 54%. Eso en términos anualizados da 17.000. Es decir, efectivamente estábamos transitando el camino a una hiperinflación; o sea lo único que requería esa hiperinflación para concretarse era la convalidación monetaria.
Hay una anécdota muy divertida en un libro maravilloso que se llama El Banco Central teoría y práctica, de un economista que llama Alan Blinder, que fue uno de los primeros académicos de llegar al comité de política monetaria de la Reserva Federal, que daba clases también en Princeton junto a Bernanke, y cuenta algo que es muy interesante: supongamos que tenemos el banquero central perfecto, entonces el banquero central perfecto supongamos que hiciera control de tasa interés - digo no es el instrumento que a mí me gusta pero el libro está hecho con ese ejemplo - y entonces este banquero central está tan genial que no solo que sabe en cuánto mover la tasa, sino que además acierta la perfección en los rezagos. Entonces cuando él ve que se está por acelerar la tasa de inflación empieza a subir la tasa y entonces logra que la inflación permanezca en el target; cuando ve que la economía está desacelerando y la tasa de inflación se va por debajo, modifica y de vuelta deja la inflación en el target. Es interesante porque en el límite esto podría implicar que moviera la tasa de interés como si fuera un electrocardiograma de alguien que está bien o alguien que esté corriendo si fuera el caso y deja constante la tasa inflación. El tipo es perfecto. Ahora fíjense que cuando está subiendo la tasa de interés va a haber un montón que los van a estar criticando porque dicen ‘dónde estás viendo la inflación y nos vas a meter una recesión’; y cuando la baja, dicen ‘vos vas a estar alentando la inflación’. Es decir, el tipo hace un trabajo perfecto y qué le va a pasar: lo van a estar criticando todo el tiempo. Bienvenidos al mundo de la política.
Afortunadamente, mi trabajo estudiando la Torá junto a mi queridísimo rabino Axel Wahnish, que ahora tenemos la fortuna de tenerlo como embajador en Israel, una de las cosas que me contaba era que ya digamos habiendo salido de Egipto, cada vez que Moisés se levantaba tarde lo criticaban que estaba haraganeando; si se levantaba temprano decían que estaba peleado con la mujer y si se levantaba en el horario era porque no tenía nada que hacer. Es decir, no importa lo que hagan nos van a criticar igual. Eso es bastante tranquilizador al momento de iniciar la gestión, porque se lo criticaban a Moisés entonces a mí me pueden decir de todo y lo tengo más que bien merecido. Pero es bueno saber porque ahora hay un montón que dicen: ‘nunca hubo hiperinflación’. Ahora lo voy a describir, pero llevamos un ajuste de 13 puntos del PBI, el más grande la historia de la humanidad. Pero bueno, es la vida.
La otra parte era el desequilibrio cambiario: la relación entre el paralelo y el oficial era tres a uno. Por lo tanto, la situación estaba bastante complicada. Acá hay algo interesante, que me voy a adelantar a la parte de las críticas que nos hacen, ‘que hay que subir el tipo de cambio’, todo ese tipo de cosas. Yo me acuerdo que estábamos en el hotel Libertador, estaba con el equipo de Toto y el consenso de mercado era que teníamos que llevar el tipo de cambio a 600. De hecho, yo lo quería llevar a un nivel que ajustado por riesgo país quedara igual que el paralelo. Eso tiene una justificación técnica para tratar de eliminar el exceso de demanda. Y que el impacto en actividad sea lo menos posible. Me causa gracia porque esos mismos que se quejan de que ahora el tipo de cambio está atrasado, decían que tenía que ser 600 y la hipótesis de inflación que tenían es mucho más alta que la que estamos viviendo. No les cierra el modelo, muchachos. Lo que digo es: ojo con esos economistas, porque no les cierra el modelo. Me decían que el tipo de cambio tenía que ser 600, que estábamos locos en ponerlo en 800 y la hipótesis de inflación que tenían era más alta que la que estamos teniendo en la realidad. Digo no les cierra el modelo, yo solamente lo menciono.
Después teníamos un problemita menor que llamaba reservas internacionales netas, estábamos 11.500 millones de dólares abajo. Teníamos otro problemita también no blanqueado, que todos sabíamos que existía, que se llamaba el Sira, que en realidad eran 60 mil millones de dólares pero que cuando pedimos que se blanqueara y que se acercaran, evidentemente había una parte que sabía que estaba haciendo cosas no lícitas. Y se blanquearon 45.000 millones. Otro problema más que teníamos es que teníamos vencimientos en moneda extranjera por 25,000 millones de dólares, concentrado principalmente en multilaterales y teníamos el acuerdo con el Fondo Monetario caído, por lo tanto, teníamos un problema enorme digamos con esos 25 mil millones de dólares. Y la verdad que como si todo esto fuera poco teníamos vencimientos en pesos por el equivalente de 90.000 millones de dólares. Entonces, si ustedes contemplan el desequilibrio que teníamos en el plano monetario que era peor que el de la previa del Rodrigazo; una situación patrimonial del Banco Central muchísimo peor que la que teníamos en la previa de la hiperinflación del 89; y que además teníamos indicadores sociales peores que los que teníamos en el 2001, verdaderamente estábamos frente a la madre de todos los males porque todas las peores crisis las teníamos todas juntas. ¿Esto es para llorar? Miren, la verdad no; porque la única forma en que podría llegar a haber un gobierno liberal libertario en un país que arrastra 100 años de socialismo era en el medio de un desastre. La única forma que esto podía ocurrir era esto, era una carambola tres bandas y las fuerzas del cielo lo permitieron.
Y como si todo esto fuera poco, en realidad la actividad económica venía cayendo y tuvo un repunte. Esa es la gorra. Es más, tengo versión hasta en hebreo de la misma. Eso es divertido de dónde salió. Se las voy a contar porque es divertido, para que vean lo dinámica que es la política. Nosotros cuando con Victoria asumimos como Diputados en diciembre del 21, un periodista de Diputados TV, que yo lo conocía de América, un verdadero grosero, me dijo: ‘pero ustedes son dos diputados, qué pueden hacer dos diputados en 257, no van a poder hacer nada’. Y yo le contesté con el primer libro de Macabeos 3:19 que dice ‘la victoria en la guerra no depende de la cantidad de soldados sino de las fuerzas que vienen del cielo’. Maradona tendría una frase para eso.
Naturalmente frente a este desastre que enfrentábamos, había que tener sin duda un programa de estabilización bien duro y concreto. Esto es divertido porque se la pasaron durante la campaña diciendo que nosotros no teníamos ningún plan, que no teníamos programa económico, que no teníamos nada, se nos dijeron un montón de cosas. Pero en realidad los únicos que decíamos que era lo que había que hacer éramos nosotros. De hecho, yo hasta había publicado un libro que se llamaba ‘El fin de la inflación’, donde si lo leen van a encontrar que está todo contado ahí. Y no dije que lo iba a hacer, además lo estoy haciendo. Eso es más divertido todavía.
Entonces, la primera pregunta era shock o gradualismo. La verdad es que cuando ustedes repasan la historia argentina, todos los programas del shock, salvo el del 59, no solo lograron bajar la inflación, sino que además fueron expansivos. Y además todos los programas gradualistas terminaron mal. Lo otro era para hacer gradualismo hay que tener tiempo. ¿Ustedes creen que yo tenía tiempo si tenía la posibilidad de triplicar la base monetaria en un día… perdón, cuadruplicar la base monetaria en un día? No, no había tiempo. Pero como si todo esto fuera poco, si ustedes quieren hacer gradualismo, además requiere eso de que ustedes tengan financiamiento. Y Argentina no tenía financiamiento, si tenía caído el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. En ese en ese sentido la verdad que no había otra alternativa que el shock. Además, yo considero que la única salida es el shock. Eso también tiene una explicación. Entonces en función de esto nosotros implementamos un programa de estabilización bien, bien duro. Digo al margen de la cantidad de cosas que digan los muchos economistas ‘no, que esto es una transición, que después falta el programa’. Miren: si la inflación de diciembre mayorista fue 54%, viene bajando todos los meses, el mes anterior fue 10 y el último fue 5; si la inflación mayorista que venía a niveles del 45 la pudimos clavar en 25 y después fue 20, 13, 10 y ahora vamos camino a un dígito, en términos de core seguro. Deberían ser más respetuosos, claramente que hay un plan de estabilización para bajar la tasa inflación. Que no la vean no es mi culpa. Un programa de estabilización esencialmente tiene tres elementos: tiene una política fiscal, nosotros hasta le hemos puesto nombre a esa política fiscal, se llama motosierra y licuadora, o sea tiene motosierra y tiene licuadora. Es más, nosotros muchos de los que nos critican de la calidad del ajuste, a mí me causa gracia porque decían que hacer un ajuste de más de un punto del PBI era imposible. Y nosotros apuntábamos a que en el año 2024 tengamos déficit cero. Y lo hicimos con tanta convicción que obviamente que tenía licuadora y que tenía motosierra. Y después creíamos que lo íbamos a poder lograr en el primer trimestre y lo logramos en el primer mes, o sea enero tuvimos déficit financiero nulo. De hecho, nos criticaron y dijeron que en febrero hasta nos explotaba el déficit primario. Nuevamente déficit cero. Y les voy avisando que el día 22 vamos a estar haciendo una cadena nacional, donde además vamos a estar anunciando los números fiscales y les aviso que el primer trimestre del año terminó con resultado financiero positivo. Con lo cual a todos esos analistas que dicen que nos va a explotar el déficit y todo eso les dedico el aplauso que ustedes tuvieron recién o nuevamente la frase de Maradona.
El otro elemento es el tema de la política monetaria. Básicamente el Banco Central está quebrado. Entonces, la pregunta es cómo se resuelve la quiebra del Banco Central. Esta es la clave. La quiebra de un Banco Central se resuelve licuando sus pasivos; o sea con el tamaño del problema argentino implicaba un nivel de precios estratosférico hasta que licuaran tanto los pasivos, que el patrimonio neto por lo menos quedara nulo. ¿Hasta ahí vamos? Si esto es así quiere decir que dado ese nivel de precios para resolver el saneamiento del Banco Central está en la estratosfera, dado los precios de hoy, la línea que une esos dos niveles de precios le da la tasa de inflación implícita. Por lo tanto, era fundamental sanear el Banco Central ¿para qué? Para que ese nivel de precios estratosférico que dejaba nulo el patrimonio del Banco Central fuera bajando y en la medida que ese nivel de precios bajara, por lo tanto, la tasa de inflación esperada tiene que bajar. Naturalmente ahí también arrancamos con un proceso de saneamiento del Banco Central. Ahí también nos encontramos con algunas críticas, hasta tengo los WhatsApp y tengo los informes de las consultoras, hablando que había que llevar la tasa de interés real a terreno positivo. Si hubiéramos hecho eso, en lugar de haber descomprimido el balance del Banco Central como lo hemos hecho hasta ahora, les cuento que en lo que va del año ya hubiéramos metido cuatro bases monetarias más en instrumentos remunerados. ¿Entonces ahora estaríamos discutiendo qué cosa? No, esto es insostenible, estaríamos hablando de la pelota de las Leliqs o la pelota de los pases, o no sé qué cosa, una bola de nieve que nos iba a arruinar en una hiperinflación. Ahora todos ellos están todos escondidos, nadie dice nada. Es decir, le deben tener miedo a la frase de Maradona. Pero, dicho de otra manera, lo importante es que la contracara de ese déficit fiscal de 10 puntos del PBI ya lo llevamos a cuatro. Es decir, no solo que llevamos hecho un ajuste fiscal de siete puntos del PBI en el tesoro, motivo por el cual ahora hemos empezado a relajar partidas, y entonces ahora empieza a quedar más motosierra y mucho menos de licuadora; digo, para los que están tan preocupados por la calidad del ajuste, como si no fuera que una licuadora permanente es una motosierra, ¿no? Pero bueno, eso es otro detalle. Lo importante es que hemos hecho sucesivas bajas de tasa de interés, ¿y todo el mundo qué esperaba cada vez que bajábamos la tasa? Que subiera el tipo de cambio y que perdiéramos reservas. Bueno llevamos acumulados más de 12.000 millones de dólares de reservas, salimos del terreno de las reservas netas negativas y en el medio pagamos un montón de cosas. Por lo tanto, también lo que hicimos en materia monetaria y cambiaría es un éxito. Ahora la discusión es ‘no, bueno pero la tasa en dólares es enorme’. Y entonces si yo le hubiera puesto en términos reales positivos hubiera sido todavía más grande. Entonces que más o menos se pongan de acuerdo que quieren decir por la tasa de interés, porque nosotros siempre tuvimos claro que era un problema de arbitraje con la tasa de los dólares. Es decir, no mirar como un cavernícola la tasa de interés real en una economía cerrada.
Y obviamente que hicimos en el ajuste del tipo de cambio. Si ustedes se acuerdan cuando nosotros estábamos en campaña decían que con nosotros el tipo de cambio iba a estar en 6.000 en 10.000. Me parece que le ahorraron por un poquito. Entonces ¿qué tenemos en materia de resultados? No solo que hemos logrado el déficit cero, sino que nos hemos pasado un poco: en lugar de hacer un ajuste de cinco puntos del PBI, hicimos uno de siete. Eso lo pueden ver en un trabajo que hizo Nadin Argañaraz, que de hecho lo circuló por Twitter, y además bajamos el cuasifiscal en seis puntos. O sea que hicimos un ajuste de 13 puntos del PBI, es decir acabamos de hacer el ajuste fiscal más grande de la historia de la humanidad, porque además encima lo hicimos en tres meses. Esto es importante, pero eso es justamente lo que permitió evitar la hiperinflación. Además, una de las características que tiene el tema del déficit cero y que es muy importante es lo siguiente: cuando ustedes tienen déficit financiero nulo significa que la deuda no sube; si la deuda no sube, la relación deuda/producto no sube, por lo tanto, ustedes están en un sendero sostenible. Es decir, ustedes pasan a ser solventes; y si ustedes pasan a ser solventes el precio de los bonos tiene que subir y de hecho de 18 dólares que estaban cuando nosotros asumimos, hoy están cerca de 60 y el riesgo país que estaba en 2900, hoy está en 1200. Y si logramos bajar 200 puntos básicos más el riesgo país ya podemos Ingresar a los mercados de deuda. Este ajuste fue tan fuerte y tan positivo la forma en que lo hicimos, que además cuando fuimos a negociarlo al Fondo, mientras que todos los analistas decían que nuestro programa era inconsistente y que una revisión del fondo con programas caídos como el caso argentino demandan como tres meses, nosotros sacamos el acuerdo en un fin de semana. Se imaginarán cuál es la frase.
Y, obviamente que esto se está traduciendo en la baja en la tasa de inflación, porque como les decía la inflación de mayorista que es la que se anticipa estaba en 54%, es decir el equivalente del 17000 por ciento anual y hoy está en 5. Es más, el propio Fondo Monetario Internacional que tenía expectativas de inflación para este año para Argentina en torno al 250% anual, la bajó a 150. Bajarla a 150 significa que, de hoy para adelante, está esperando que en promedio la inflación sea del cinco y medio. Pero como es el proceso no es lineal quiere decir que vamos a un dígito bajo hacia diciembre. Es decir que lo estamos logrando. Naturalmente hay un montón de críticas; lo que pasa es que las críticas a mí me parece que se tendría que hacer entendiendo el modelo que uno tiene en la cabeza. Yo por ejemplo no sé cuándo dicen ‘programa integral’, entonces dicen ‘políticas sectoriales’ dentro del programa dentro del programa. Miren, yo no soy Leontief, no les voy a hacer el plan quinquenal. Yo no creo en eso. Yo no creo en una economía dirigista. Yo soy liberal libertario, yo me voy a ocupar de arreglar la macro, la micro la tienen que arreglar ustedes, ¿qué tengo que estar haciendo yo con la micro? Ya bastante con las estupideces que venimos haciendo hace 100 años, que hacemos cualquier desastre macro y después vienen los políticos eligiendo los ganadores. Lo cual además es una fuente de corrupción enorme. Por lo tanto ¿cuál es la regla de un liberal en esto? Don't pick the winners. Yo me voy a encargar de estabilizar la economía, de bajar la inflación, de generar las condiciones para que la economía vuelva a crecer; el resto es todo de ustedes. Es decir, el que mejor esto lo explica es Claudio Zuchovicki, que tiene un ejemplo fabuloso: ¿Milei se va a ocupar de la inflación? Sí. ¿Se va a ocupar del déficit fiscal? Sí. ¿Se va a ocupar de la cuestión cambiaria? Sí. ¿Se va a ocupar de limpiar el balance del Banco Central? Sí. ¿Se va a encargar de su negocio de pizzería? No. Usted tiene dos pizzerías, una le va bien, otra le va mal. Tiene el mismo contexto internacional, tiene la misma macro: yo no me voy a ocupar de la pizzería, eso es un problema micro, eso lo tienen que resolver ustedes. ¿Qué tengo que estar haciendo yo metiéndome en el negocio de cada uno de ustedes? No se puede ser tan fatalmente arrogante.
La otra es la política de ingresos, ¿pero que es la política de ingresos? Tocar el precio de tal cosa, el precio de tal otra, la tasa de interés, los salarios… Ey, hola, soy liberal libertario, yo creo en el sistema de precios. Entiendo que puedo tener un problema transitorio, porque estoy pasando una economía hipersocialista, tengo 100 años desde socialismo y entonces estamos haciendo una reforma pro mercado. Hay un montón de desequilibrios de inicio, más el problema adicional que tenemos que evitar una híper, entonces estamos corrigiendo precios relativos en un contexto de alta inflación y con algunos problemas de base y con algunos problemas de violentar la propiedad privada antes, entonces puede ser que en algún momento haya algunas correcciones vía defensa a la competencia. Todos estarán entendiendo de lo que les estoy hablando. Pero salvo cosas así puntuales y que son propias de la transición, esas cosas no van a existir nunca más. Pero antes ustedes tienen que estabilizar la economía y que quede claro el respeto por la propiedad privada. Y no que alguien utilizando recursos del Estado vaya tomando posiciones y genere una posición dominante a partir de la estafa del estado y después generar movimientos políticos tocándole a un segmento etario donde hay una gran proporción de votantes. Bienvenido al mundo de la política, es la basura que les estoy describiendo.
El tema de la tasa interés ya lo hablamos. El tema de la sostenibilidad del ajuste también hablamos del tema, cada vez queda más de la motosierra, queda menos de la licuadora. El mejor ejemplo es lo que estamos haciendo en materia de jubilaciones: si hubiéramos dejado las cosas como venían, los jubilados hubieran perdido dos puntos del PBI, con lo que estamos haciendo solo van a perder medio punto. Es decir, le estamos devolviendo un punto y medio. Y naturalmente la discusión del tipo de cambio. La discusión del tipo de cambio es bastante ridícula: ‘no, porque hay que hacer subir el tipo de cambio’ ¿Por qué? Si hoy no hay brecha, ¿por qué tengo que estar tocando el tipo de cambio? ¿Porque no me gusta el tipo de cambio de mercado? Lo primero que tienen que entender que el análisis ese del tipo de cambio real - lo voy a decir en latín, diría el profe De Pablo - es una pelotudez. Porque agarran y toman una serie del tipo de cambio real. La pregunta es ¿cuál es el año de referencia? Que alguien me explique por qué toma el determinado año de referencia sobre el que calcule el promedio. Que explique eso. No, eso no lo explican. No solo eso, cuando ustedes se fijan hay momentos donde el tipo de cambio real queda muy depreciado y hay momentos que quedan muy apreciado. Por lo tanto, digamos, algo que tiene ese nivel de volatilidad, calcular el promedio le diría que es otra estupidez del tamaño de una casa. Pero como si todo eso fuera poco, en el momento que ustedes no sé calculen un promedio y en algún momento el tipo de cambio va a pasar por ahí, tomen ese año. ¿Ustedes podrían decir que en ese año ustedes pueden replicar las condiciones de oferta y demanda de todos los bienes pasados, presentes y futuros que afectaron a la determinación de ese conjunto de precios relativos en Argentina y en el mundo, todo en simultáneo y como si en el medio no hubiera cambiado ni siquiera la composición de oferta de bienes? ¿Ustedes se dan cuenta del disparate que es hacer eso? Como dice el profe de Pablo: eso es hacer aritmética, eso no es economía. Entonces cuando vienen, le hablan del tipo de cambio real, que esto, que el otro ¿ustedes se dan cuenta la arrogancia que implica? Porque implica conocer el vector de precios relativos, pero no solo ahora de Argentina sino también de todo el mundo. Y entonces ustedes deberían conocer las preferencias, la tecnología y las dotaciones, no solo presentes sino futuras, no solo de Argentina sino también de todo el mundo. ¿Ustedes se dan cuenta? Y ustedes para tomar una acción de política y para que eso funcionara ustedes deberían ser omniscientes, omnipresentes y omnipotentes: o sea deberían ser Dios. ¿Por qué carajo creen que Hayek le puso La fatal arrogancia a ese libro? Porque es un poquito pretencioso, ¿no? Bueno, el que levanta la manito así se cree que está en esa condición. Un día de estos le va a decir traeme un café. Pero bueno, ya saben de quién estoy hablando, son cosas que pasan.
Entonces, esto es todo lo que tiene que ver con la parte de estabilización. Ahora obviamente no es todo estabilización, en algún momento tenemos que empezar a crecer. Para empezar a crecer ahí entra a jugar un rol importante las reformas estructurales. Pero hay una cosa muy importante que es entender la naturaleza de las reformas estructurales. Esto lo explicó Toto de una manera magistral cuando hizo el primer discurso sobre las características del programa. En ese discurso él lo explicó la perfección y si usted se fijan todo el entramado regulatorio y de restricciones y todas las porquerías que tenemos y el entramado legal, son consecuencias de ir sobre los efectos y no sobre las causas. Es decir, la causa del problema es siempre la misma: ustedes toman los últimos 123 años de historia argentina, Argentina tuvo déficit fiscal durante 113. Argentina desde el año 1901 hasta hoy tuvo 22 crisis, 20 tienen origen fiscal. Que tienen o déficit fiscal alto o extravagantemente alto. Por lo tanto, el problema central es el déficit fiscal. Entonces, por ejemplo, ustedes tienen déficit fiscal, lo financian con emisión monetaria. Entonces qué es lo que pasa en algún momento se le deteriora… o sea todo eso tiene el tipo de cambio, entonces tratan de anclar con el tipo de cambio. Cuando ustedes hacen eso, qué les pasa: pierden reservas. Entonces aparece la ley penal cambiaria para que ustedes no puedan comprar dólares. En lugar de arreglar la causa, que es el déficit fiscal, como los políticos no quieren tocarla de ellos, ayer quedó bien claro eso que la de ellos no se toca, Macri diría: ‘la mía está’, ayer fue un claro ejemplo, ‘la mía está’… por suerte, los argentinos están reaccionando. Entonces, en ese contexto ustedes se encuentran con esa situación. O por ejemplo financian el déficit con la emisión monetaria, generan deuda, perdón, emisión monetaria, entonces empieza a haber inflación. ¿Qué hacen? Controles de precios, ejemplo la ley de góndolas. Ahora ¿qué pasa cuando ustedes controlan precios? Aparece el desabastecimiento. Entonces ¿cómo contesta la política? Con la ley de desabastecimiento. Es decir, se les van los dólares, entonces ponen controles de capitales y entonces el que fuga es un delincuente. Es un héroe, el que fuga es un héroe, logró escaparse de las garras del estado. Ustedes se ríen, pero yo lo veo así. ¿Qué le recomendarías a tu cliente? Me pongo el traje de economista: comprá dólares. Eso después figura como fuga. Y la verdad que, si lo compran en negro mejor, porque así no tiene que pagar un montón de impuestos estúpidos que hay, todo para financiar a los que levantan la manito y al que lo hace de queruza, para financiar a esos inútiles. La frase dice que ladrón que roba otro ladrón tiene 100 años de perdón; digo con lo que han robado los políticos argentinos tenemos la eternidad ganada.
La realidad es que cuando ustedes se fijan nuestro programa económico, que tiene la pata fiscal, la pata monetaria y la pata cambiaria, donde hay un ancla nominal, no es que no hay ancla nominal. Esa es otra estupidez que decían: ‘no, acá no hay ancla nominal’. Miren, desde que nosotros llegamos la base monetaria prácticamente no ha cambiado y compramos, emitimos un montón para comprar los 12 mil millones de dólares, nos habían dejado un regalito que se llamaban unos puts en el Banco Central que nos dispara emisión endógena, estaban los pasivos remunerados. ¿Y con qué compensamos? Compensamos con BOPREAL y compensamos con resultado fiscal. Y eso hace que la base monetaria no cambie. Hoy tenemos reservas internacionales netas nulas y tenemos la misma base monetaria. Ese es el ancla, el ancla es la cantidad de dinero. Es más, si ustedes se fijan, que siempre se los tacha de muy agresivos al Fondo, con el tema de la velocidad que puede bajar la inflación, reconocieron que la estamos bajando más rápido. Es más, algunas críticas me resultan bastante graciosa entre el tipo de cambio y la inflación, porque durante la convertibilidad que tardó 20 meses en estabilizarse la tasa de inflación hasta hacer un país serio en término inflación, con el tipo de cambio fijo, hoy la tasa inflación baja mucho más rápido que durante la convertibilidad. Y eso tiene una explicación, porque ustedes durante la convertibilidad tenían dinero endógeno. El dinero endógeno asociado al aumento de la demanda de dinero. Cuando ustedes querían demandar pesos que hacían entregaban dólares y el Banco Central les daba pesos. Entonces el aumento de la demanda de dinero tenía como contrapartida ¿qué cosa? Un aumento de la oferta de dinero. Y eso hace que entonces ustedes dejaban el mercado de dinero todo el tiempo en equilibrio y lo único que restaba era que la readecuación de los precios relativos por los dos quilombos hiperinflacionarios anteriores, la hiper de Alfonsín y la hiper de Menem. Entonces cuando se terminaron de corregir todos esos problemas de precios relativos, la inflación desapareció, porque ustedes mantenían en equilibrio el mercado monetario. Nosotros también mantenemos el equilibrio del mercado monetario, pero sin emitir, con lo cual todos los aumentos de demanda de pesos ¿van contra qué? Contra caída en el mercado de bienes, por lo tanto, el nivel al cual la tasa inflación baja es muchísimo más rápido: ahí está la explicación, no era tan difícil. Lo único que es poner un poquito de cabeza.
Para enfrentar esto, nosotros enviamos el programa de reformas más ambicioso de la historia argentina. Mandamos mil reformas en dos instrumentos: un tercio en el DNU, dos tercios en la Ley Bases. El DNU todavía sigue en pie. ¿Pero cuál es la característica de estos instrumentos? Tiene tres elementos: el primero que a diferencia de todos los DNU que hubo en Argentina, donde todos avanzaron sobre las libertades individuales, sobre la propiedad privada, esta es la primera vez que devuelve libertades, o sea le devuelve libertad a los ciudadanos, hace un respeto furioso de la propiedad privada, promueve estructuras de mercado más competitivas. Eso sí tiene un defecto enorme, tanto el DNU como la Ley Bases, un defecto tremendo: va contra el curro de los políticos. Eso se vio con claridad lo que hicieron, cuando lo voltearon en la cámara de senadores. Obviamente que los mayores abanderados de los curros ¿qué van a decir? ‘No, el decreto es inconstitucional’. Afortunadamente la Corte después de algunas cosas ahora parece como que se encaminó, se reorientó y ahora falló en dos casos a favor del DNU. No es suficiente todavía, pero es un buen inicio. En cuanto a la Ley Bases también tiene los mismos conceptos, pero eran cosas que no podían salir por decreto, sino que tenían que pasar por el Congreso por el tipo de cosas que implicaba. Entonces cuando nosotros nos sentamos con los gobernadores en Casa Rosada una de las cosas que yo le propuse a los gobernadores era arreglarles el problema fiscal que tenían. Y eso estaba en el capítulo 4 en la Ley Bases. Ahora ¿qué es lo que sucede? Los gobernadores en lugar de entender eso como un acto de buena voluntad, lo entendieron como un signo de debilidad. Frente a ese caso, empezaron a hacer un desastre en materia fiscal. Entonces ¿qué es lo que pasó? Nosotros sacamos el capítulo 4 de la Ley Bases. ¿Cómo lo leyó el círculo rojo que cada día está más analógico? ‘Esta es una derrota de Milei’. Salió Toto y explicó: ‘bueno, si ustedes no quieren dejar el capítulo 4 como estaba y hacen un desastre fiscal como el que están haciendo para que nos peguemos la piña de acá seis meses, nosotros levantamos el capítulo 4. Pero si nosotros levantamos el capítulo 4, ustedes van a terminar haciendo un ajuste fiscal más grande que el que están dispuestos a hacer. Ahora volvió la Ley Bases, adivinen qué tiene. El mismo capítulo 4. ¿Quién ganó? Tengan cuidado con estos muchachos, que están muy analógicos, que parece que no entienden bien cómo funciona la política.
No solo eso, sino que además después pasó el resto la Ley Bases, fue aprobada. Y después la empezaron a desguazar. Qué interesante porque los fondos fiduciarios tenían más de 20 años, se enteraron ahora que existían. Teníamos todos los campeones de del republicanismo, de la anticorrupción y todo, pero nunca pasó nada con eso, se descubrió ahora. Como todas las cosas que estamos descubriendo todo el tiempo desde el Ministerio de Capital Humano, donde por ejemplo hemos encontrado que la mitad de los que recibían fondos los comedores no existían, eran comedores fantasmas; o comedores que decían que recibían a 500 personas, en realidad recibían 50; o los que pedían los bolsones de comida y que no querían que se dejara constancia de los DNI de lo que recibían esos bolsones; o no solo eso sino que además cuando recibían los bolsones cotizaban una calidad extra Premium y cuando ustedes ponían los fideos se deshacían al momento de tirarlos al agua. Miren todas las cosas que hemos encontrado. O el pochoclero que me llamaba ‘semana santa, se cae entre marzo y abril’. Claro, porque estaba esperando que entre marzo y abril le pudiera llegar a entrar la causa de los guardapolvos a la mujer. Interesante todo lo que estamos encontrando Y cómo se abusan de los más vulnerables para esto. Es más, fíjense uno de los grandes triunfos que nosotros tuvimos, lo primero que recibimos fue una crítica. Yo recuerdo que todo el mundo se ha pasado pataleando contra el tema de los gerentes de la pobreza. Una de las cosas maravillosas que hizo la ministra Pettovello, nosotros teniendo conciencia de que la parte más complicada iba a ser entre la primera parte del año cuando estuviera operando a full el ajuste fiscal, porque íbamos a estar generando ahorro sin contrapartida de inversión y eso iba a hacer caer la actividad económica, el empleo, los salarios reales y va a haber más pobres y más indigentes, porque sincerar la economía no es gratis; 20 años de populismo no es gratis. Sobre el final del gobierno de Menem el salario promedio era de 1800 dólares, ustedes lo ajustan a hoy son 3000 dólares; cuando nosotros asumimos estaba en 300, es decir se había perdido 90% de los ingresos en dólares. No es que las tarifas son caras y todas esas cosas: el problema es que somos tan miserables, tan pobres que no podemos pagar ni siquiera las subsidiadas. El problema no es un problema de cuánto está la tarifa, el problema es de cómo nos destruyeron los ingresos los populistas. Se la pasaban haciendo gala de keynesianismo, hay que consumir, hay que consumir. Claro, hay que consumir implica que ahorran menos; si ahorran menos, invierten menos; si invierte menos, no aumenta el stock de capital per cápita, no aumenta la productividad, no aumentan los salarios… Bienvenidos: somos pobres. Entonces no es gratis, no es gratis. Veintipico de años de populismo no es gratis.
Ahí empezaron a destrozar la Ley Bases y, bueno, la bajamos. ¿Cómo lo entendieron los analógicos del círculo rojo? ‘Otra derrota de Milei’. Y siguen sin entender el principio de revelación, quedaron todos expuestos. Es decir, si yo soy un abanderado que no se toquen, por ejemplo, las remuneraciones, nosotros tenemos congeladas las remuneraciones desde enero por orden mía. Lo que pasó ayer ¿es una derrota de Milei? Es un triunfo bárbaro, los vamos a arrasar en el 2025. La gente les está sacando la careta a estos delincuentes, que lo único que les importa es estar en política para afanar. Es buenísimo, es un momento de revelación maravilloso lo que estamos viviendo: está saliendo todos los pufos a la luz, está saliendo toda la porquería de la política la luz, es decir los estamos dejando en evidencia a todos, en el 2025 los vamos a aplastar directamente. Y ahí ya entro en la última parte de lo que va a ser esta presentación. Nosotros las reformas que planteamos en DNU más Bases implicaba que en términos de libertad económica saltáramos 90 puestos. Es decir, pasáramos a estar como Alemania. Nosotros en 20 años nos íbamos a parecer a Alemania, pero como la política no quiere dejar de robar, atenta contra el DNU, atenta contra la Ley Bases, le saca pedazos, ¿para qué? Para que no toquen sus negocios. Les tengo una noticia: las reformas que no podamos meter ahora, las vamos a meter a partir del 11 de diciembre del 2025. Y además de esas tengo 3000 más. No voy a hacer que Argentina se parezca a Alemania, porque Alemania tiene un PBI per cápita de 50.000 dólares; yo no quiero ir por cosas chiquitas, yo me quiero parecer e Irlanda. Quiero ir por un PBI per cápita que es 50% más grande que el de Estados Unidos: esa es la revolución que estamos proponiendo, una verdadera revolución de la libertad”.
“Y, en ese sentido hay algunas cosas que le resultan interesantes, porque es cierto que en el medio del ajuste que estamos haciendo el 75% de los argentinos entienden que estamos peor, entienden claramente que estamos peor. ¿Pero qué es lo más maravilloso? Que cuando nosotros asumimos, solamente el 20% de los argentinos creían que de cara a un año íbamos a estar mejor; eso trepó en enero a 30; en marzo digamos ya estaba en 40 y hoy estamos en 50. Hoy ya la mitad de los argentinos percibe que de acá a un año vamos a estar mucho mejor. Y eso no es menor. Además, el 70% de los argentinos está convencido que vamos a exterminar la inflación, nada más que hay 50 puntos que consideran que lo vamos a hacer en un año y 20 puntos digamos que considera que lo vamos a hacer en dos. Es más, si hoy fuera el balotaje, pese que le pese a algunos, hoy lo ganaríamos por más diferencia: lo ganaríamos 58 a 42, lo ganaríamos por 16. Pero no solo eso, porque cuando ustedes van a esa votación de los 58, lo que es más interesante 48 puntos estarían en la primera vuelta. Ganaríamos en primera vuelta porque quien más intención de voto tiene después de nosotros es Cristina Fernández de Kirchner con 20. Y no es cierto que de esos 10 puntos incrementales entre la primera vuelta y el balotaje saquemos cero, por lo tanto, estaríamos arriba de los 50 puntos. ¿Esto qué quiere decir? Que sin lugar a dudas a partir del 11 de diciembre vamos a hacer todas las reformas que queden pendiente más las 3000 que tenemos en carpeta, más todas las otras que estamos diseñando y que también vamos a aplicar. Vamos a hacer de Argentina una verdadera Argentina liberal que sea potencia y que sea grande nuevamente de acá a 35 años.
Y, finalmente la pregunta es cómo. Parece casi fundamentalista el tema de que solo si yo le digo subimos en libertad económica va a ocurrir. Me pueden tener mucha estima, pero creerme tanto, hasta sería peligroso. Entonces el punto es cómo es todo el proceso. La primera parte es rebote, la primera parte es rebote. De hecho, fíjense que cada vez son más los analistas que están viendo una V. Esa V ya había aparecido un indicador que pareció raro, que para febrero el desestacionalizado de Orlando Ferreres había dado positivo. Pero claramente es un indicador el desestacionalizado que tiene mucha inestabilidad en la punta. Entonces hay que tomárselo con mucho cuidado eso. No solo eso, ahora salió el índice líder digamos de la Di Tella que anticipa la evolución de la actividad, dio positivo. Cuando ustedes miran minería viene para arriba; cuando miran oil and gas viene para arriba; cuando miran el campo viene para arriba. Es decir, cada vez tenemos más indicios de que esto está rebotando y levantando. No solo eso, sino que además ustedes tienen algunas cuestiones adicionales y es que donde se notaron las caídas más fuertes, el recorte se está dando en V de manera violenta. Ejemplos CAME, las ventas… pegó un rebote fuerte. No solo eso, sino que la brutal caída del riesgo país, cuando ustedes miran empíricamente cada vez que el riego país se desploma, la actividad rebota fuertemente. Pero no solo eso, además hay otro elemento fundamental y es aun cuando no hiciéramos ninguna de las reformas estructurales, la descapitalización de la economía obedece a todo un conjunto de reformas estructurales negativas que hicieron que uno se coma el capital. La economía argentina está muy descapitalizada. ¿Por qué está descapitalizada? Para que el valor del producto marginal del capital - digo la TIR de la firma - esté por encima del UAC, para que no destruyan valor. Entonces en ese contexto ustedes lo que tienen es que, cambiando las reglas de juego, ¿qué pasa ahora? La tasa está desalineada con el costo de oportunidad de capital ¿Por qué creen que vuelan las acciones? Justamente por eso, porque afuera la están viendo. Entonces en ese que de 20 años destruir capital, una productividad enorme, retornos reales enormes contra tasas de interés desplomándose, ustedes tienen una posibilidad de ganar plata a lo loco, aún sin reformas estructurales; es decir sin hacer reformas podemos crecer durante un periodo interesante de tiempo, no a las tasas que a mí me gustaría, pero sí podemos rebotar fuerte ahora y crecer fuerte en el arranque. Entonces vamos a llegar al 2025 con tasas de expansión muy fuerte compuestas de rebote y de crecimiento por descapitalización y tasa de inflación cayendo. Prepárense porque vamos a arrasar. Y ahí sí vamos a tener la composición de las cámaras que necesitamos para hacer las reformas que Argentina necesita para volver a ser grande. Pero eso no es todo. Si ustedes se fijan cuando termine todo esto, el ajuste fiscal va a ser el consolidado de 15 puntos del PBI, es decir va a haber 15 puntos del PBI que se lo llevaba el gobierno para financiar actividades parasitarias y que ahora ese ahorro se va a transformar en inversión productiva. Y eso le va a meter a la economía por lo menos entre 4 y 5 puntos de crecimiento adicional. Entonces nos estamos preparando para generar un verdadero… yo no diría milagro económico, porque lo único que estamos haciendo es lo que dicen los libros que hay que hacer. Pero tenemos la cabeza tan deformada después de 100 años de lavado de cerebro en la educación pública sea de gestión estatal o de gestión privada, tenemos tanto socialismo en sangre, que cuando uno lo ve así parece un milagro. En realidad, lo único que estamos haciendo es aplicar el manual.
Por lo tanto, las perspectivas de crecimiento para adelante son maravillosas. Porque además por más que no tengamos todas las mayorías para hacer todas las reformas que queremos, solo para una gran parte de las reformas, cuando empiecen a ver la oleada liberal libertaria que se viene, se van a acomodar. Y eso va a permitir que las reformas salgan mucho más fácil de lo que uno lo ve ahora. Pero esto es solo una parte de la historia. Yo lo que les acabo de decir es toda la configuración macro que hace que Argentina sea un excelente caso de negocios. Lo voy a poner en estos términos: si yo voy comprado en activos de larga duration en Argentina con caída de tasa de interés gano un montonazo, ¿sí o no? Imagínese si además son reales, con lo cual no ajustaron, con lo cual tienen para ganar un montón, con lo cual hay una oportunidad de entrar a hacer negocios de infraestructura y de un montón de cosas para ganar un montón de plata. No solo eso, es importante también que tengan conciencia que nuestras líneas de análisis económico tienen tres bloques: hay un primer bloque que es la coyuntura. Ustedes ahí lo van a encontrar a Toto, lo van a encontrar a Pablo Quirno, lo van a encontrar a Santiago Bausili: son los que se ocupan de la macro, de la coyuntura. Después está la segunda línea de análisis - esto no es una cuestión de orden, es una cuestión de exposición - que es el tema de las reformas regulatorias, las reformas estructurales, la agenda de la libertad: ustedes ahí tienen a dos colosos, tienen a Federico Sturzenegger y al doctor Rodríguez Chirillo, que son los que diseñaron las reformas estructurales para liberarnos de toda esta miseria socialista que cargamos hace 100 años. Y después está el tercer grupo, que tengo el privilegio de tenerlo acá al queridísimo Demian Reidel, que es el que se encarga de pensar la economía del futuro. Y donde con el consejo que él elabora, analizar y estudiar políticas para que Argentina se convierta en un país de vanguardia, un país de primer mundo, donde estemos a la vanguardia del progreso tecnológico. Estamos haciendo, estamos dejando todo. Pero quiero ahora sí cerrar con algo muy importante para que tengan claro que yo les puedo dejar todo listo, pero que la decisión final es de ustedes. Los que tienen el poder de transformar la Argentina son ustedes, no es un político Yo lo único que tengo que hacer es allanarles el camino, hacerles la vida más fácil; pero los verdaderos creadores de riqueza son ustedes, los que van a cambiar el futuro el país son ustedes, los que van a hacer una Argentina mejor son ustedes, los que nos van a poner de pie son ustedes, son los empresarios, los emprendedores, no los políticos. Los políticos no crean valor, lo destruyen y lo que yo estoy haciendo es devolverles la libertad. Se los dije en las elecciones: el resto de los políticos ¿qué les piden? El voto para que les den el poder para poder transformar su vida. Y yo les dije: yo les pido el voto para poderle devolverles la libertad a ustedes y que ustedes sean los verdaderos arquitectos de su futuro. Entonces ustedes se tienen que hacer cargo de ser los héroes de esta historia. Yo les voy a allanar el camino; en la medida que Argentina empiece a crecer, yo le voy a poner un pie encima el gasto público, tal que lo licue en términos de PBI y empezar a devolverles la plata de los impuestos. Es decir, de acá al futuro también va a haber mucha baja de impuestos y va a generar además una retroalimentación virtuosa. Entonces se lo voy a contar para que tengan idea de esto. Hoy es un día muy especial, hoy es el cumpleaños del rebe y además estamos entrando en pesaj: donde se recuerda la salida de Egipto. Pero esto es muy interesante, porque después de las 10 plagas que caen sobre Egipto y todo lo que pasó, Moisés lleva al pueblo hasta el Mar Rojo y le piden que lo abra. Moisés golpea el báculo y le dicen ‘abrilo’. Y les dice ‘que se manden’. ‘No, no, que lo abra y entramos’. Y les dice ‘no tienen que tener fe, tienen que mandarse, tienen que entrar y cruzar’. Y el agua no se abría y del otro lado estaban los egipcios, o sea la esclavitud, que se los venían a llevar puestos Y ahí cuando el príncipe heredero se lanza y cree y confía, se abre las aguas y ahí se da la liberación final. ¿Qué quiere decir eso? Muchachos, en algún momento van a tener que poner las pelotas, van a tener que invertir, se van a tener que jugar para que se abran las aguas y seamos libres. ¡Viva la libertad carajo!