Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández, en el acto de entrega de viviendas, en La Bebida, provincia de San Juan, a los vecinos que perdieron sus casas en el sismo del 18 de enero de 2021
Buenas tardes a todos y a todas; muchas gracias, buenas tardes San Juan, muy lindo estar acá con ustedes, muy lindo estar en un día de felicidad.
Aún acuerdo de aquel día de enero, del año 2021, cuando la tierra tembló acá y lastimó la casa de muchos de ustedes y llegué rápidamente porque quería ver qué era lo que pasaba, me preocupaba mucho lo que – rápidamente – Sergio me había transmitido como preocupación de él. Y vinimos y lo vieron recién en un vídeo, asumimos un compromiso de que rápidamente los que habían perdido su cada pudieran tener una casa digna para habitar, y que ya no estén pensando – como escuché decir en el vídeo – en el riesgo de la lluvia, en el riesgo del viento, en el riesgo que uno tiene que pasar, cuando uno vive en una casa precaria, en situación de precariedad y nos pusimos con Jorge Ferraresi, que en aquel momento era el ministro, y lo secundaba Santiago, y ambos se pusieron al hombro el compromiso que había asumido y mi gratitud a ustedes, porque francamente, por el trabajo, que han hecho, sinceramente. (APLAUSOS).
A Jorge Ferraresi, a Santiago Maggiotti, porque ellos tuvieron mucho que ver con que – hoy - estemos inaugurando estas 837 casas, que vuelvo a repetirles, y yo siempre suelo repetir, en actos como este, que para mí no hay un momento más lindo, que el momento en que uno puede entregar una vivienda a una familia. Porque – en verdad – lo que hace, en ese instante, es despejar muchas incertidumbres, en la familia, saber que no tiene un techo digno, donde vivir y que ya no tiene que estar preocupado ni por el viento, ni por la lluvia, ni por pagar un alquiler, en muchos casos, sino que simplemente, ahora, pueden disfrutar de sus casas y ese para mí es un momento gratificante, porque básicamente – como siempre digo – no les estoy haciendo un favor a ninguno de ustedes, esos eran derechos que ustedes tenían y que el Estado no les estaba reconociendo. Y la tranquilidad es la tranquilidad que, desde el Gobierno, podamos estar reconociendo y dando los derechos que ustedes tienen. Así simplemente las recuerdo a ustedes dos recibiéndome, en el barrio, abrazándome y pidiéndome auxilio.
Esta es para mí son 837 casas singulares, en mi alma las llevaré grabadas como algo especial. Las vi sufrir, aquel día y las veo sonreír, hoy, y eso me pone muy feliz, muy feliz. Ahora, viva la justicia social y con esa justicia social tenemos que trabajar, todos los días, denodadamente, porque vamos a vivir en una mejor sociedad, cuando la sociedad sea más justa con todos y con todas. (APLAUSOS)
Ahora, estoy acá, y Fernanda me dice: “me he quedado afuera, yo necesito una casa, porque tengo dos hijos”. Quédate tranquila, Fernanda, que seguramente en la entrega de las próximas casas vos vas a estar adentro de alguna esas casas que vos y tus hijos necesitan. Estamos construyendo 5 mil viviendas más, acá en San Juan; hemos construido y hemos traído 10.800 soluciones habitacionales, a San Juan, y estoy feliz de que lo hayamos hecho, son casas que necesitan argentinos y argentinas. Hemos destinado 82.000 millones de pesos a San Juan, 82.000 millones de pesos, que están muy bien invertidos, pues es tranquilidad habitacional para sanjuaninos y sanjuaninos. (APLAUSOS).
Este es un día muy gratificante para mí en lo personal, que guardaré en mí memoria para siempre, como guardo en mí memoria aquel día de enero en que ustedes dos me recibieron en las puertas del barrio y me mostraron cómo las casas se habían derrumbado, cómo los techos se habían derrumbado. Todo esto que hizo el Gobierno nacional, quiero serle muy franco, no lo podríamos haber hecho si San Juan tuviera un Gobernador como Sergio Uñac. (APLAUSOS).
¿Por qué digo esto? Porque con Sergio hablamos un mismo idioma y tenemos las mismas preocupaciones. Para nosotros la prioridad es mejorar la vida de la gente. La política no tiene sentido si no lo hacemos para mejorar la vida de nuestros pueblos, para eso tiene sentido la política. Algunos en la política piensan qué problemas habitacionales deben ser resueltos por los mercados, y otros creemos que los mercados nos resuelven esos problemas porque no son un negocio. El negocio está en las casas más caras y en las familias pudientes que pueden pagarlas, y bienvenido sea; pero lo que no pueden pagar una casa, los que no pueden acceder a un techo, es obligación del Estado hacerse cargo para resolver los problemas de esas familias. (APLASOS).
Así es que, yo quiero darles las gracias por ser tan generosos conmigo, en tus palabas, Sergio, en el amor que me dieron a cada uno y a cada una que abracé. Pero quiero decirles: “tengo la tranquilidad de la tarea cumplida, de la labor cumplida y de la promesa empeñada cumplida”. Tengo la tranquilidad de que esto no solo ocurre en San Juan, con estas viviendas, con estas viviendas llevamos entregadas 63 mil viviendas a lo largo y a lo ancho de todo el país. (APLAUSOS). Y cuando lleguemos a diciembre vamos a estar entregando la casa 70 mil, que familias argentinas van a estar recibiendo; 70 mil casas, que argentinos y argentinas están requiriendo. (APLAUSOS).
Y mientras cuento todo esto, también les cuento, estamos construyendo 140 viviendas más para argentinos y argentinas que lo necesitan. Y esa es la plata mejor invertida que el Estado pude tener. (APLAUSOS).
Así que, gracias San Juan, por darme la alegría de ver este barrio hermoso, donde van a vivir hermosas sanjuaninas, hermosos sanjuaninos con sus hijos. Tengan la felicidad que merezcan y sepan, sepan, sepan, que inexorablemente, siempre voy a estar al lado de los que más necesitan porque eso lo aprendí de chiquito cuando abrazamos las ideas de Perón y de Evita. Y nunca vamos a dejar que abandonar ese ideario que a nosotros nos convoca.
Gracias de corazón a todos y a todas. Disfruten de estas viviendas, son sus derechos. ¡Gracias! (APLAUSOS).