Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández, en un acto de la UOCRA, en el campo deportivo de la entidad gremial, en Esteban Echeverría, provincia de Buenos Aires
PRESIDENTE. – Muchas gracias compañeros, compañeras. Muchas gracias. Gracias querido Gerardo por este acto maravilloso, maravilloso.
Hace algunos días atrás fuimos con Gabriel Katopodis a la autopista Juan Domingo Perón y allí celebramos el número 400 mil de empleados de la UOCRA. Me acurdo que dije, hablando con Gabriel. Gabriel me decía: la vez que la Argentina tuvo más empleados de la construcción, más trabajadores de la construcción en la Argentina, hubo 420 mil trabajadores. Ahora Gerardo nos acaba de contar que tenemos 410 mil ahora. Yo les garantizo que en el próximo registro vamos a abarcar el resto de la historia Argentina y vamos a tener record de trabajadores y trabajadoras de la construcción. (APLAUSOS).
Y, en verdad, créanme compañeros que aquél 10 de diciembre de 2019, cuando me tocó asumir la presidencia nunca pensé. Gracias compañeros, gracias. Aquél 10 de diciembre, les contaba, jamás pensé que íbamos a tener que afrontar todo lo que nos tocó afrontar. Sabía que teníamos que pagar una deuda, sabíamos cómo teníamos que hacer para discutir con los acreedores privados, para discutir con el Fondo Monetario, pero lo que no sabíamos era como se hacía todo eso en el medio de una pandemia. Y cuando eso empezó a pasar y la pandemia empezó a aflojar, todavía no se había ido, pero empezó a aflojar. Aparece una Guerra en el Mundo central, que condena a todo el mundo, también al Sur. Muchos se preguntaron: ¿Qué fue a hacer Alberto a Europa?. Fui a plantearles a los líderes europeos que estaban causando un daño enorme en el Sur del Mundo. En América, en África, en Asia. Que están generando una hambruna importante y que tenemos que terminar con eso. Miren, hemos padecido los efectos de una pandemia que se llevó más de 6 millones de vidas en el mundo. ¿Cómo no nos va a doler semejante cifra?¿ Cómo después de eso el Mundo puede ser capaz d entrar en una Guerra y seguir matando gente? ¿Y cómo puede ser que sanciones económicas condenen al Mundo a una hambruna? Nada de eso es posible.
Yo que sigo reivindicando la política, que sigo reivindicando la ética de la política y la primera razón ética por la que la política existe es generar sociedades igualitarias. Sociedades en las que todos tengan acceso a la educación, a la salud, y al trabajo. Y no voy a resignar esos principios de los que estoy convencido porque fui Peronista toda mi vida. Y fue lo que nos enseñaron Perón y Evita. (APLAUSOS).
Nosotros cuando pusimos en marcha nuestro plan, nuestro programa de Gobierno, no esperábamos tener que enfrentar tantos problemas como los que la humanidad debió enfrentar. Nosotros somos parte de esa humanidad. No estamos ajenos a esos problemas. Pero los enfrentamos, los enfrentamos con decisión. Los trabajadores de la UOCRA, empezaron a trabajar allá, cuando en marzo empezó la pandemia, y tuvimos que levantar hospitales. Tuvimos que levantar hospitales móviles para poder atender lo que nuestra sociedad reclamaba, después de que los que habían gobernado habían dejado el Estado en un estado paupérrimo, en una situación paupérrima. Pero no nos preocupamos por eso, le pusimos el pecho, lo único que sabemos hacer frente al problema, le ponemos el pecho y lo resolvemos. Y lo resolvimos. Y pudimos garantizar que a ningún argentino durante la pandemia le falte la atención médica que requería, cuando otros se jactaban de no abrir un hospital más en esta Provincia de Buenos Aires. Y no nos importó, lo hicimos, lo hicimos, y fuimos avanzando y fuimos superando nuestros problemas de la pandemia.
En nuestro programa económico, teníamos tres pilares en los que nos fundábamos. Queríamos que la Argentina crezca y que la Argentina se desarrolle. Queríamos un crecimiento igualitario en todas las regiones del país. Lo hicimos.
Hoy en la Argentina, ustedes lo saben, hay 4mil seiscientas obras en ejecución, a lo largo y a lo ancho del país. Infraestructura, esos son más caminos, esos son más agua potable, esas son más cloacas para que los argentinos y las argentinas vivan más dignamente, esas son más Escuelas Técnicas.
Sabíamos que había en la Argentina un déficit habitacional muy grande. Sabíamos que los problemas de la vivienda no los resuelve el mercado. Ahí tienen a las víctimas de los créditos UVA, que hasta el día de hoy estamos buscando la manera de ayudarlos a salir de ese problema. Y que hicimos nosotros, creamos un Ministerio que solo se ocupe de la vivienda de los argentinos. En dos años y medio, con una pandemia por medio, construimos más de 45 mil casas y les dimos esas casas a argentinos y argentinas que lo necesitaban. (APLAUSOS).
Hoy, en la argentina de hoy, tenemos más de 120 mil casas que se están construyendo en este momento. Y lo están construyendo ustedes, compañeros y compañeras. Compañeros y compañeras de todo el país, que están poniendo el hombro para levantar el techo de familias que lo necesitan.
Y hemos entregado 50 mil créditos, para que muchos hombres y mujeres puedan construir su propia casa en el terreno que tienen. Y ya los créditos no siguen en el aumento del dólar, los créditos siguen el aumento de los salarios. Y ninguna cuota puede crecer más de lo que crece un salario. Y por primera vez, los créditos Hipotecarios, que existen en la Argentina, los da el Estado Nacional, para que puedan acceder trabajadores y puedan pagarlos con sus sueldos. Y no someterlos a un futuro incierto, que los deja en el lugar de los que hoy están, los que tomaron aquellos créditos UVA.
La Argentina crece en su economía, cuando todos decían lo contrario. El año pasado crecimos 10.3. Hoy nos enteramos que con la primera proyección del primer trimestre, la Argentina va a crecer más de 6 puntos este año. Y eso significa, compañeros, garantizar el segundo pilar de nuestro proyecto. El trabajo, compañeros. Recuperar el trabajo en la Argentina, esa es una tarea central que debemos hacer. (APLAUSOS).
Cuando miramos para atrás y vemos el presente, hemos recuperado 1 millón cien mil puestos de trabajo formales en la Argentina. Son compañeros y compañeras. Argentinos y argentinas que hoy viven de un salario, que hoy tienen Obra Social, que hacen aportes jubilatorios. Que tienen la tranquilidad de encontrar su sustento diario en el trabajo que realizan.
Y tenemos también que asumir la otra realidad, que es la de la economía popular, que es otro dato de la realidad, en la Argentina. Yo celebro que trabaje la economía popular, junto con las CGT, porque lo que quiere la Argentina no es hombres y mujeres con planes sociales, quiere hombres y mujeres con trabajo. Eso es lo que quiere la Argentina. (APLAUSOS)
Y tenemos que trabajar seriamente para que todos tengan un trabajo, para que todos puedan tener un empleo, porque esos trabajadores sociales, esos hombres y mujeres de la economía popular trabajan, pero en condiciones de absoluta informalidad. Tenemos que sacarlos de ese lugar y ponerlos en el lugar donde tiene los derechos que tienen los trabajadores argentinos, en ese mismo lugar.
Estamos creciendo con la economía, estamos generando empleos, no está costando mucho que la distribución de ingresos sea justa, porque – como siempre pasa, en la Argentina – algunos acaparán ganancias en perjuicio de la mayoría, que trabaja. Miren, todo el Gabinete Nacional, cada ministro mío tiene una misión central que cumplir , en este momento, y es que el salario crezca y es que el bolsillo de los argentinos crezca y es que los salarios le ganen a la inflación, y es que recuperemos el salario de una vez y para siempre. (APLAUSOS).
Yo sé que no nos ha tocado el mejor de los mundos, que nos ha tocado un mundo muy difícil, lleno de dolor, que todos los días nos complica el escenario y sé también que eso puede ser una oportunidad para la Argentina: la crisis del mundo, pero también puede ser un problema, para la Argentina. Y ese problema debemos resolverlo seriamente, tenemos que trabajar todos empresarios y trabajadores para que en la Argentina el ingreso se distribuya de un modo más equitativo, de un modo más igualitario. No puede ser que nos jactemos de ser el supermercado del mundo – decían algunos - y en la Argentina haya gente, que no pueda comprar su alimento; no puede ser que los precios suban como lo hacen solamente por la especulación, que existe en un mundo en guerra, y porque gran parte del mercado de alimentos se ha retirado y ha dejado de ofertar.
Yo voy a estar – como les dije, en toda la campaña del 2019 – voy a estar al lado de ustedes. Yo sé qué intereses represento; cuando le dije a los jubilados que iban a dejar de pagar sus medicamentos, nunca más un jubilado o una jubilada volvió a pagar sus medicamentos; cuando yo les dije, que después de ver caer casi 30.000 Pymes - iba a trabajar para que la empresa, la industria, las Pymes vuelvan a nacer y crecer, en la Argentina, eso está ocurriendo, eso está pasando, eso está generando el empleo, del que hoy disfrutan todos ustedes. (APLAUSOS).
Vamos a seguir en el mismo camino y nadie nos va a tocer el brazo, porque estamos convencidos de cuál es la obligación, que tenemos. La primera obligación que tenemos – compañeros y compañeras –es con ustedes, con el pueblo argentino, con cada argentino y con cada argentina; la primera obligación es preservar los derechos que hoy tienen los argentinos y las argentinas y garantizar que nadie se los arrebate.
Déjenme decirles algo, en este momento, para que reflexionemos juntos: nos hacen discutir entre nosotros mucho, están todos pendientes de qué decimos uno del otro, pero miren, en verdad lo que estamos discutiendo, en la Argentina, es lo que queremos preservar los derechos que, desde 1945 hasta hoy, ganaron los que trabajan y los que quieren quitar esos derechos. Esa es la verdadera discusión, compañeros y compañeras, que nadie nos confunda; la verdadera discusión – se ve todos los días porque lo dicen al descubierto en los canales de televisión – están en los que quieren que, cuando un trabajador, sea despedido que nadie le pague una indemnización; están en los que quieren que las vacaciones dejen de ser pagas; están en los que cuestionan las obras sociales; están en los que dicen que no hacen falta universidades, en un mundo que cada día necesita más conocimientos. Compañeros: eso no somos nosotros, nosotros somos los herederos de Perón y de Evita, venimos a preservar los derechos de los que trabajan; nosotros somos los que nos ponemos al lado de los empresarios, que invierten, arriesgan y dan trabajo, en la Argentina. (APLAUSOS). Nosotros somos lo que preservamos la educación pública; nosotros somos los garantes de la salud pública. Eso es lo que está en discusión, compañeros, que nadie nos confunda, sigamos trabajando.
Pudimos sacarnos el tiempo necesario, las exigencias que la deuda, que el gobierno anterior nos dejó sobre las espaldas, pues bien, ahora trabajemos mucho, pongamos todo nuestro empeño, tengamos plena confianza de que estamos en el camino correcto, tengamos la certeza de que ha llegado la hora de corregir el ingreso, en la Argentina, para que los asalariados sean parte sustantiva de lo que se produce, en la Argentina. No tengan dudas, voy a trabajar incansablemente para que los salarios crezcan, para que los bolsillos de la gente se llenen, voy a luchar contra los que suben los precios, voy a luchar contra los que todos los días siembran la desesperanza y voy a sembra, cada día, en cada argentino y en cada argentina, la esperanza de que una Argentina mejor es posible.
Gracias compañeros, gracias compañeras. Muchas gracias. (APLAUSOS)