Palabras del presidente Alberto Fernández en la presentación del proyecto de ley “Cuidar en Igualdad”, Parque Colón, Casa Rosada
Buenas tardes a todos y a todas; muchas gracias, gracias por estar hoy aquí: siempre digo que la Argentina fue un país que se diferenció de muchos otros países del continente por la forma en que fue dando derechos, ampliando derechos y suelo contar - a lo largo de la historia - cómo esos derechos fueron dándose; empiezo por la educación pública, que tuvo en dos buenos liberales - como Alberdi, como Sarmiento - dos personas centrales para que esa educación pública se concretara.
Y Argentina empezó a ser distinta, porque – efectivamente – todos podían acceder a la educación. Pasaron los años y la universidad empezó a difundirse y allá, en el año 1918, la Reforma Universitaria permitió tener una universidad con libertad de cátedra, gobernada por profesores, por alumnos y por graduados. Pasaron los años, en materia educativa y Perón, un día dijo: “es hora de que los hijos de los trabajadores puedan llegar a la universidad” y así cumplió el sueño de tener mi hijo “el Doctor” e hizo gratuita la universidad y los hijos de los trabajadores pudieron también acceder a la universidad.
Creó, también, Perón en ese momento, la Universidad de los Trabajadores, que es hoy, la Universidad Tecnológica Nacional y entonces permitió que la educación llegue a todos y todas y que ya no sea el privilegio de unos pocos. Ese Coronel del Pueblo, por el que se llenó la plaza, que está detrás de este edificio, un día lo de detuvieron. ¿Saben por qué lo detuvieron? Porque empezó a reconocerle derechos a los que trabajaban y entonces, un día, los que trabajaban, en condiciones de explotación, tuvieron derecho a sindicalizarse, tuvieron derecho a un aguinaldo, tuvieron derecho a un salario, tuvieron derecho a discutir, con sus patrones el salario, tuvieron derecho a vacaciones pagas, tuvieron derecho a tener atención médica.
La Argentina, también se caracterizó por la salud pública, porque tuvo, en aquel mismo gobierno de Juan Perón, un personaje inmenso – que se llamó Carrillo – que llevó la salud pública a cada rincón de la Argentina y así, poco a poco, fuimos siendo diferentes. (APLAUSOS).
Cada vez que la sociedad argentina amplió derechos fue una mejor sociedad. Yo de esto estoy convencido, porque la historia lo demuestra, que así ha sido y qué es lo que nos hemos propuesto, desde el primer día, en que llegamos, a ampliar derechos, cuánto el pueblo más derechos tenga mejor pueblo será, cuánto más derechos tengan tendrá más facilidades para acceder a su progreso, cuánto más derecho tenga más se desarrollará ese pueblo. (APLAUSOS)
El día, en la campaña, del año19 - solía decir:” vamos a volver para ser mejores” y el día que asumimos, en un furcio dije:” volvimos para ser mujeres” y tal vez, en el fondo, lo que estaba diciendo: “es hora de igualar a las mujeres”. Todas las mujeres con los hombres y todas las diversidades con los hombres para que todos tengamos mejores derechos. Y, en verdad, no es que ahora estamos reconociendo los derechos de cuidado, pues los venimos reconociendo, desde hace mucho tiempo, porque sabemos cómo han cambiado las cosas y sabemos, también, que es momento que esas desigualdades se terminen.
Tuve que criar dos hijos: uno hace 27 años y otro lo estoy criando, con dos semanas, y créanme que todo es distinto, créanme que todo es distinto. (APLAUSOS). Lo digo por experiencia propia y gracias a Dios, que es distinto.
Ahora, cuando uno mira para atrás, yo les decía que en verdad nosotros siempre creíamos, que – definitivamente - hacía falta que el trabajo de la mujer, ese trabajo silencioso que nos hizo a nosotros lo que somos, a cualquiera de nosotros, cuando le preguntamos a quién le debés lo que sos, nuestra principal respuesta es: ”a mi madre” y a mi vieja nunca le pagamos nada. Esa es la verdad, le pagué con mi amor, con mi afecto y ella se llenaba de orgullo de mí, pero la verdad es que no le pagamos nada. Y esta pregunta que yo me hago se la hace cualquier varón y la respuesta es la misma. Nosotros creemos que ese trabajo silencioso y tan importante, que nos permite crecer como seres humanos, no puede dejar de ser atendido y dejar de ser reconocido y no puede dejar de ser remunerado. No puede, no puede ser y por eso, por ejemplo, no hace mucho tiempo atrás con Fernanda resolvimos que cada mujer por hijo que haya tenido se le computara ese hijo como año de servicio, y es una forma de acercarla a la jubilación. (APLAUSOS) Y eso es reconocer la tarea de servicio que cada madre tiene, los derechos del cuidado, la tarea del cuidado que ella ha tenido. Eso es amor y es trabajo compañera y por eso lo estamos reconociendo.
Ahora en el Ministerio de Acción Social existe desde hace mucho tiempo un Dirección Nacional de Cuidados (Dónde está la Directora de cuidados… allá está) Bueno, allí funciona un registro de trabajadoras para el cuidado. Esa dirección de aquella compañera ya ha capacitado a 10 mil compañeras en distintas Universidades, preparándose para las tareas de cuidado, ya lo ha hecho. Es el trabajo solidario de muchas organizaciones de la economía popular que allí ayudan a la Argentina a tener el cuidado que los mayores o los chiquitos están necesitando.
Lo cierto es que el RENATEP, hoy tiene 500 mil personas registradas para los trabajos de cuidado. Lo cierto es que en este tiempo 10 mil personas se capacitaron para trabajos de cuidado para distintas universidades del país. Entonces ellos dicen: y si hicieron todos eso ¿para qué es esta ley? Para que no quede en la vocación política de un Presidente o de una Ministra, para que esto se vuelva un derecho permanente en toda la Argentina y gobierne quien gobierne esto sea respetado. Para eso lo hacemos. Para que la suerte de las mujeres y los derechos de la igualdad no queden en una declamación política. Se conviertan en derechos, se conviertan en leyes. Que son leyes perennes que no se pueden modificar graciosamente. No se trata de un decreto que el que me siga o la que me siga pueda derogar porque se le da la gana. Se trata de una ley que necesita juntar mayorías y estoy seguro que ese colectivo de mujeres que revolucionó la Argentina no va a dejar que las leyes se modifiquen para retroceder. Estoy absolutamente seguro.
Por eso, para mí, este proyecto es muy importante porque sigue la senda de lo que yo y el Gobierno y todos nosotros y nosotras planteamos. La necesidad de seguir ampliando derechos. La seria necesidad de reconocerle a la mujer que cuidan, lo que representan para el desarrollo social ese cuidado y reconocerlo. También en otro concepto de familia que se ha ido construyendo con el correr del tiempo, donde la obligación ya no es de la madre, es de la madre y el padre y donde en conjunto hay que atender las necesidades de los hijos y hay que prestar la atención que los hijos requieran. Ese es el tiempo distinto que yo dije, que he experimentado al cabo de 27 años. Pero lo cierto es que es así y por eso estamos ampliando las licencias por maternidad y por paternidad. Y por eso también estamos ampliando los derechos también para los adoptantes, para que los adoptantes tengan el tiempo que necesiten para poder vincularse adecuadamente a sus hijos y a criarlos adecuadamente.
Hoy es un día importante porque estamos elevando al Congreso Nacional este proyecto de Ley, que es el resultado del trabajo conjunto, que es el resultado de la experiencia conjunta que tuvimos como sociedad, que es un avance en la ampliación de derechos, que por lo tanto es un avance en la calidad social en la Argentina. Ahora le queda al Congreso, cuanto antes avanzar en que esta ley sea posible. Yo lo abrazo a Sergio, porque sé que Sergio tiene en su casa a alguien que va a serle necesario para que esto salga rápido, que es Malena, que es una gran luchadora de todos los derechos de la mujer.
Así que, hoy estamos dando un paso importante, que estoy seguro que el Congreso va a acompañar. Y el día que el Congreso saque esta Ley será un día de festejo ¿saben por qué? Porque en la Argentina habrá más derechos y una sociedad con más derechos es una mejor sociedad. Gracias a todos y todas. Feliz día del trabajador, feliz día de las trabajadoras. Feliz día del trabajador y la trabajadora al trabajador y la trabajadora de la Economía Popular también. Abrazo a todos y mi cariño de siempre. Muchas gracias.