Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández, por la entrega de un avión Pampa III a la Fuerza Aérea, en la Planta de la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA), Córdoba
Buenos días a todos y todas, gracias Gobernador por recibirme en su provincia, gracias Ministro por el trabajo, y las gracias también a Mirtha por el esfuerzo.
Bien decía Agustín que, cuando lo convoqué para que se hiciera cargo del Ministerio de Defensa, la verdad es que el escenario era complejo, porque entre otras cosas esta fábrica llevaba prácticamente inactiva, porque muchos de los proyectos que se habían montado hasta el 2015, se desmontaron después de esa fecha. La verdad es que nos alentaba mucho saber que podíamos tener una cúpula que condujera a las Fuerzas Armadas, que habían egresado en sus carreras oficiales ya en democracia. Y eso nos animaba a pensar en otras Fuerzas Armadas, absolutamente consustanciadas con el proyecto de país y de institucionalidad que nosotros proponemos. Nos preocupaba también cómo ordenar y cómo darle calidad a trabajo de nuestros oficiales y suboficiales de las diferentes fuerzas, y fuimos corrigiendo los problemas salariales que durante tantos años se arrastraron, y fuimos ordenando tema que había hecho que los hombres y mujeres que son parte de nuestras Fuerzas Armadas vieran cómo sus ingresos fueron postergándose y sus salarios fueron convirtiéndose en espacios negros, donde los aportes no llegaban a la hora los necesitaban. Y en aquel entonces, Agustín me dijo “mirá, yo dejo presentado en el Congreso un proyecto que sería muy importante, que es un Fondo para la Defensa”. Es un Fondo que definitivamente tiene que servirnos, para poder desarrollar las fabricaciones militares, y todo lo que tiene que ver con la industria de la Defensa. Y le dije “bueno, pongamos en marcha ese proyecto”, para que el Congreso lo apruebe, para que finalmente podamos disponer de esos recursos y garantizarnos lo que realmente queremos hacer, que es no solamente profesionalizar al máximo a nuestras Fuerzas Armadas, a nuestros hombres y mujeres, sino también ser capaces de desarrollar una industria en torno a la Defensa nacional. FAdeA, es en ese sentido, un emblema de todo hecho, lo ha dicho Mirtha en su discurso de modo cuidado, detallado, haciendo historia de lo que ocurrió en estos andares y galpones de trabajo, del Brigadier San Martín en adelante.
Y también lo que estamos viendo es que ese esfuerzo de haber sancionado el Fondo, no fue en vano, porque lo que estamos viendo hoy es cómo acá se reacondicionan aviones del tamaño de la dimensión de los Hércules. Contaba recién el Ministro que pudimos captar esa tecnología después de un primer… ¿Service se dice? De los aviones Hércules en Dallas, y después vimos cómo se están reacondicionando los Pucará que también quedaron olvidados en todos estos años. Y hoy vemos cómo el Pampa vuelve a volar en una nueva versión, donde todo su instrumenta se ha digitalizado y donde se ha incorporado gran parte de ese trabajo que en materia de radarización, como bien contaba Agustín, fue capaz de hacer el INVAP. Yo me acuerdo que, cuando llegué con Néstor a Gobierno, de repente empecé a recibir visitas y propuestas para que le compremos a diferentes empresas, los radares. Y nos decían que toda la Argentina estaba sin radares en la frontera norte, y que eso era un peligro inmenso. Entonces, lo convoqué al Gerente General del INVAP, y le planteé la preocupación que teníamos y me dijo “yo creo que nosotros podemos hacerlo”. Y allí empezó un desarrollo que nos permitió radarizar a la Argentina, seguir a adelante con el proyecto de radarización, y hacer lo que dijo recién Agustín, de que como producto de que ese trabajo se convirtió en trabajo en serio, hoy en día es un exportador de radares y está compitiendo con el mundo, aportando la tecnología que en Argentina se desarrolló.
Y hoy un poco es el desafío que tenemos un poco en FAdeA y que tenemos en Argentina toda, ver la manera en que la Argentina crece, desarrolla su industria, cómo somos capaces de desarrollar tecnología porque, cuando uno habla de partes de un avión, están hablando de un proceso de producción de esas aeropartes, absolutamente cuidadas, que exigen una tecnología de altísima calidad, y ver cuántas piezas hoy, me lo mostraban recién, del Pucará y del Pampa se producen en Argentina, es una enorme tranquilidad. Y saber que podemos ir aumentando la producción de esas aeropartes en Argentina, lo que nos garantiza es ganar en autonomía como país, ganar en autonomía de los fines de la producción de la defensa nacional. Todo esto, además, tiene una segunda consecuencia que a mayor producción mayor trabajo y, bien dice le Gobernador, “el trabajo es lo que más dignifica a un ser humano”, y garantizar el trabajo y el empleo es para nosotros el modo cierto de lograr el progreso social que anhelamos. Yo siento que hoy estamos dando un paso muy importante, muy importante y estamos poniendo en valor dos cosas. Estamos poniendo en valor la importancia de la Defensa nacional, a los hombres y a las mujeres que son parte del trabajo cotidiano de la Defensa nacional, en cualquiera de las tres Fuerzas. Estamos poniendo en valor el desarrollo industrial y tecnológico de la Argentina, que es algo muy importante en los tiempos que vivimos. Me han escuchado, ahí lo veo al Rector de la Universidad de Córdoba y alguna vez lo hablamos con él, lo que hoy en día hace rico a los países es desarrollar la ciencia, la inteligencia y la capacidad y la tecnología, la capacidad tecnológica. Eso hace a una sociedad fuerte, pujante, en los tiempos que vivimos. Y yo creo que estamos dando un paso en los dos sentidos, estamos… hay un tercer punto que ya lo dije antes, que todo esto genera trabajo, genera producción y eso es el objetivo final de todo nuestro proyecto. Y creo que esos tres objetivos mancomunados dan cuenta de que podemos seguir avanzando aún en tiempos tan difíciles como los que nos toca gobernar. Recién decía bien Agustín, tuvimos veinte días de diciembre, enero, febrero y diecinueve días de marzo y después el mundo se dio vuelta, y todo lo que proyectábamos parecía que pasaba a un segundo lugar porque otras prioridades, nada más ni nada menos que el cuidado de la salud y la vida de nuestra gente, ocupaban nuestros esfuerzos. Pero, a pesar de que dedicamos mucho por cuidar la vida y la salud de los argentinos, pudimos seguir avanzando en proyectos como este. Y esto lo que demuestra es que la Argentina no se detuvo, la Argentina siguió progresando, la Argentina siguió avanzando. De acá nos vamos a inaugurar una ruta muy importante para el desarrollo también de Córdoba y Santa Fe, y seguimos trabajando y pusimos de vuelta de pie toda la obre pública para que la Argentina federal esa con la que yo sueño tenga la conectividad que necesita en términos de transporte. Con lo cual, creo que hoy estamos dando un paso muy importante Agustín, estamos cumpliendo con aquel desafío que te autoimpusiste, y yo lo celebro tanto que me acompañes en el Gobierno, y me pone contento ver que otra vez la industria para la Defensa vuelve a tener un lugar central en la estrategia argentina, porque la defensa nacional no es un tema menor es un tema central, es un tema central. Y tener a los mejores oficiales, y tener la mayor profesionalidad de nuestra gente, y haber sido capaces de desarrollar una industria de esta magnitud, la verdad habla muy bien de lo que podemos hacer los argentinos y las argentinas.
Así que, dándole las gracias, felicitando a Mirta y dándoles las gracias a todos y todas, a todas las trabajadoras y a los trabajadores. allí he visto esto que contaba recién Agustín que también como parte del trabajo de FAdeA, acá empezaron hacer los paracaídas que puedan necesitar nuestras Fuerzas para poder operar. Y parece una cosa secundaria, pero que si no lo hacemos acá tenemos que importarlas, y la verdad que somos la segunda fábrica en América Latina que es capaz de producir paracaídas y yo lo celebro. Cada cosa que se produce en Argentina es un dólar que deja de irse y eso es muy importante en los tiempos que vivimos, porque hemos recibido un país enormemente endeudado, con muchísimas carencias y, además, frenado en la lógica productiva, frenado en la lógica productiva. Es muy penoso ver como muchos proyectos que se habían encarado antes del 2015 de repentinamente fueron frustrados y frenados por decisión política de no invertir en esos temas, temas tan importantes como los que acá estamos hablando, pero, bueno, estamos poco a poco volviendo a poner las cosas en orden en un tiempo muy difícil y complejo, en un tiempo que vamos a superar, un tiempo en el que vamos a recuperar la alegría, en un tiempo que a medida que el proceso de vacunación se incremente vamos a ir recuperando la habitualidad de nuestra vidas, y vamos a poder empezar al ritmo que nos hubiera gustado haber desarrollado este año y medio y que lamentablemente la pandemia y el mundo nos impidió actuar, pero vamos a hacerlo, estoy seguro. La Argentina muchas veces, muchas veces se cayó, producto de las decisiones de sus gobernantes y esta vez sufrió un golpe muy duro porque el mundo entero sufrió un golpe muy duro, pero, así como nos levantamos otras veces vamos a volver a levantarnos otra vez.
Así que gracias a todos y todas y felicitaciones por todo lo que aquí hacen. Muchísimas gracias (APLAUSOS)