Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández, durante el anuncio oficial, junto a su par de la Federación Rusa, Vladimir Putin, del inicio de la producción de la vacuna Sputnik V, en Argentina, por parte del laboratorio Richmond
Muy bien, señor Presidente de Vladimir Putin, muchas gracias realmente por darnos esta posibilidad de participar, en mi caso por segunda vez en el Foro de San Petersburgo. En verdad, Argentina ha sido el primer país, en América Latina, en aprobar la vacuna Sputnik V y el segundo en el mundo y la verdad que estamos muy conformes con los logros que hemos alcanzado vacunando a nuestra gente, con la vacuna salida del Instituto Gamaleya, y financiada por el Fondo Soberano de la Federación Rusa.
Para nosotros, ha sido muy valioso porque millones de argentinos han visto preservar sus vidas, gracias al desarrollo científico de Rusia, en el que siempre confiamos. Rusia es un país, que ha sabido desarrollar la investigación, la ciencia y la tecnología como los países más importantes del mundo y nosotros siempre tuvimos confianza en esa capacidad rusa para el desarrollo de una vacuna tan importante y que tanto esperaba el mundo.
Argentina y Rusia tienen una historia común, que ya cuenta con 136 años de amistad, pero hace 6 años Rusia y Argentina tienen un vínculo estratégico para poder desarrollarse mejor y combinar el esfuerzo de ambos países en la búsqueda del desarrollo de nuestros pueblos. Y en eso – la verdad – la pandemia nos ha dado una gran oportunidad para que ese encuentro de la comunidad rusa y de la comunidad argentina, del Gobierno ruso y del Gobierno argentino se profundice y se afiance mejor que nunca. Y en eso, recuerdo que, en aquella primera reunión, que tuvimos del G20, yo planteé la necesidad de que el mundo pueda acceder a la vacuna como un bien global y que seamos capaces de llevar el auxilio de los países más desarrollados y que podían acceder a la definición de la vacuna, que pudieran llevar todo eso, todo ese conocimiento y trasladarlo a aquellos que estaban más necesitados: los países de renta baja y los países, como Argentina, de renta media. Solamente, en los países de renta media se concentra el 63 por ciento de la pobreza, del mundo. Así que dense cuenta lo importante que es poder contar con ese bien global, que era la vacuna.
Y para mi alegría – en aquella Reunión del G20 - el Presidente Putin siguió exactamente la misma lógica que yo había planteado y me sentí muy acompañado y cuando llegó el momento y pudimos acceder a la vacuna - desarrollada por el Instituto Gamaleya - vimos con alegría la oportunidad, pudimos conocer en profundidad la investigación y el desarrollo alcanzado y con el enorme apoyo del Fondo Soberano de Rusia un número muy importante, el número mayoritario de los argentinos vacunados, hoy, hayan logrado la inmunidad gracias a la vacuna de Sputnik V.
Y entonces, yo lo celebro y lo agradezco sinceramente, que el pueblo argentino, el Gobierno argentino, este Presidente – créame Presidente Putin – le estamos inmensamente agradecidos.
Decimos, en la Argentina, que los amigos se conocen en los momentos difíciles y cuando pasamos un momento difícil, el Gobierno de Rusia, el Fondo Soberano de Rusia, y el Instituto Gamaleya estuvo al lado de los argentinos ayudándonos a conseguir las vacunas, que el mundo no nos estaba dando. Desde ese lugar de gratitud quiero enviarle un sincero abrazo.
Estoy muy feliz, además, porque hoy empezamos ya el trabajo concreto para empezar a producir, en la Argentina, la Sputnik V. el día domingo – si Dios quiere – un avión estará partiendo de Moscú, trayendo el principio activo para que empiece, de inmediato, la producción, en la Argentina, principio activo que el Instituto Gamaleya nos proveerá, y junto con ese principio activo vendrán vacunas para Argentina y también traeremos vacunas para el Paraguay, del mismo modo, que – en su momento – trajimos vacunas para Bolivia, y del mismo modo que tratamos de acercar a México y a Rusia para que encuentren un acuerdo para que la vacuna de Gamaleya, la vacuna Sputnik V termine llegando también al pueblo mexicano.
Con la tranquilidad de poder estar alcanzando este logro, con el agradecimiento por el compromiso, que ustedes han demostrado, quiero despedirlo con el deseo de siempre de poder darle la mano y mirándole a los ojos darle las gracias por el compromiso, que ha tomado con mi Patria.
Muchas gracias, Presidente Putin.