Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández, durante la videoconferencia con el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, desde la residencia de Olivos

Muchas gracias mi querido Andrés Manuel, de verdad, de corazón gracias: vos sabés que hoy celebramos, en Argentina, el 25 de mayo, que para nosotros es una fecha muy importante, porque es el día que inició el camino de la independencia argentina, de la corona española.

Un 25 de mayo de 1810 algunos patriotas aprovechando que Fernando VII había caído, ante el imperio de Bonaparte decidió independizarse, más que independizarse generar un gobierno propio argentino para regir las tierras de lo que era el Virreinato del Río de la Plata y allí empezó un momento de la historia argentina, que culmina en 1816, cuando declaramos definitivamente nuestra independencia.

Independencia quiere decir poder valerse por sí mismo, no depender de otros y poder ser – como dijo Perón, alguna vez – artífices de nuestros propio futuro y la verdad es que yo me siento – Andrés Manuel – con este anuncio que estamos haciendo estamos siendo más independientes México, Argentina y América latina, porque ese acuerdo que hicimos, allí donde se inicia, en el Norte de Latinoamérica y donde termina, en el Sur, la América latina, ese acuerdo lo que va a permitir es que mexicanos y argentinos hayan unido el esfuerzo, el trabajo conjunto para tener vacunas, para mexicanos y argentinos, pero también para todos nuestros hermanos latinoamericanos y eso es un punto de arranque importantísimo que, de verdad, nosotros debemos poner en valor y darle la dimensión exacta que tiene.

Días atrás, hablaba con el Presidente Macron, que visité allí en París, él siempre tan amable y afectuoso conmigo y hablábamos de las dificultades que teníamos todos los países del mundo, que no producíamos vacunas, de conseguir vacunas; nosotros producíamos una parte de la vacuna, el principio activo, pero necesitamos que esas vacunas culminen en producción, no solamente en su envasamiento, sino en terminar de producirla y envasarla y allí, encontró AstraZeneca y Oxford, con el apoyo de la Fundación Slim, un laboratorio Liomont, allá en México, para terminar esta tarea.

Y es el esfuerzo de nuestros científicos, de nuestros trabajadores argentinos y de los científicos y trabajadores mexicanos lo que permite, que hoy, podamos estar anunciando esto y créemelo yo lo recibo con mucha alegría, porque es independencia nuestra, independencia de poder hacer nuestras vacunas, de poder tener nuestras vacunas, de no tener que andar pidiendo, al mundo, que nos escuche para llevar inmunidad a nuestros pueblos, de este virus tan maldito que tanto daño nos ha hecho. Y yo celebro además – crémelo y lo digo de corazón – que vos estés en esto, que esto lo pueda hacer contigo por la admiración y el respeto que te tengo y sabés cuán amigo me considero tuyo.

Por lo tanto, es casi la imagen perfecta, dos pueblos hermanados, el más norteño de América latina y el más sureño de América latina, hermanados con dos gobiernos que piensan parecidos, que valoran la ética del mismo modo, que valoran la honestidad y la gestión pública del mismo modo y que se comprometen con los que más necesitan de cada uno de sus pueblos del mismo modo.

Con esa alegría recibo esta noticia y con esa alegría creo que la van a recibir todos los latinoamericanos, que están necesitando, que entre todos podamos lograr este objetivo. Alguna vez, había un caudillo santafesino, acá en Argentina, que le escribió a San Martín preocupado por las dificultades, que tenían para ayudar en ese proceso de independencia que Argentina vivía, y San Martín lo único que le contestó fue: “no tema – Don Estanislao López, era el nombre del caudillo santafesino – no tema, porque unido somos invencibles”. Y esto es lo mismo que creo yo, que América latina unida es invencible, América latina unida es capaz de generar las soluciones, que necesita generar para que sus pueblos vivan mejor, en un tiempo – como el que estamos pasando – sobrelleve mejor semejante pandemia.

Así que, Andrés Manuel, desde acá de Buenos Aires, espero verte pronto, si es que en breve me dijo, Marcelo Ebrard, tu querido Canciller, que vamos a tener una Reunión de CELAC y espero verte pronto, allí, abrazarte, decirte – una vez más – cuánto te aprecio, cuánto te valoro y cuán importante sos para América latina y seguir trabajando juntos, como lo estamos haciendo, hoy. Y de verdad, gracias por este 25 de mayo, que nos hacés vivir a los argentinos, que es un 25 de mayo, donde nos sentimos un poco más independientes. Gracias de corazón.