Palabras del Presidente de la Nación, Alberto Fernández, en el lanzamiento del Plan DetectAR federal, en la Ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe

Buen día a todos y a todas, siempre es grato estar en Rosario, más allá de que esta no es la mejor circunstancia, pero gracias Pablo por la recepción, gracias mi querido Omar por la recepción.

Hoy estamos enfrentando parte del problema que venimos enfrentando ya hace muchos meses, que no lo enfrentamos los argentinos solos, lo enfrenta la humanidad. Decía anoche, hablando con un grupo de empresarios, que en realidad nosotros somos parte de una generación a la que le ha tocado vivir algo, que ninguna otra generación ha vivido, una generación que tiene que enfrentar una pandemia y definitivamente no registra antecedentes previos, no tenemos padres que nos hayan enseñados a vivir cómo enfrentar un virus que se méteme en la sociedad, contagia, lastima, daña enormemente, daña enormemente. Y seguramente confiamos en que seamos nosotros la generación que tenga que soportar esto y que nuestros hijos, y quienes nos sucedan, no tengan que enfrentar nunca más esta incertidumbre de tener que combatir un ser imperceptible a la vista humana y que puede hacer tanto daño a la vista humana, ¿no? A la vida humana.

Cuando todo esto empezó, todos nos preocupamos mucho por el Área Metropolitana de Buenos Aires, el AMBA sin duda tiene una concentración demográfica que hacía sumamente riesgosa, sumamente riesgosa la posibilidad de que allí el contagio se multiplique, nos preocupamos además de que el resto del país se prepare para lo que podía ocurrir. Yo nunca olvido que un líder europeo me contó, cuando todo empezó en Europa, me dijo “mirá, es un virus muy perverso, cuando te saca un metro de ventaja no lo alcanzás más”. Eso fue lo que me planteó. Y la verdad me quedó grabado y desde entonces estuve preocupado por tratar de prevenir que eso no ocurra, pero lamentablemente el virus circula. Lo que hicimos fue garantizarnos que a ningún argentino, que el virus afectara, pudiera quedar objetivamente la atención sanitaria que merecía. Y eso lo hemos logrado, hemos invertido más de 10 mil millones de peso en toda la Argentina, en el Interior del país, tratando de llevar soluciones hospitalarias. Hemos construido más de sesenta hospitales modulares y de los otros, y hemos puesto en el Interior del país más de 3 mil camas. Y esto lo que nos garantizó es que a nadie le falte una cama, y que todo argentino que enfrente el virus y enfrente la enfermedad tenga la posibilidad de encontrar en el Estado una respuesta de atención médica. Y eso a nosotros nos da una gran tranquilidad, porque eso lo hemos logrado, lo hemos logrado. En los lugares donde esto no ocurrió, las muertes se multiplicaron por dos, hasta por tres, porque los sorprendió la pandemia sin tener la adecuada cantidad de hospitales, de camas de terapia intensiva. Esto gracias a dios lo hemos resuelto.

Ahora, ¿qué es lo que nos está pasando? Si nosotros miramos lo que pasaba hace dos meses atrás, el 95 por ciento, 93 por ciento, de los contagios ocurrían en el AMBA y solamente el 7 por ciento ocurría en el Interior del país. Hoy a la mirábamos con Ginés, aproximadamente el 65 por ciento de los casos hoy ocurren en el Interior del país y el AMBA quedó reducido alrededor del 35 por ciento. Eso lo que nos obliga es a prestar atención a una nueva realidad que es que el contagio ingresó al Interior del país. Ciudades como Santa Fe que durante setenta días, digo bien, no tuvieron un solo caso, hoy enfrentan casos, y los pueden contener porque el sistema sanitario está preparado para hacerlo. Pero la realidad es que tenemos que estar muy atentos, porque el problema de diseminación del virus es enorme, y porque es un virus que, como me dijeron aquella vez, “nos saca un metro de ventaja y es muy difícil contenerlo”. Y por eso todo este tiempo no fue en vano, todo este tiempo para nosotros es un enorme aprendizaje. Y una de las cosas que aprendimos es que si podemos detectar a los que están infectado, las posibilidades de que ese virus nos gane, ese metro de ventaja disminuye claramente. Y es exactamente lo que estamos haciendo hoy.

Hoy estamos inaugurando otra forma de testear, que nos permite conocer en el acto quién está infectado y quién no, y cuándo alguien esté infectado poder de algún modo aislarlo del resto para que no siga contagiando. Esto que llamamos el DetectAR federal lo que nos permite es multiplicar por tres la capacidad de testeo que hoy teníamos, vamos por esta vía a lograr que por cada día tengamos alrededor de cien mil test diarios en Argentina. Y esto nos va a dar, insisto, mucha tranquilidad, mucha tranquilidad, porque nos va a permitir ver quién se ha contagiado y aislarlo para evitar que contagie a otros. Y en el mientras tanto, bien decía Omar, lo que hay que entender es que el virus no tiene mucho secreto, el virus lo que reclama es que nosotros nos acerquemos, tomemos contacto con el otro, y de ese modo transmitir el contagio del uno al otro. Por lo tanto, el aislamiento sigue siendo la mejor forma de preservarnos. Y esto es algo que le pido puntualmente a los mayores de 65 años, a los que tienen enfermedades prevalentes, porque son las personas de mayor riesgo, y está visto que el virus cuando ataca, alrededor de más del 80 por ciento de las personas que han fallecido, a las que recuerdo siempre, esas personas tenían más de 70 años, y son personas que evidentemente la fortaleza física no les permitió sobrellevar la enfermedad. Por lo tanto, preservar el aislamiento de esos sectores de la sociedad, la de nuestros mayores adultos, de las personas que tienen enfermedades prevalentes, es definitivamente un mecanismo que nos permite garantizar la vida de esas personas. Y por mucho que nos cueste, yo le pido es que tengan presentes, porque la verdad es que el sistema médico no nos da otra oportunidad más que el aislamiento para prevenir la enfermedad.

Y yo quise lanzar este Plan, que tiene el propósito de extenderse al interior del país, acá en Rosario porque Rosario lo está necesitando, porque Rosario es el sector done más irradió el AMBA el contagio, y por eso quisimos empezar por esta ciudad. Y tenemos que encarar este tiempo como encaramos la pandemia al comienzo de todo, unidos, sin distinciones políticas, porque lo que nos están reclamando los santafesinos, en este caso, y los rosarinos en particular, es que trabajemos por ellos, para preservarles la vida, para preservarles la atención médica que necesitan. Y para eso nosotros tenemos que estar más unidos que nunca, más unidos que nunca. Y por eso estoy acá.

Rosario tiene además en este momento otros problemas, tiene el problema de los humedales que los escucho perfectamente reclamar, y ese problema de los humedales ha generado que muchas islas se incendien a veces por la seca, a veces por la baja del río, a veces porque alguien lo hace intencionalmente. Esas quemas que padece Rosario, esa humareda que padece Rosario, obviamente tenemos que trabajar para ver la manera en que nunca más se repitan en el futuro, claramente. Es cierto que hay una seca que ha favorecido esas quemas, no solamente lo padece las islas que están frente a Rosario, el norte de Córdoba lo está padeciendo y hemos puesto todo nuestro apoyo de brigadistas y de aviones hidrantes, tanto a Córdoba como Santa Fe, para ayudar apaciguar ese fuego, a apagarlo y a hacer que la vida de los rosarinos no se vea alterado por el humo cotidianamente. Pero lo que tenemos que trabajar en el futuro es además perseguir penalmente, judicialmente, los que generan esas quemas. Y para eso tenemos que ser inflexibles, inflexibles. Eso daña el medioambiente y daña fundamentalmente la vida de los rosarinos que no tienen por qué tolerar eso. Así que vamos a trabajar como estás haciendo ahora Pablo, como estás haciendo ahora Omar, juntos, muy juntos, para apagar el fuego que se ha incendiado. Pero ahora lo que tenemos que hacer es ser muy estrictos y detectar los que generan los incendios, cuando los incendios los genera alguien, y ser implacables judicialmente con ellos.

Hay un segundo problema que yo me comprometí la última vez que estuve en Rosario a trabajar con los rosarinos, que es el problema de la seguridad. Rosario tiene acá un foco de inseguridad cierto, tiene que ver con el crimen organizado. Hace pocos días lanzamos un plan para el Área Metropolitana de Buenos Aires, fundamentalmente para el Gran Buenos Aires de la Provincia de Buenos Aires, y ahí anuncié que íbamos a seguir con ese plan hacia el interior del país. Acá hemos dispuesto en este momento alrededor de 3 mil efectivos de las Fuerzas de Seguridad para que colaboren en Santa Fe. Hemos incrementados en más de sesenta vehículos entre automóviles, camionetas, motonetas para que nuestra Fuerzas de Seguridad puedan vigilar y ayudar, y colaboraras con las Fuerzas locales. Y he dispuesto esta mañana destinar 3 mil millones de pesos a la provincia de Santa Fe, para que lo destine exclusivamente a la atención de lo que se necesite para mejorar las condiciones de seguridad. Y yo le pido al Gobernador que le preste atención a Rosario, porque me parece que acá hay un foco que debemos ir directamente y ayudar en todo lo posible con recursos a las Fuerzas, para que las Fuerzas puedan actuar adecuadamente. Ahí nosotros hemos mandado, me miro acá en estrago que es mi pelo con el viento, nosotros hemos mandado al Congreso una Ley, que propone una reforma en la Justicia Federal, vuelve el sistema acusatorio para la Justicia Federal, y que crea tribunales como me comprometí en ese momento aquí en la zona de Rosario. Sería muy bueno que el Congreso trate eso porque eso acá está haciendo falta y eso va a ayudar mucho al combate del crimen organizado, que es precisamente la materia central de la Justicia federal.

Así que dicho todo esto, quiero decirles a los rosarinos y las rosarinas, y a los santafesinos y santafesinas, que estoy acá con el compromiso de siempre, poniéndome al frente en la lucha de esta pandemia, poniéndome codo a codo a trabajar con ustedes, sin preguntarles de dónde vienen, preguntándoles a dónde quieren llegar. y si quieren llegar al mismo lugar que yo, que es poner a la Argentina de pie, reconstruir la economía argentina, y tan pronto podamos ponerla en marcha para que toda nuestra fuerza productiva funcione al máximo, por favor, abracémonos y trabajemos juntos. Para eso estoy aquí. Vamos a hacerlo, lo hicimos muchas veces, vamos a hacerlo una vez más.

Gracias a todos y todas, gracias a Santa Fe, gracias a Rosario. Muchísimas gracias. (APLUSOS)