PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, EN LA 55° CUMBRE DE JEFES DE ESTADO Y ESTADOS ASOCIADOS DEL MERCOSUR, EN BENTO GONÇALVES, RIO GRANDE DO SUL, BRASIL
Bom dia, hasta ahí llegó el portugués.
Pero realmente estoy muy contento de estar hoy aquí los queridos amigos y líderes latinoamericanos, otras autoridades en general, en este maravilloso lugar de Brasil que no conocía, una geografía realmente espectacular. Quiero felicitar a mi amigo el presidente Jair Bolsonaro por la hospitalidad y especialmente por los logros en su presidencia pro tempore. Y también decir que, bueno, en esta especial reunión para mí porque es la última, por lo menos de estos cuatro años, es una gran satisfacción participar y decirles que el Mercosur ha sido una de las grandes apuestas de mi Gobierno y de los argentinos. Tengo la buena noticia decirles que el 70 por ciento de los argentinos creemos que una integración inteligente al mundo es algo que nos va a ayudar a desarrollarnos, con lo cual a lo que invito es a que sigamos apostando todos a este trabajo que venimos realizando.
Y este espacio es un eje central en la proyección internacional de mi país, y por eso hemos tratado, en estos años, de fortalecer y modernizar el bloque; un bloque esencial para el futuro de nuestros países. En estos años hemos avanzado como hace décadas, hace décadas no se hacían, consolidando una relación franca, transparente, de confianza, ese elemento tan fundamental en la vida de las personas, y también fortaleciendo esta amistad histórica y por supuesto con transparencia porque la transparencia es lo que fortalece la cooperación. Le dimos un renovado y ambicioso impulso a nuestra gente interna y externa, e impulsamos acciones y logros concretos en beneficio de nuestra genta de la producción regional. Como decía el presidente Bolsonaro, el presidente Abdo Benítez, los acuerdos históricos con la Unión Europea y con el EFTA son hitos que nos brinda oportunidades, pero nos brindan una hoja de ruta a partir de la cual podemos progresar, mejorar nuestras productividades, nuestro comercio, nuestro intercambio, y que tiene que claramente y va claramente (salto de audio) calidad de vida a nuestros pueblos. Como les expresé en la cumbre pasada en Santa Fe, Argentina, la agenda de competitividad que tenemos por delante es impostergable, tenemos que prepararnos, gobiernos, empresas y sociedad civil, para poder obtener el máximo beneficio de estos avances que estamos logrando.
El Mercosur debe continuar profundizando la negociación de acuerdos, tenemos muchos en cartera, que nos permitan insertarnos mejor en la economía global, mejorando la competitividad en nuestras economías y nuestra participación en los flujos de comercio e inversiones. También necesitamos seguir avanzando en nuestra integración productiva, atrayendo inversiones que promueven a la participación de las pymes en las cadenas globales de valor. Todos sabemos la importancia que tienen las pequeñas empresas a la hora de generar trabajo en este futuro tan competitivo que tenemos por delante y es el único camino, es el único camino genuino para reducir la pobreza.
Durante este tiempo construimos más redes de comunicación confiables, mejores procedimientos aduaneros y lanzamos proyectos de infraestructura fundamentales para el desarrollo del bienestar de los mercosureños, que nos va a permitir dar un salto de calidad en nuestra integración. Tenemos que también seguir insistiendo con un Mercosur ampliado con los socios regionales que quieren trabajar con nosotros, y para seguir construyendo cadenas regionales de valor y con una gran área económica latinoamericana, como lo hicimos en estos cuatro años en la convergencia con los países de Alianza del Pacífico. El potencial de nuestra región es enorme, la cooperación y el trabajo en conjunto es lo que América Latina necesita para lograr un desarrollo justo y sostenible en el siglo XXI.
Todavía queda mucho por delante, es necesario hacer más para que los beneficios de integrarnos lleguen a todos. Por eso es necesario continuar poniendo la mirada en el futuro y la voluntad en el más alto nivel político para alcanzar todo el potencial de nuestra nación.
Estoy convencido que no existe futuro para la Argentina, ni para ningún país de la región sin un integración inteligente y nuestro país la debe llevar adelante, desde el Mercosur, junto a Brasil, Uruguay y Paraguay. En la medida que integremos mejor las cosas entre nosotros y más con el mundo vamos a tener más oportunidades de poner el talento y el trabajo de nuestra gente en todo el mundo.
Quiero destacar – una vez más – nuestro compromiso irrenunciable con la democracia, con la libertad y con los derechos humanos. El hecho de ser una zona de paz son características únicas para este proceso de integración regional, que debe seguir profundizándose y valorizando.
En estos tiempos de convulsiones y tensiones – como decías Marito – que se presentan en la región no debemos dar por sentado aquello que tanto nos costó conseguir. Hoy, una vez más, quiero transmitir mi convicción y mi certeza que los problemas en democracia se resuelven con más democracia y, fundamentalmente, con más diálogo.
Estamos siguiendo de cerca lo que está ocurriendo en la hermana Bolivia; las elecciones son la única manera de canalizar la voluntad del pueblo boliviano y los mecanismos previstos en su Constitución son los que van a permitir resolver esta situación. Como presidente de la República Argentina valoro la respuesta y la responsabilidad, que ha asumido la Senadora Áñez como presidenta, a cargo de Bolivia.
Como ustedes conocen, hoy, hay un período de transición, en mi país, y como presidente electo, que asumirá el 10 de diciembre, espero que oficialice la labor que está llevando la presidenta electa. No tengamos dudas, que el camino adoptado, por el Congreso de Bolivia, es que el que restablecerá la paz democrática respetando la voluntad de los bolivianos.
También, una vez más - como ya lo he hecho varias veces, en este foro – debo manifestar mi solidaridad con el pueblo venezolano. Las violaciones, los atropellos del dictador Maduro hacía su pueblo siguen avanzando ocasionándole severos problemas humanitarios, sanitarios a los queridos venezolanos, pero ya tienen fuertes impactos sobre todo la región, especialmente sobre los países limítrofes. Así que espero que sigamos batallando, todos juntos, para que lo antes posible se restablezca la democracia, en nuestra querida Venezuela.
Por último, quiero también hacer un comentario de lo que está sufriendo el querido pueblo chileno, esta situación difícil que enfrenta y ahí decir que respaldamos la plenitud del ejercicio democrático, con que se están encarando las demandas sociales promoviendo, una vez más – como lo dije anteriormente – el diálogo entre las fuerzas políticas y sectores representativos y, por supuesto, repudiamos el uso de violencia anárquico que no es parte de la vida democrática de una nación.
Quiero finalizar agradeciendo el compromiso con el que hemos trabajado, durante estos años. La verdad que – como dije anteriormente – con la confianza Jair, Mario, Tabaré que no está y le mando un saludo especial, con que hemos trabajado en estos años ha generado un espacio de entendimiento, de consolidación, de dinamismo para el Mercosur que no hay que abandonar, que no hay que tener miedos pues hay que seguir avanzando en la integración con el mundo, integrándonos. Sabemos que nuestros pueblos están lleno de talento, lleno de capacidades y eso va a desembocar realmente en un mejor futuro para todos.
Así que muchas gracias por este trabajo, que hemos hecho en conjunto y estoy seguro que nos seguiremos viendo. Gracias.