PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, EN LA REUNIÓN DE GABINETE AMPLIADO, CCK, CABA

Cuánta energía, quiero decirles que mientras me regalaban este aplauso, que sigo acumulando en este corazón, que va creciendo de tantas cosas que he vivido; recién veíamos las imágenes, miraba las caras de muchos de ustedes y no podía dejar de pensar cuántas cosas hemos vivido, cuántos proyectos, cuántos cambios, cuántas batallas. Así que lo primero que me surge es decirles: “gracias, de verdad, gracias de corazón, gracias”. (APLAUSOS).

Y gracias sobre todo por haberse sumado, por haberme acompañado con todo el talento, la capacidad que tiene cada uno de ustedes, la fuerza en este desafío, que nos propusimos que es cambiar la vida de los argentinos dejando atrás años de abandono. Y la verdad que recién escuchaba a todos los que hablaron, y una enorme satisfacción porque eran sentir que – de verdad – hemos logrado algo sólido, algo constructivo, potente y todos en la misma sintonía. Todos ustedes hablaban de los mismos valores, con la misma sintonía, aún el quinto pasajero, que llegó al final, que parece que hubiese estado toda la vida con nosotros, que nos ha abierto más el espacio con el pensamiento. (APLAUSOS). La verdad que es muy importante ver, también si hubiesen estado, hoy, los gobernadores radicales hubiésemos estado también en la misma sintonía; el mal tiempo – me dice – que no les permitió llegar, pero la verdad que ha habido una comunión importante de tres partidos, de tres historias distintas y cada uno ha hecho su aporte valioso y si estamos llegando a este final – no con los resultados que esperábamos – pero sí habiendo hecho un aporte importante hacía el futuro, es porque todos hicimos nuestra parte, como también dijeron, cada uno de nosotros hizo su parte y esto es realmente muy importante, muy importante.

Y también tengo que decirles que esto que formamos, que es un equipo ha tenido aciertos y desaciertos, pero la verdad es que hemos logrado transformaciones muy importantes, trascendentes, pero la más importante – y lo siento hoy más que nunca – es haber despertado a millones de argentinos a recuperar la esperanza de que se puede, argentinos exigentes, argentinos que no regalan nada, argentinos que evalúan antes de comprometerse y poner su voto, pero porque hubo muchos: “sí, se pudo”, ellos dijeron sí esto de cambio es posible y el primer se pudo es que se pudo gobernar con honestidad y todos nos vamos a casa con la conciencia tranquila y las manos limpias. (APLAUSOS).

Y también se pudo cambiar la cultura del poder, porque hemos gobernado sin abusos, con humildad y con generosidad. (APLAUSOS). Pero también, tal vez, lo más importante es que este desafío del cambio, este desafío del reformismo permanente no es algo pasajero, vino para quedarse, porque ya son millones los argentinos que no se van a resignar más y que tienen proyectos y sueños. Y ahí estamos nosotros, que vamos a seguir siendo parte de todo eso; algunos, en los próximos años, más involucrados y otros menos involucrados, pero todos ahí juntos, trabajando y teniendo un desafío nuevo por delante el de ser una oposición constructiva, que no pone palos en la rueda, al gobierno que entra. Y nos olvidamos de los que nos pusieron a nosotros, pero nosotros venimos realmente a que cada decisión que tomemos, cada comentario que hagamos, cada propuesta tiene que ser inteligente, constructiva y responsable, porque para nosotros, lo primero, son los argentinos, siempre los argentinos son los que tienen que ganar. (APLAUSOS).

Y aparte de eso, tenemos que asumir, que gracias al esfuerzo de nosotros y de millones de argentinos hemos hecho cosas que hace décadas se esperaban, que muchos ya habían abandonado pensando que iba a terminar sus días sin que sucediesen. Y sabemos que faltaron muchas más, pero por ello no podemos dejar de estar orgullosos de las cosas que logramos y que tienen que ver con cosas que decían que eran imposibles, tiene que ver con haber puesto en marcha un Estado que tenía sus estructuras oxidadas, llenas de trabas, de corruptelas y todo eso es lo que fuimos haciendo para que digan esto fue un antes y un después de lo que ustedes hicieron. Entonces cada uno de ustedes que está allí de estos casos, de estas historias, de estas soluciones concretas tiene que transmitirlas con orgullo a sus familiares, a sus amigos, compartirlas porque son de verdad y están ahí y forman parte de este gigantesco rompecabezas, que es la Argentina, como tantas veces les he dicho. Y que estas – por más pequeñas que parezcan – es una pieza más de esa Argentina que se comienza a mover, de esa Argentina que está lista para producir algo distinto. Por eso vimos lo que vimos en esa movilización tan impresionante, en este último mes, porque hay algo que despertó en la Argentina para siempre y nada de lo que viene va a ser igual a lo del pasado, porque estamos acá para decir qué es en lo que creemos, para defender nuestros valores, porque hemos sido así, somos así y vamos a ser siempre así porque lo que no se negocia, en nosotros, son nuestros valores. (APLAUSOS). Y desde ese lugar nos vamos a parar para apoyar a los argentinos en este camino de futuro, que hemos iniciado.

Yo quiero decirles que esta fue la experiencia, fue el compromiso, diría yo, más importante y más grande, que obviamente, tomé en mí vida. (APLAUSOS). Y también quiero decirles que un compromiso así no termina porque concluye una gestión de gobierno, porque finalmente lo que le pasa a uno – y yo creo que nos pasó a la mayoría de los que estamos acá – es que pasamos a tener un compromiso con el servicio público distinto, que ya es parte de nuestra esencia, entonces no nos podemos como desenchufar de un día para el otro, porque lo sentimos, porque somos ya eso. Y también quiero decirles que todos estos días, en que uno empieza a reflexionar sobre tantas cosas – y seguiremos todos reflexionar si vuelvo a pensar por qué yo me metí en esto. Y me metí en esto – como sigo discutiendo con una de mis hijas – no porque estoy loco, sino porque tal vez estoy loco de amor por mi país y su gente. (APLAUSOS).

Y lo que quiero decirles es que, después de estos años de presidente, con más de 350.000 kilómetros encima viajando, recorriendo, escuchando, viendo, lejos de sentirme decepcionado o desilusionado, hoy, les puedo decir que estoy más enamorado que nunca de mi país y de mi gente. (APLAUSOS). Entonces quiero decirles, que desde el lugar donde me toque, voy a seguir y espero que con todos ustedes trabajando para lograr ese país que nos merecemos, que realmente lo sentimos y que hoy lo vemos más cerca que nunca, porque sentimos realmente que hoy estamos parados sobre bases donde podemos proyectar un futuro distinto. Y para todos aquellos que ya, desde el año 2003, me vienen preguntando si me voy a retirar de la política, les quiero decir que estoy acá, que no me voy a ir a ningún lugar (APLAUSOS) y que, junto a este gran grupo de dirigentes que ha ido creciendo, que ha ido progresando, que se ha ido fortaleciendo y del cual, realmente, me siento inmensamente orgulloso de todos ustedes por lo que han crecido y por lo que van a darle, a la Argentina, en los años que viene, porque – por suerte – en su mayoría son bastante jóvenes que yo, quiero decirles, de verdad, que hay Mauricio para rato, o debería decir: “ para rato hay gato para rato”. (APLAUSOS)