Discurso del presidente Mauricio Macri en Saladillo, Provincia de Buenos Aires

¡Buen día! Gracias José Luis por recibirme una vez más. Gracias a todos los vecinos de Saladillo por estar acá acompañándonos en un día tan importante para los vecinos de 31 de Julio. Un día histórico, un día de esos que uno ratifica muchas cosas por las cuales trabaja, se esfuerza y quiere salir adelante.

Y yo quiero decirles que me da mucha alegría también estar acá. Tengo un cariño especial por Saladillo. Sí, la verdad que no sólo por la fuerza del "Vasco" Olarticoechea, ahora de Marquitos Delía, o de Paca Battistuzzi, que esa fuerza que tienen todos ustedes y como decía su querido intendente, que siempre pone primero a la gente en su tarea de todos los días, es un pueblo que quiere crecer, una ciudad que quiere crecer, y a través del trabajo de cada uno de ustedes.

Por eso es tan importante que hoy podamos con estas obras estructurales que llevan tiempo, que cuestan, que traen inconvenientes durante la construcción, pero que cambian vidas. Esto es lo importante de las obras, que se generan historias que son antes y después. Y esta es no seguir sufriendo, como me decía recién Daniel, no seguir sufriendo cada vez que llueve, pensado que uno va a perder toda una vida de trabajo, estar taquillos cuando volvemos a casa porque hay iluminación, no hay oscuridad, y también tener un lugar como el NIDO donde podemos ir a aprender cosas nuevas, aprender herramientas nuevas para el trabajo del futuro, porque el trabajo viene cambiando. Todos tenemos que seguir aprendiendo cosas para salir adelante. Y también, como decíamos con José Luis recién, es un lugar de reunión, donde ustedes se van a conocer más, va a crecer el capital social y va a crecer lo que todos queremos, que es vivir en paz, en familia, con tranquilidad, con los afectos. Esa es la vida linda que queremos.

Y también quiero decirles que me sigo haciendo cargo de tantos años de abandono y entonces vamos a licitar la ampliación de la planta de tratamiento de efluente cloacales. Porque en el sí se puede, vamos pudiendo cada vez más volver a tener una Argentina federal, una Argentina donde cada uno pueda desarrollarse donde nació, donde quiere vivir, con su historia, con sus afectos, donde elige, y la verdad que tener tratamiento de efluentes cloacales significa que todos estos chicos que nos acompañan hoy, que veo por acá, no estén expuestos a problemas de contaminación de napas, que traen enfermedades graves, que sabemos las consecuencias que tienen.

Y cuando llegamos al gobierno, parece increíble, pero solamente menos del 20 por ciento de los habitantes de este país, tenía tratamiento de efluentes cloacales, cuando en Uruguay, ya tienen el 90 por ciento. En estos tres años y medio, ya hemos llevado eso a más del 40 por ciento. Y esperamos en un próximo mandato poder llevarlo también al 80 por ciento. Porque eso es salud, eso es igualdad de oportunidades, eso es cuidar a la gente.

Pero esta ampliación le va a llevar tranquilidad, José Luis, a 38.000 habitantes de esta maravillosa ciudad para que sientan que realmente esta pesadilla también se empieza a terminar. Y todo esto es parte de construir algo más grande, ¿no? Más allá de esta coyuntura difícil que estamos atravesando y de la cual me hago cargo y que estamos tratando de llevar alivio a cada uno de ustedes, pero estamos todos acá convencidos de que empezamos a cruzar un puente hacia esa Argentina que queremos, esa argentina de los valores que queremos, donde nos miramos a la cara, nos decimos la verdad, no maquillamos la realidad, sino la ponemos sobre la mesa y tratamos de mejorarla y resolverla, donde los que gobernamos rendimos cuentas y explicamos lo que hacemos cerca de la gente, con honestidad. Y, a partir de eso, con un poco más de tiempo vamos a ir resolviendo problemas económicos que arrastramos hace décadas, porque nosotros somos parte de la solución, no del problema.

Vinimos a resolver problemas que hace décadas, estructurales, este país no resuelve, y juntos, trabajando como lo estamos haciendo, dándonos la cara, mirándonos a los ojos, las cosas se van a ir resolviendo.

Así que gracias por acompañarnos, gracias por estar acá, gracias queridos vecinos de Saladillo y que no tengan duda que podemos, que sí podemos, y estamos pudiendo, así que sí se puede, sí se puede sacar este país adelante para que todos sean felices. Gracias. Beso grande para todos.