PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, EN EL PLENARIO DEL G20, SOBRE EMPLEO Y EDUCACIÓN, HOTEL INTERCONTINENTAL, PROVINCIA DE MENDOZA.
(Pequeña introducción y saludos, en idioma inglés)
Es un gusto participar de esta reunión, sé que en estos días – como vienen haciéndose en todas las reuniones del G20 – se han discutido temas cruciales que impactan directamente en la calidad de vida de la gente, y especialmente cuando hablamos de calidad de vida y de futuro hablamos de educación y el trabajo, que son las únicas vías para lograr el desarrollo equitativo y sostenible.
Y les agradezco, que también - como en las otras reuniones – hayamos desarrollado un espíritu de trabajar en equipo, trabajo junto con el espíritu de consenso, con el cual hemos liderado la presidencia argentina del G20. Y como también saben, porque ha sido muy público, estamos transitando un período de cambios profundos, en un mundo que está también sufriendo cambios profundos. Y los argentinos decidimos atravesarlos con humildad, aceptando los problemas y con la templanza necesaria para seguir haciendo el esfuerzo correcto.
La misma convicción con que los convocamos, hoy, a trabajar juntos lo estamos haciendo los argentinos en todos los frentes y estamos a pocos meses de la Cumbre de Líderes y es la primera que tendrá lugar en Sudamérica, una región con ganas de aportar, aportar su visión, sus aspiraciones y de avanzar hacia un futuro mejor, poniendo las necesidades de la gente en el primer plano estamos logrando avances que invitan claramente a entusiasmarnos.
Las prioridades de nuestra presidencia, que han tenido un gran apoyo de los líderes del G20, tienen que ver con el futuro del trabajo, que claramente está en el centro de los cambios del mundo, del siglo XXI, una prioridad que pone énfasis en cómo crear trabajo colectivamente. Y las condiciones están dadas para liderar todo el potencial de las personas, en este siglo XXI.
Asumimos y asistimos a una ola de innovaciones globales tan aceleradas como nunca antes, que está dando lugar a nuevas formas de trabajo, y diseñando los procesos productivos, los cambios tecnológicos siempre en nuestra historia generaron más trabajo, no menos. Hoy, frente a las grandes oportunidades que se nos presentan dependen de nosotros en dar respuestas coordinadas y conducir estas transformaciones para que sean lo más inclusiva como sea posible. Para esto es clave que la educación provee las herramientas y las habilidades adecuadas, que permitan empoderar a las personas para forjar su propio futuro. Como siempre dijo: “que puedan elegir, elegir libremente”.
Por eso, este año nuestra presidencia propuso un mecanismo inédito, decidimos crear el Grupo de Educación, que trabaje de manera conjunta con el Grupo del Trabajo y ahora es el momento de aportar conclusiones prácticas sobre cómo forjar las oportunidades y habilidades, que preparen a nuestros ciudadanos para el cambio.
Es el momento de crear los consensos básicos para trazar una hoja de ruta, a futuro, consolidando la cultura del acuerdo y el diálogo con los trabajadores, los empresarios y el sector públicos, algo en el cual hemos puesto mucha energía, en la Argentina, en estos dos años y medio. Todos los sectores de la sociedad deben involucrarse para que la innovación tecnológica impacte positivamente en la calidad de vida de nuestras gentes. Todos debemos prepararnos para hacer nuestro mayor esfuerzo; por eso, hoy, quiero decirles que los invito a seguir trabajando y avanzar por este camino, que permitirá crear las condiciones para que todos – y esto es importante – independientemente de su origen, género o capacidad se adapte mejor y desate todo su potencial. Ese es nuestro compromiso como líderes: ayudar a que todos nuestros ciudadanos desaten todo su potencial en libertad, en armonía, en paz sabiendo que pueden ser parte y protagonistas del mundo, en el siglo XXI.
Muchas gracias y les deseo el mayor de los éxitos. (APLAUSOS).