PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, EN LA APERTURA DE UNA JORNADA DE TRABAJO SOBRE POLÍTICAS PARA COMBATIR EL NARCOTRÁFICO, EN CCK

Buenas tardes a todos: en primer lugar quiero agradecerles por estar hoy acá a cada Gobernador, a cada ministro, a cada integrante del Poder Judicial, a cada legislador, a las instituciones religiosas, que nos acompañan, y otras organizaciones que también vinieron. Y la verdad que celebro, que estemos reunidos, que estemos comprometidos trabajando con un objetivo común, como lo hacemos desde el primer día.

Y vengo de participar en la Reunión del G-7, una vez más con el honor de representar a todos los argentinos, juntos a los líderes más influyentes del mundo, y nuevamente ratificaron su apoyo al camino, que hemos elegido como sociedad.

Hoy tenemos una relación con el mundo basada en la confianza y la verdad que emociona ver las ganas que tienen de que salgamos adelante, lo convencidos que están sobre nuestro futuro.

Y el acuerdo, que celebramos con el Fondo Monetario Internacional también es una señal de confianza, es un apoyo muy importante y nos va a permitir seguir por el camino del desarrollo en el que estamos avanzando creciendo de manera sostenida, mientras nos acercamos todos los días un poco más al equilibrio fiscal.

Se trata de un acuerdo responsable; un acuerdo transparente, que pone a los argentinos en primer lugar y se concretó, gracias a un enorme trabajo en equipo. Ahora - como siempre lo fue- solucionar nuestros problemas depende de todos los argentinos. Es una tarea de todos demostrar que estamos a la altura de un país que quiere cambiar; de un país que quiere crecer. Y cuando hablo de todos, incluyo especialmente, a la dirigencia política.

Nuestra tarea es trabajar todos los días para ganarnos la confianza, el respeto de quienes nos pusieron acá, en este lugar, demostrando que tenemos madurez y la voluntad de nunca más volver a la resignación y a los atajos.

Enfrentemos los problemas, que arrastramos hace décadas, con valores como la verdad, el diálogo y la transparencia. Porque cuando faltan estos valores se deja un espacio peligroso que pasan a ocuparlo la corrupción, el autoritarismo y la extorsión. Y así entran en decadencia las instituciones; se estanca el avance de la infraestructura; se dejan de respetar las leyes y el resultado es que perdemos el rumbo.

Pero los argentinos elegimos cambiar y parte de ese cambio, también, significa no querer volver atrás. Ya no queremos que nos mientan; ya no queremos corrupción; ya no queremos parches a nuestros problemas de fondo; ya no queremos un Estado socio del narcotráfico, un negocio que creció – durante años- a espalda de un Estado que no hizo nada, nada para pararlo. Pero ahora sí, hace casi dos años, asumimos el compromiso de darle pelea junto y lo hicimos porque los argentinos queremos vivir en paz.

Hoy sí la lucha contra el narcotráfico es una política de Estado y uno de los principales objetivos de mi Gobierno. Desde el 2015 a hoy, los operativos de las Fuerzas Federales aumentaron y eso permitió que haya más de 40 por ciento más de detenidos y que se incautara casi 1.000 por ciento más de drogas sintéticas, además de cocaína y marihuana. Todo esto significa menos drogas circulando y dañando a nuestros jóvenes. Pero todos sabemos que todavía falta mucho por hacer.

Por eso vamos a seguir adelante, enfrentando las mafias y peleando contra las adicciones. Podemos hacerlo porque tenemos con qué, cada uno de los que estamos acá tenemos que seguir trabajando juntos para combatir el narcotráfico, como lo hacen todos los días las miles de familias, que lo sufren; como lo hacen los referentes barriales; instituciones religiosas y más organizaciones que se suman, día a día, a esta lucha. Porque la suma del esfuerzo de todos, cada uno desde su lugar hace la diferencia.

Depende de nosotros – señoras y señores – depende de nosotros y, sobre todo, de los que estamos hoy acá. Así que cuento con ustedes. Muchas gracias a todos. (APLAUSOS)